VIERNES, 18 de julio de 2025 (HealthDay News) — Una mala salud dental podría ser un presagio de enfermedades crónicas como la diabetes tipo 2 y la enfermedad cardiaca, advierte un estudio reciente.

Las personas a las que les faltaban dientes, lenguas recubiertas y otros signos de mala salud bucal también eran más propensas a tener un nivel elevado de azúcar en la sangre, colesterol alto y una función renal disminuida, informaron los investigadores en una edición reciente de la revista Journal of Oral Rehabilitation.

«En general, nuestros resultados sugieren que una disminución en la función oral puede ser un factor de riesgo para enfermedades relacionadas con el estilo de vida. Por lo tanto, mantener una buena salud bucal es el primer paso para mantener la salud general», señaló en un comunicado de prensa el investigador, el Dr. Mitsuyoshi Yoshida, catedrático de odontología y cirugía oral-maxilofacial de la Universidad de Salud de Fujita, en Japón.

En el estudio, los investigadores dieron seguimiento a la salud de 118 hombres y mujeres a partir de los 50 años. Compararon los resultados de los exámenes dentales de 2021 con los de los exámenes físicos de 2021 y 2023.

Los exámenes dentales analizaron el nivel de recubrimiento de la lengua, la sequedad de la boca, el número de dientes funcionales restantes, la presión máxima de la lengua, la capacidad para masticar y tragar, y la diadococinesis oral (OD), una prueba que mide la velocidad y la precisión con la que una persona puede repetir sílabas.

Los resultados muestran que:

Las personas con niveles altos de azúcar en la sangre tenían un número significativamente menor de dientes restantes y peores puntuaciones de OD.

Las personas con colesterol alto tenían la lengua cubierta y peores puntuaciones de OD.

Las personas con función renal disminuida tenían lenguas recubiertas, menos dientes restantes y peores puntuaciones de OD.

«Los resultados de este estudio indican que una disminución en la función oral puede aumentar el riesgo de enfermedades relacionadas con el estilo de vida y facilitar la progresión de la fragilidad», escribieron los investigadores en su artículo.

La salud bucal podría vincularse con estas enfermedades crónicas a través de bacterias malsanas que crecen en una boca mal cuidada, o por la inflamación que se encuentra en las encías y los dientes enfermos, especularon los investigadores.

Los investigadores anotaron que se trataba de un estudio observacional y que no se pudo establecer un vínculo causal directo entre la salud dental y las enfermedades crónicas.

La asociación también podría ir en sentido contrario, ya que las enfermedades crónicas aumentan el riesgo de mala salud bucal y no al revés.

El equipo de investigación dijo que se necesitan estudios más grandes que involucren a más personas para comprender mejor cómo se relacionan la salud dental y las enfermedades crónicas.

Mientras tanto, argumentan que no estaría de más incluir los recuentos de dientes y las pruebas de OD como parte del chequeo regular de una persona, ya que estos podrían ser indicadores de enfermedades ocultas.

«Implementar pruebas de función oral durante los chequeos de salud podría conducir a una mejor promoción de la salud», concluyeron los investigadores.

Más información

La Clínica Cleveland ofrece más información sobre cómo la salud bucal se relaciona con la salud general.

FUENTES: Universidad de Salud de Fujita, comunicado de prensa, 10 de julio de 2025; Revista de Rehabilitación Oral, 17 de abril de 2025