Quiero hablar sobre la magnitud de la hipertensión arterial, pues las cifras y los porcentajes de personas hipertensas resultan alarmantes. Si me presta atención un momento, va a comprender la relevancia del tema.

El 40% de los adultos padece hipertensión arterial. Esto significa que cuatro de cada diez personas se encuentran afectadas. Aún más preocupante es que el 50% de quienes tienen hipertensión lo desconoce.

Entre quienes saben que la padecen, solo la mitad recibe tratamiento. De quienes están en tratamiento, únicamente el 20% logra regularizar sus valores de presión arterial, ya sea porque no toman la medicación de manera adecuada o porque necesitan ajustar el tratamiento.

Moderar la sal y potenciar el consumo de potasio no solo ayuda a mantener la presión arterial bajo control, sino que representa una de las estrategias más efectivas y accesibles para proteger la salud del corazón (Freepik)

Esta situación tiene consecuencias graves. La hipertensión representa una de las enfermedades cardiovasculares más frecuentes y es una de las más sencillas de diagnosticar y tratar.

El objetivo siempre es el mismo: evitar las complicaciones.

La hipertensión puede provocar infarto agudo de miocardio, accidente cerebrovascular, insuficiencia cardíaca, arritmias, insuficiencia renal y problemas circulatorios en las piernas. Además, incrementa el riesgo de desarrollar enfermedad de Alzheimer, un dato que muchas personas suelen desconocer.

Pero es una enfermedad silenciosa, muchas veces no presenta síntomas y, por eso, la mayoría no controla su presión regularmente.

Le hago una pregunta directa: ¿conoce el valor de su documento de identidad? Probablemente sí. Entonces, ¿sabe cuál es el valor de su presión arterial? Esa información puede salvarle la vida. Controle su presión regularmente. Espero que esta información le sea útil.

Cómo medir la presión arterial de forma correcta

 La medición de la presión arterial se expresa a través de dos valores ubicados uno sobre el otro, en milímetros de mercurio (mm Hg) (Freepik)

Como ya he detallado en Infobae, medir la presión arterial de forma adecuada es clave para un diagnóstico confiable. Antes del control es necesario permanecer sentado, tranquilo, y en reposo durante al menos cinco minutos.

Evitar la ingestión de café, bebidas energizantes o fumar al menos treinta minutos antes, ya que estos factores pueden alterar los resultados.

El manguito del tensiómetro debe colocarse directamente sobre la piel del brazo, no sobre la ropa. El brazo debe estar apoyado y a la altura del corazón. Durante la medición, no se debe hablar ni moverse. Es recomendable realizar al menos dos mediciones con un intervalo de uno o dos minutos entre cada una y considerar el valor promedio.

Como la hipertensión generalmente no da síntomas, las personas no reciben un diagnóstico oportuno de la hipertensión. Debe medirse la presión arterial periódicamente (Imagen Ilustrativa Infobae)

Los equipos automáticos digitales hoy permiten mediciones sencillas en el hogar. Es importante utilizar dispositivos validados por organismos internacionales y, ante dudas, realizar comparaciones con la medición que realiza el profesional en consultorio.

En cuanto a los valores, estadísticamente, uno no debiera tener más de 140/90 mmHg (es decir, 14 o 140 de máxima y más de 9 o 90 de mínima), pero los médicos siempre tratamos de que sea un poco menor que eso, 135-85, pero los límites son esos.

Conocer y registrar los valores personales ayuda a detectar la hipertensión a tiempo y reduce el riesgo de complicaciones graves. Llevar un control regular y registrar los resultados en una libreta o app facilita el seguimiento médico y el ajuste del tratamiento si fuese necesario.

* El doctor Daniel López Rosetti es médico (MN 62540) de la Facultad de Medicina de la Universidad de Buenos Aires (UBA). Presidente de la Sección de Estrés de la World Federation for Mental Health (WFMH). Y es autor de libros como: “Emoción y sentimientos” (Ed. Planeta, 2017), “Equilibrio. Cómo pensamos, cómo sentimos, cómo decidimos. Manual del usuario.” (Ed. Planeta, 2019), entre otros.