La nuez pecán es la semilla de un árbol originario de América del Norte, apreciada por su sabor y gran valor nutricional. En la Argentina, la especie vegetal fue introducida por el escritor y presidente Domingo Faustino Sarmiento a fines del siglo XIX.
La producción de la nuez pecán está creciendo y ya supera las 4.000 toneladas anuales. El cantante Abel Pintos se sumó a promoverla.
El año pasado inauguró su “Campo Escuela Recreativo”, en el que se realiza el cultivo de nuez pecán y otros frutos secos en 100 hectáreas en el partido de Mercedes en la provincia de Buenos Aires.
Ahora, un estudio científico realizado en los Estados Unidos reveló un beneficio novedoso del consumo diario de nuez pecán para la salud cardiovascular.
La investigación fue publicada en la revista The Journal of Nutrition, publicada por la Sociedad Estadounidense de Nutrición.
Los investigadores descubrieron que agregar 57 gramos diarios de nuez pecán como colación en la merienda ayuda a disminuir la apolipoproteína B, uno de los marcadores de riesgo cardiovascular.
También detectaron que ese consumo mejora un índice que anticipa el desarrollo de resistencia a la insulina.
Los investigadores son Tricia Hart, Penny Kris-Etherton y Kristina Petersen, del Departamento de Ciencias de la Nutrición de la Universidad Estatal de Pensilvania.
El resultado más relevante fue que el consumo de la nuez pecán puede ayudar a reducir las partículas dañinas de colesterol (medidas como apolipoproteína B).
También puede disminuir el valor del Índice de Resistencia a la Insulina de Lipoproteínas (LP-IR). Se trata de un indicador precoz de que el organismo comienza a tener problemas para procesar bien la insulina.
El trabajo recibió financiamiento del Consejo Estadounidense de la Nuez Pecán y también apoyo de los Institutos Nacionales de Salud, pero ninguna de estas instituciones participó en el desarrollo ni en la interpretación de los resultados.
Cómo se hizo el estudio de la nuez pecán
En el ensayo participaron 138 personas adultas, entre 25 y 70 años, con sobrepeso y al menos un factor de riesgo metabólico como presión arterial elevada, glucosa alta o triglicéridos alterados.
Los científicos dividieron a los voluntarios en dos grupos: uno reemplazó su colación habitual por 57 gramos diarios de nuez pecán y el otro mantuvo su alimentación sin cambios.
La investigación duró 12 semanas, durante las cuales se realizaron mediciones periódicas de sangre para analizar los cambios en lípidos y en partículas relacionadas con el riesgo cardiovascular.
Se prestó especial atención a la apolipoproteína B (presente en las partículas de colesterol LDL y asociada con la formación de placas en las arterias) y al índice LP-IR, que permite anticipar riesgo de resistencia a la insulina.
Según escribieron los investigadores, “reemplazar los snacks habituales por 57 gramos diarios de nuez pecán durante aproximadamente 12 semanas redujo la concentración de apolipoproteína B, partículas LDL totales y partículas TRL grandes y pequeñas, y aumentó la concentración de partículas HDL grandes y H5, comparado con continuar la alimentación habitual en adultos con riesgo cardiometabólico”.
Durante todo el período, el equipo realizó controles estrictos del consumo y análisis de muestras, además del seguimiento de cada uno de los participantes para descartar cualquier efecto adverso.
De acuerdo con los resultados publicados, “el consumo de nuez pecán mostró una reducción del índice LP-IR de 4,2 puntos, lo que se asociaría a una disminución del 7% en el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2 según datos disponibles”.
Cuántas nueces pecán se pueden comer por día
Los investigadores de los Estados Unidos sugieren que la cantidad adecuada y segura de nuez pecán es 57 gramos al día. Los voluntarios la consumieron como reemplazo de su colación durante las 12 semanas del ensayo.
Esta cantidad equivale a un puñado grande de nueces pecán. No se detectaron efectos adversos atribuibles al consumo de esa dosis y los participantes mantuvieron el plan sin inconvenientes.
Otras investigaciones citadas por el mismo equipo señalan que, con un promedio de 46 gramos diarios de frutos secos, se logra bajar apolipoproteína B en aproximadamente 4 miligramos por decilitro.
Aclararon que el efecto beneficioso de la nuez pecán corresponde al consumo como colación principal en adultos con factores de riesgo cardiometabólico, sin enfermedades crónicas y sin tratamientos que afecten el metabolismo.
Gabriela Saad, licenciada en nutrición y coordinadora del Grupo Alimentos de la Sociedad Argentina de Nutrición, dijo a Infobae: “El estudio realizado en los Estados Unidos tiene varias fortalezas. Consiste en un ensayo controlado aleatorizado (RCT), que es el estándar más alto de evidencia en nutrición. Tuvo una duración adecuada: 12 semanas es un tiempo razonable para evaluar cambios en el perfil lipídico. También se evaluaron subfracciones de lipoproteínas y no solo colesterol total y LDL”.
Sin embargo, la experta señaló las limitaciones del trabajo. La investigación solo incluyó adultos con al menos un criterio de síndrome metabólico. “No se puede extrapolar a población sana, niños y adultos mayores sin riesgo”, apuntó.
La cantidad de nuez pecán utilizada es bastante alta (unas 370 calorías aproximadamente). Eso puede ser difícil de sostener en dietas hipocalóricas o en personas con bajo gasto energético.
“Si las personas agregan el consumo de pecán a los snacks que ya consumen pueden experimentar un aumento del peso”, mencionó.
Tampoco el estudio permite saber si la mejora por el consumo de nuez se mantiene o si hay efectos adversos (como el aumento de peso) a largo plazo.
“El estudio aporta evidencia interesante y consistente con el patrón saludable que incluye frutos secos, pero no justifica una recomendación universal para todos los adultos“, opinó Saad.
La recomendación debe ser adoptar una alimentación equilibrada, con control de la cantidad (para evitar exceso de calorías). Esto es clave especialmente en personas con riesgo cardiometabólico.
“Considero que se necesitan más estudios para comparar con otro tipo de frutos secos y para saber si realmente reduce el riesgo de tener enfermedad cardiovascular. Por el momento, no se puede sugerir comer nueces pecán todos los días. Antes, hay que considerar costo, disponibilidad, sostenibilidad y comparación con otras fuentes saludables”, sostuvo la licenciada Saad.