Yoga y pilates ofrecen beneficios distintos para la salud física y mental, según especialistas

Yoga y pilates se han posicionado como dos de las disciplinas de bajo impacto favoritas para quienes desean mejorar su estado físico y mental. Aunque suelen agruparse por sus similitudes, especialistas consultados por Women’s Health destacan que sus diferencias fundamentales resultan determinantes al elegir la práctica más adecuada según los objetivos y la condición física de cada persona.

Ambas utilizan el peso corporal para trabajar flexibilidad, postura, movilidad y coordinación, pero se distinguen en historia, propósito y estilo de movimiento.

La clave del core y la fuerza

Para el fortalecimiento del core, pilates se reconoce por entrenar de forma integral los músculos abdominales y profundos (transverso, suelo pélvico y musculatura espinal).

Kathy Bambace Salvo, directora de Evolve Yoga, Pilates & Barre, y Claire Mills, fisioterapeuta y fundadora de CoreLDN, señalaron que el pilates fortalece el core desde el interior, beneficiando la postura, flexibilidad y respiración.

El pilates fortalece el core y mejora la postura, mientras que el yoga promueve la conexión mente-cuerpo (Freepik)

Una revisión reciente respalda la eficacia del pilates para el dolor lumbar ligado a debilidad central. Ambas disciplinas pueden complementar el entrenamiento de fuerza, pero esta última enfatiza el trabajo sobre el core y el uso de equipamiento como el Reformer.

El yoga, por su parte, desarrolla fuerza global mediante posturas, equilibrios e inversiones. Para aumentos notables de masa muscular, se recomienda incorporar entrenamiento con peso adicional.

Beneficios cardiovasculares y quema calórica

El yoga integra estilos como Vinyasa, Power y Hot yoga, que elevan la frecuencia cardíaca a través del movimiento continuo y la respiración sincronizada. Pilates, aunque centrado en la técnica y el fortalecimiento muscular, también puede ofrecer componentes cardiovasculares si la clase es dinámica.

Estudios recientes indican que el pilates mejora la aptitud cardiorrespiratoria y puede generar respuestas fisiológicas comparables a caminar a baja intensidad.

El yoga y el pilates ofrecen beneficios cardiovasculares y contribuyen a la quema calórica según la intensidad de la práctica (Freepik)

En cuanto a la quema de calorías, la cifra varía según la modalidad y la intensidad. Una sesión de Bikram yoga puede consumir hasta 330 calorías en 90 minutos; en pilates mat, los principiantes alcanzan 175 en 50 minutos y los practicantes avanzados 254, acercándose a la eficacia del yoga más enérgico.

Ambas prácticas contribuyen al desarrollo de la resistencia muscular, aunque con énfasis diferentes. Pilates se orienta principalmente al core, mientras que el yoga favorece un acondicionamiento más global.

Vale destacar que las clases de yoga suelen durar de 60 a 90 minutos; mientras que las sesiones de pilates, cerca de 45 minutos.

Impacto mental y bienestar emocional

El yoga se distingue por su aporte en la reducción de la ansiedad y la mejora del bienestar emocional, gracias al foco en la respiración y la conexión mente-cuerpo. Un estudio publicado en Frontiers mostró una notable reducción del estrés en estudiantes universitarios tras 12 semanas de práctica. Este sistema impulsa la autoconciencia y la flexibilidad, tanto física como mental.

El yoga destaca por su impacto en la reducción de la ansiedad y el bienestar emocional, mientras que el pilates fortalece el core y mejora la postura (Imagen Ilustrativa Infobae)

El pilates, en tanto, tiene valor por su enfoque anatómico, la alineación y la prevención de lesiones, así como por el trabajo en la fuerza central y la postura. La variedad de estilos, desde ejercicios en mat hasta el uso de aparatos, permite personalizar la práctica para diferentes necesidades.

¿Yoga, pilates o ambos?

Las expertas consultadas por Women’s Health coinciden en que la preferencia debe guiarse por los objetivos personales, la condición física y las preferencias individuales. Cada una de las disciplinas aporta beneficios específicos y puede adaptarse a diferentes etapas y necesidades.

Ambas disciplinas pueden complementar el entrenamiento de fuerza y adaptarse a diferentes objetivos personales (Freepik)

La investigación científica avala la eficacia de ambas técnicas para el bienestar físico y mental, aunque los resultados dependen de la frecuencia, el estilo y la intensidad de la práctica.

Tanto el yoga como el pilates pueden transformarse en aliados clave para quienes buscan mejorar la postura, fortalecer el cuerpo y aumentar la resistencia, con herramientas útiles para la prevención y recuperación de lesiones a lo largo de la vida.