El hip thrust con barra, también conocido como empuje de cadera con barra, se ha consolidado como una de las progresiones avanzadas más efectivas dentro del entrenamiento de glúteos. Su técnica y resultados lo posicionan como un movimiento clave en rutinas de fuerza y acondicionamiento físico.
Según la revista Healthline, su principal ventaja frente a otros ejercicios es que activa de forma directa el glúteo mayor, el músculo más potente del grupo, al mismo tiempo que trabaja el glúteo medio y el menor. Esto lo convierte en una opción ideal para un desarrollo integral de la musculatura de dicha región, promoviendo fuerza, estabilidad y rendimiento.
Paso a paso de cómo hacer un empuje de cadena con barra
Así como en el resto de los ejercicios, lo más importante es realizarlos con la técnica adecuada y este no es la excepción. Para alcanzar la mayor eficiencia en la rutina de entrenamiento, en el primer paso, la persona debe sentarse en el suelo con la espalda apoyada en un banco, la barra sobre las caderas y los pies apoyados en el suelo con las rodillas flexionadas.
En el segundo paso, ya con la barra encima, deberá sujetarla con ambas manos, separadas un poco más del ancho de los hombros. Luego, deberá impulsar los talones para levantar las caderas, hasta que el torso quede paralelo al suelo.
En el cuarto paso llega la parte más importante para ejercitar el músculo y se debe hacer una pausa por un momento en la parte superior.
Para completar el ejercicio, se deben bajar las caderas y sostener el centro del cuerpo contraído.
Beneficios del hip thrust con barra
La revista Well+Good señala que este ejercicio, que algunos consideran un reemplazo de las sentadillas y el peso muerto, ofrece múltiples beneficios que lo convierten en una herramienta clave dentro de las rutinas de entrenamiento.
El principal beneficio es un mayor desarrollo del glúteo mayor, dado que permite un trabajo más completo del músculo. Además, la activación de otros grupos musculares mejora el rendimiento en otros levantamientos y potencia la fuerza del cuádriceps.
Un aspecto destacado es la implicación de los músculos del core para estabilizar la pelvis, lo que contribuye a una mejora en la coordinación y el equilibrio.
Errores comunes en la ejecución
Según Well+Good, entre los errores más frecuentes al realizar este ejercicio se encuentra la omisión de una almohadilla para la barra, lo que puede generar incomodidad y limitar la carga utilizada.
Otro error habitual es el movimiento desacoplado entre caderas y torso, lo cual afecta la técnica y disminuye la eficacia del ejercicio. La altura del banco también influye en la ejecución: si no es adecuada, el estímulo sobre los glúteos se reduce.
Asimismo, la posición del cuello resulta clave. Mantenerlo en una posición neutra evita tensiones innecesarias. La colocación de los pies también debe ser precisa para lograr una óptima activación de los glúteos y prevenir molestias en rodillas o espalda baja.
Cómo integrarlo a la rutina de entrenamiento
En cuanto a su incorporación a la rutina, Well+Good recomienda no realizarlo en todas las sesiones, sino incluirlo en los días enfocados al tren inferior.
Para avanzar de forma segura, se sugiere comenzar solo con la barra y aumentar la carga progresivamente en cada sesión. Una estructura inicial viable es de tres a cinco series de ocho a doce repeticiones, asegurando que al final de cada una se alcance una fatiga muscular considerable.
A medida que se incrementa el peso, se puede reducir la cantidad de repeticiones para preservar la calidad del movimiento. Well+Good concluye que, al seguir estas indicaciones y prestar atención a la técnica, el hip thrust con barra puede convertirse en un ejercicio fundamental para quienes buscan fortalecer glúteos, mejorar el rendimiento y prevenir lesiones.