Las proteínas son indispensables para fortalecer músculos, regenerar tejidos y fabricar hormonas esenciales para el cuerpo (Imagen ilustrativa Infobae)

La proteína es un nutriente esencial para el correcto funcionamiento del organismo y resulta fundamental tanto para quienes buscan mantener una vida saludable como para aquellos que desean ganar masa muscular o perder peso.

Este macronutriente interviene en numerosos procesos biológicos y estructurales, y su consumo adecuado no solo facilita el desarrollo muscular, sino que también contribuye al fortalecimiento de los huesos y la regeneración de la piel.

Conocer los alimentos que concentran mayores cantidades de proteínas puede ser una herramienta clave para optimizar la dieta diaria y cuidar la salud de forma integral.

Qué son las proteínas y por qué ayudan a fortalecer músculos, huesos y piel

Las proteínas están presentes en todas las células del cuerpo y forman parte fundamental de tejidos como músculos, huesos, piel, cabello y órganos. Este macronutriente se compone de más de 20 tipos de aminoácidos, algunos de los cuales el cuerpo no puede producir por sí mismo y deben obtenerse a través de los alimentos.

De acuerdo con investigaciones de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Harvard, las proteínas actúan como bloques de construcción indispensables y ejecutan tareas como la fabricación de enzimas, el transporte de oxígeno en sangre y la reparación de tejidos.

Incorporar alimentos como yogur griego y quinoa en la dieta facilita la reparación muscular y la preservación ósea (Imagen Ilustrativa Infobae)

En lo que respecta a la estructura corporal, las proteínas juegan un papel decisivo en la recuperación y el crecimiento muscular, especialmente tras ejercicios que ocasionan micro lesiones en las fibras musculares. Estos nutrientes reparan y refuerzan dichos tejidos, favoreciendo un desarrollo muscular más consistente y sólido.

Además, en la mediana edad y la adultez mayor, el aumento del consumo de proteína puede ayudar a preservar la masa muscular y la fuerza, factores cruciales para mantener la movilidad y prevenir la fragilidad.

Sumado a sus funciones estructurales, las proteínas intervienen en la síntesis de hormonas y enzimas que regulan el metabolismo, fortalecen el sistema inmunológico y contribuyen a la salud general del organismo.

Sin un aporte adecuado, pueden surgir síntomas como fatiga, debilidad, pérdida de masa muscular, problemas dermatológicos y una menor capacidad de defensa frente a enfermedades.

Cuáles son los 15 alimentos con más proteínas

El aporte de proteína en la dieta puede provenir tanto de alimentos de origen animal como vegetal. Diversos organismos de salud y expertos en nutrición recomiendan que los adultos consuman entre el 10% y el 35% de sus calorías diarias en forma de proteínas, lo que equivale, como mínimo, a 0,8 gramos por cada kilogramo de peso corporal.

Consumir proteínas distribuidas a lo largo del día optimiza su absorción y potencia los beneficios estructurales en el cuerpo (Imagen Ilustrativa Infobae)

A continuación, estos son los 15 alimentos con más proteínas, junto a sus características principales:

  1. Salmón: fuente animal rica en omega 3 y con casi 22 gramos de proteína por porción de 85 g, además de vitaminas del grupo B y selenio.
  2. Carnes rojas magras: alto contenido proteico, hierro y zinc; las opciones magras aportan más nutrientes y menos grasa saturada.
  3. Pollo: la pechuga de pollo ofrece hasta 24 gramos de proteína por porción de 113 g, junto a fósforo, vitamina B6 y selenio.
  4. Huevo: aproximadamente 13 gramos de proteína por cada 100 g, destacando su alto valor biológico para el organismo.
  5. Yogur griego: casi 20 gramos de proteína por una porción de 200 g, además de calcio y vitaminas B.
  6. Garbanzos: una taza contiene 14,5 gramos de proteína y aporta fibra, contribuyendo al control del colesterol y al aumento de saciedad.
  7. Quinoa: más de 8 gramos de proteína por taza cocida, con todos los aminoácidos esenciales, fibra y minerales como zinc.
  8. Mantequilla de maní: alrededor de 8 gramos de proteína por dos cucharadas, también es rica en grasas saludables.
  9. Ricota: hasta 23 gramos de proteína por taza en su versión baja en grasa, ideal para sumar proteína sin muchas calorías.
  10. Semillas y frutos secos: almendras, nueces y semillas como las de calabaza o girasol aportan entre 15 y 21 gramos de proteína por cada 100 g y grasas saludables.
  11. Soja y derivados: una taza cocida de soja puede tener hasta 28 gramos de proteína, además de minerales y fibra; el tofu y la bebida de soja también son buenas opciones.
  12. Carne de cerdo magra: aporta unos 21,6 gramos de proteína por 100 g, con un perfil equilibrado de aminoácidos y coste moderado.
  13. Porotos y otras legumbres: desde 12 hasta 26 gramos de proteína por taza, también proporcionan fibra y minerales.
  14. Camarones: fuente proteica baja en calorías; además, contienen yodo necesario para la función tiroidea.
  15. Avena: entre el 11% y 17% de su peso seco corresponde a proteína.

Otros productos destacados por su contenido en proteínas, según tablas especializadas de la Clínica Universidad de Navarra, son el atún en lata (32 g por 100 g), lomo embuchado (50 g por 100 g), queso parmesano (28 g por 100 g), sardinas, bacalao, gambas, pistachos, caballa, diversos quesos, leche, brócoli, espinacas y otras verduras.

Cómo consumir alimentos con proteínas para absorber sus nutrientes

Las legumbres, ricas en fibra y proteínas, no solo aportan energía, sino que también contribuyen al control del colesterol (Imagen Ilustrativa Infobae)

Obtener todos los beneficios de las proteínas no solo depende de la cantidad ingerida, sino también de la distribución y la variedad de los alimentos a lo largo del día. Los expertos sugieren no concentrar la ingesta proteica en una sola comida, sino repartirla entre desayuno, almuerzo, merienda y cena, lo que facilita una mejor síntesis y utilización de los aminoácidos.

Investigaciones recientes muestran que consumir alrededor de 20 gramos de proteína en torno a los entrenamientos (ya sea antes o después) puede estimular la ganancia de masa muscular.

Además, incluir alimentos ricos en proteína en la última comida favorece la reparación de tejidos durante el sueño, aprovechando el pico de recuperación nocturna.

Es fundamental seleccionar fuentes de proteína variadas para cubrir todos los aminoácidos esenciales, especialmente si se mantiene una dieta vegetariana o vegana. Las combinaciones entre legumbres y cereales, o incorporar derivados como tofu y bebidas vegetales, garantizan un aporte completo.