El orégano aporta beneficios nutricionales y medicinales que superan su uso como condimento en la cocina mediterránea y latinoamericana (Imagen Ilustrativa Infobae)

El orégano, frecuente en la cocina mediterránea y latinoamericana, aporta beneficios nutricionales y medicinales que van más allá de su función como condimento.

Según expertos citados por Cleveland Clinic, esta hierba realza el sabor de los platos y favorece la lucha contra bacterias, la reducción del estrés y el aporte de vitaminas esenciales para el organismo.

Propiedades y compuestos destacados

Especialistas de la Clínica Cleveland resaltan que ayuda a combatir infecciones y disminuir la inflamación, dos factores vinculados a la prevención de enfermedades cardíacas y otras afecciones crónicas.

Devon Peart, dietista registrada de la clínica, señaló que “el orégano contiene una variedad de compuestos antioxidantes”, lo que justifica su uso tradicional en la medicina desde hace más de dos mil años, en civilizaciones como la antigua Grecia. A lo largo de la historia, esta hierba ha sido empleada para tratar molestias respiratorias, digestivas y dolores leves, una práctica que todavía se mantiene en la medicina alternativa moderna.

El empleo de la hierba en la medicina tradicional abarca molestias respiratorias, digestivas y dolores leves (Imagen Ilustrativa Infobae)

Uno de los compuestos más estudiados del orégano es el timol, también presente en el tomillo, reconocido por su acción antibacteriana. Además, la presencia de carvacrol contribuye a inhibir el crecimiento de varios microorganismos patógenos.

Sonia Uyterhoeven, jardinera de educación pública del Jardín Botánico de Nueva York, destacó en The Independent que el orégano concentra estos compuestos en sus hojas, donde se encuentran los aceites esenciales responsables de sus propiedades aromáticas y terapéuticas.

Composición nutricional

El análisis nutricional del orégano revela una fuente importante de vitamina C, fundamental para fortalecer el sistema inmunitario y mejorar la absorción de hierro. También contiene vitaminas E y A, que ayudan a mantener una visión adecuada y contribuyen a la protección celular contra el daño oxidativo.

Entre sus nutrientes destaca el folato, una vitamina del grupo B esencial para la formación y el crecimiento celular, especialmente relevante en etapas como el embarazo.

El orégano es una fuente relevante de vitamina C, vitamina K, folato, calcio, hierro y magnesio, esenciales para la salud inmunitaria y ósea (Imagen Ilustrativa Infobae)

El orégano resalta por su alto contenido de vitamina K, indispensable en la coagulación sanguínea y la salud ósea. Asimismo, aporta calcio, hierro y magnesio en cantidades significativas respecto a otras hierbas secas, lo que refuerza su valor nutricional.

Según Peart, los flavonoides presentes en el orégano otorgan efectos antibacterianos y antiinflamatorios, características asociadas a una posible reducción del riesgo de cáncer y enfermedades cardiovasculares. La suma de timol y carvacrol potencia la capacidad antimicrobiana de la planta, ampliando sus usos en la alimentación y la fitoterapia.

Evidencia científica y recomendaciones de consumo

La evidencia científica sobre el orégano está en desarrollo. Estudios realizados en 2019 han observado mejorías en ansiedad y depresión en ratas tratadas con extracto de orégano, pero estos resultados aún no se han comprobado en humanos. Por ahora, los especialistas consideran que sus beneficios son prometedores, aunque requieren mayor validación en ensayos clínicos con personas.

Estudios científicos sugieren que el orégano podría reducir el riesgo de cáncer y enfermedades cardiovasculares, aunque se requieren más investigaciones en humanos (Imagen Ilustrativa Infobae)

Respecto al consumo, los expertos consultados por The Independent aseguran que no existe un límite preciso para el uso de orégano seco en la cocina. Puede añadirse como condimento o en infusiones sin riesgo para adultos sanos. Sin embargo, advierten que el aceite esencial de orégano no debe ingerirse, dado que su concentración puede resultar tóxica.

Además, Devon Peart indicó que los taninos del orégano, responsables de su sabor amargo, tienen la capacidad de dificultar la absorción de minerales si se consume en grandes cantidades. Quienes toman anticoagulantes deben prestar atención, ya que la vitamina K del orégano puede alterar la coagulación sanguínea y la eficacia de esos medicamentos.

Aplicaciones cotidianas y precauciones

En la práctica diaria, el orégano puede incorporarse fácilmente a ensaladas, sopas, carnes, guisos, pastas y productos de panadería. Además de su empleo como especia, puede prepararse en forma de infusión y utilizarse en remedios caseros para aliviar malestares digestivos leves.

El de orégano favorece la relajación de los músculos del sistema digestivo, ayudando en casos de hinchazón o gases. Según Peart: “Los compuestos químicos que contiene pueden estimular los jugos digestivos que ayudan a descomponer los alimentos de manera más eficiente”.

El té de orégano ayuda a aliviar molestias digestivas leves y favorece la relajación muscular del sistema digestivo (Imagen Ilustrativa Infobae)

A modo de recomendación, los expertos indican que incorporar pequeñas cantidades diarias de orégano al menú puede aportar beneficios concretos para la salud, siempre que se respeten las precauciones mencionadas, principalmente en personas con problemas de coagulación o bajo tratamiento farmacológico específico.

El orégano se destaca como una hierba aromática que no solo añade sabor a las comidas, sino que también suma propiedades antioxidantes y antimicrobianas, vitaminas claves y potenciales efectos protectores frente a enfermedades, con la salvedad de evitar el exceso y el uso de sus aceites esenciales en forma pura.