VIERNES, 20 de junio de 2025 (HealthDay News) — Actualmente, los pacientes con enfermedad celíaca deben enfermarse más antes de poder buscar tratamiento.
Las pruebas que ahora se usan para diagnosticar la enfermedad celíaca requieren que los pacientes coman gluten, la proteína que provoca una reacción autoinmune, y luego registren su respuesta.
Pero un nuevo análisis de sangre promete cambiar todo eso, reportaron los investigadores.
La prueba busca una respuesta inmunitaria específica al gluten en la sangre de una persona, y puede detectar la enfermedad celíaca incluso si una persona sigue una dieta sin gluten para sus síntomas gastrointestinales, informaron los investigadores en una edición reciente de la revista Gastroenterology.
«Es probable que haya millones de personas en todo el mundo que viven con enfermedad celíaca no diagnosticada simplemente porque el camino hacia el diagnóstico es difícil, y a veces debilitante», señaló el investigador sénior, Jason Tye-Din, director del Laboratorio de Investigación Celíaca del Instituto Walter y Eliza Hall en Parkville, Australia.
«Esta nueva prueba promete simplificar y acelerar un diagnóstico preciso, al mismo tiempo que evita el sufrimiento que conlleva comer gluten durante periodos prolongados para reactivar la enfermedad celíaca», añadió en un comunicado de prensa.
La enfermedad celíaca es un trastorno autoinmune en el que comer gluten hace que el sistema inmunitario ataque y dañe el intestino delgado. El gluten es una proteína que se encuentra en el trigo, el centeno y la cebada.
Los investigadores desarrollaron la prueba basándose en un descubrimiento inesperado en 2019, cuando un equipo descubrió que el marcador inmunitario interleucina 2 aumenta en el torrente sanguíneo de las personas con enfermedad celíaca después de comer gluten.
Basándose en esto, los investigadores crearon una prueba que provoca esta respuesta inmunitaria al exponer muestras de sangre al gluten en un tubo de ensayo.
Para el nuevo estudio, los investigadores probaron su análisis de sangre en muestras de 181 voluntarios reclutados en el Hospital Real de Melbourne, en Australia.
Entre los voluntarios se encontraban 75 pacientes celíacos que seguían una dieta sin gluten; 13 personas con enfermedad celíaca no tratada; 32 personas con sensibilidad al gluten no celíaca; y 61 personas sanas para servir como grupo de control.
Como se esperaba, la señal de IL-2 solo aumentó en la sangre de los voluntarios con enfermedad celíaca, lo que demuestra que la respuesta inmunitaria se puede detectar en un tubo de ensayo, dijeron los investigadores.
La prueba demostró tener una precisión del 90 por ciento para identificar a las personas con enfermedad celíaca, y del 97 por ciento para descartar a las personas que no tienen el trastorno, muestran los resultados.
«También encontramos que la fuerza de la señal de IL-2 se correlacionaba con la gravedad de los síntomas de un paciente, lo que nos permite predecir la gravedad con la que una persona con enfermedad celíaca podría reaccionar al gluten, sin que en realidad tenga que comerlo», señaló en un comunicado de prensa la investigadora principal, Olivia Moscatelli, estudiante doctoral de la Universidad de Melbourne.
La propia Moscatelli fue diagnosticada con enfermedad celíaca a los 18 años y dijo que está encantada con los resultados.
«Este avance es profundamente personal, ya que podría evitar que otros tengan que soportar el agotador proceso de diagnóstico que tuve que soportar», dijo. «Saber que he desempeñado un papel en este logro es un momento poderoso y que cierra el círculo».
Sin embargo, la tecnología utilizada por los investigadores es altamente sensible y puede detectar la señal de IL-2 a niveles muy bajos, lo que significa que esta prueba actualmente está fuera del alcance de la mayoría de los laboratorios de patología, anotó el equipo.
«Es como el equivalente a poder detectar un solo grano de arena en una piscina», dijo Moscatelli.
Los investigadores dijeron que los estudios futuros deberían ver si se podrían usar análisis de sangre similares para detectar otras afecciones, como la diabetes tipo 1, el cáncer, el rechazo de trasplantes y las enfermedades infecciosas.
Más información
La Fundación de la Enfermedad Celíaca ofrece más información sobre la enfermedad celíaca.
FUENTE: Instituto Walter y Eliza Hall, comunicado de prensa, 9 de junio de 2025