
MARTES, 23 de diciembre de 2025 (HealthDay News) — Los árboles no solo limpian el aire, también mantienen un registro discreto del pasado.
Nuevas investigaciones sugieren que los anillos de los árboles pueden ayudar a los científicos a descubrir piezas perdidas de la historia ambiental, especialmente en lo que respecta al agua en el medio oeste.
Al estudiar cómo responden diferentes especies de árboles a condiciones húmedas y secas, los investigadores afirman que pueden comprender mejor cómo han cambiado las cuencas hidrográficas a lo largo del tiempo y cómo podrían cambiar en el futuro.
Las cuencas hidrográficas son áreas de tierra que drenan el agua hacia arroyos, ríos y lagos cercanos.
Las cuencas hidrográficas saludables ayudan a proteger el agua potable, apoyar a la fauna y mantener el equilibrio de los ecosistemas, según la Agencia de Protección Ambiental de EE. UU. Pero el cambio climático puede suponer una gran presión sobre estos sistemas, especialmente cuando los datos históricos son limitados.
«Una esperanza de vida humana no nos va a mostrar el panorama general», dijo Alessandra Bertucci, directora del estudio, estudiante de posgrado en la Universidad Estatal de Ohio en Columbus, en un comunicado de prensa.
«Por eso, utilizar los árboles para cubrir estas lagunas de comprensión es realmente importante para gestionar los recursos hídricos, incluso en cuencas con gestión intensiva», añadió Bertucci.
Los árboles suelen desarrollar un nuevo anillo cada año y el tamaño y la densidad de esos anillos pueden reflejar condiciones meteorológicas como sequías, inundaciones y largos periodos de lluvia.
Pero no todos los árboles registran estos eventos de la misma manera.
Por eso el equipo de investigación descubrió que usar varias especies de árboles ofrece una imagen más clara que depender solo de una.
El estudio se centró en los árboles ribereños, que crecen cerca de ríos y arroyos en el Medio Oeste. Los investigadores descubrieron que muchos de estos árboles son especialmente buenos para registrar periodos húmedos y secos pasados, lo que los hace útiles para comprender los patrones regionales de agua.
El trabajo fue presentado recientemente en una reunión de la Unión Geofísica Americana en Nueva Orleans.
Para recopilar sus datos, los investigadores recogieron muestras de núcleos de árboles en zonas donde los registros a largo plazo de cuencas hidrográficas son escasos, incluyendo la Reserva Natural Estatal Old Woman Creek de Ohio, cerca del lago Erie.
Estudiaron tres especies comunes de árboles y compararon el ancho y la densidad de los anillos con datos climáticos registrados.
Dado que gran parte del Medio Oeste está muy cultivada, los datos precisos sobre el agua son fundamentales. Bertucci afirmó que los registros históricos limitados pueden llevar a estimaciones erróneas de inundaciones o sequías pasadas, lo que puede influir en las decisiones sobre el uso y la conservación del agua.
Con los datos actualizados de los anillos de los árboles, el equipo espera construir modelos que ayuden a predecir cómo cambiarán los patrones meteorológicos y el caudal de agua en las próximas décadas.
«Si podemos completar esos datos históricos y entender qué esperar, podremos planificar mejor cómo gestionar nuestros recursos hídricos en el futuro», dijo Bertucci.
Los investigadores planean ampliar su trabajo muestreando más especies de árboles y estudiando nuevas cuencas hidrográficas. Los hallazgos podrían ayudar a agricultores, gestores del agua y comunidades a tomar decisiones más inteligentes sobre la conservación del agua.
«El agua es vida», dijo Bertucci. «Literalmente no podemos vivir sin ella, así que es importante protegerla y asegurarnos de que la cuidamos, porque es nuestro salvavidas.»
La investigación presentada en reuniones debe considerarse preliminar, hasta que se publique en una revista revisada por pares.
Más información
La Fundación Arbor Day tiene más información sobre árboles y agua.
FUENTE: Universidad Estatal de Ohio, comunicado de prensa, 19 de diciembre de 2025