La nutrición de los deportistas es un pilar fundamental, junto con el entrenamiento y el descanso adecuado, para el rendimiento deportivo y la prevención de lesiones. En las últimas horas un video grabado por Jonás Rodríguez, arquero de las inferiores de San Lorenzo, puso en foco las condiciones de vida y, en particular, la alimentación diaria de los jóvenes futbolistas alojados en la pensión del club.

La filmación, difundida a través de redes sociales, reflejó el día completo de Rodríguez, nacido en 2008 y uno de los jugadores de las divisiones inferiores que se forman en el predio del club. El video mostró la rutina matutina, allí se ve que el futbolista relata que se levantan a las siete de la mañana y desayunan café acompañado de pan y queso.

En el almuerzo, el menú consiste en pan de carne con arroz y ensalada, mientras que la merienda incluye pan, queso y chocolatada, y al final del día, una cena de ravioles y tortilla.

La rutina alimentaria, sumada al estado de las instalaciones y campos de juego, reavivó el debate en redes sociales sobre la calidad de los recursos destinados a las divisiones inferiores.

Infobae consultó a los licenciados especialistas en nutrición deportiva Emilia Martínez, nutricionista en el Club Estudiantes de La Plata; a Gabriel Fantuzzi, coordinador de la diplomatura en Medicina Deportiva Pediátrica de la Universidad Favaloro; y a Eugenia Gancedo, actual nutricionista de la selección nacional femenina y masculina de canotaje, y con experiencia previa en la pensión de un club de fútbol de primera división de la Ciudad de Buenos Aires.

Qué debe comer un futbolista de alto rendimiento

La falta de variedad y fibra en la dieta de jóvenes futbolistas puede afectar su desarrollo físico

Ante la consulta de Infobae, la licenciada Martínez detalló: “Los futbolistas necesitan hidratos de carbono, pero lo que se puede mejorar es la calidad de ese hidrato: por ejemplo, reemplazar el arroz blanco por arroz integral y mejorar la calidad del pan, que sea también sea integral».

“En los clubes hay un presupuesto a respetar y una debe manejarse dentro de ese límite. Muchas veces hay diferencias entre lo que un profesional quiere dar y lo es factible dar a los jugadores, además de las posibilidades de la cocina. La gente quizás ve esas imágenes y lo cuestiona, pero son muchos los factores que influyen“, agregó Martínez.

Por su parte, Fantuzzi señaló que en el caso del video, “el jugador explica sólo una jornada de lo que comen en la pensión. Leído aisladamente, claro que puede parecer que falta variedad, pero es solo un día”.

En tanto, Gancedo al referirse a los componentes esenciales de la dieta, explicó: “En primer lugar tenemos los macronutrientes, que son los hidratos de carbono, las proteínas y las grasas. Después están los micronutrientes, que incluyen vitaminas y minerales, los cuales necesitan ingerirse en menor cantidad pero son igual de importantes”. El consumo de estos varía según la etapa del entrenamiento y la intensidad, subrayó Gancedo, quien es además asesora nutricional de los equipos de rugby juveniles del Club San Andrés.

“Tras más de 20 años trabajando con nutrición deportiva, mi mensaje es volver a la base: cubrir los requerimientos de energía y nutrientes de la mejor manera posible, sin buscar soluciones mágicas. La clave está en la variedad de alimentos y en aportar vitaminas y minerales desde frutas y vegetales. Cuantos más colores haya en el plato, mejor. Nuestro trabajo, el de los nutricionistas es, justamente, adaptar el aporte de macronutrientes a los recursos que hay en el momento. No todos tienen acceso a variedad de carnes, frutas o vegetales, y uno debe ajustarse a lo que hay, sin perder de vista el equilibrio», indicó Fantuzzi.

A la hora de definir cómo debe alimentarse un futbolista joven e alto rendimiento, los profesionales coinciden en que el menú cambia si el joven vive en su casa o en una pensión, donde los platos suelen adaptarse a los gustos de la mayoría y a las posibilidades de la cocina colectiva.

La alimentación colectiva en pensiones deportivas debe cubrir todos los nutrientes

Según consideró Gancedo, el desayuno tiene un papel central porque suele anteceder al entrenamiento matutino y debe incluir alimentos ricos en hidratos de carbono, como pan, avena, granola o frutas, acompañados de alguna fuente proteica –queso, huevo, leche– para hacer la primera comida más completa.

Según Gancedo, el almuerzo y la cena recomendado para un atleta deben aportar buenas fuentes de proteínas —carnes, pollo, huevo— combinadas con hidratos de carbono como arroz, pastas o papas, y sumar verduras, un componente que frecuentemente escasea en la dieta de los juveniles.

Para la merienda, la especialista recomienda apostar a opciones prácticas y energéticas, como sándwiches integrales con queso y fruta, yogur con granola o preparaciones que puedan trasladarse fácilmente, remarcando la necesidad de planificación para garantizar el aporte adecuado de nutrientes a lo largo de toda la jornada.

La especialista destacó que, en términos generales, la alimentación de los jóvenes futbolistas en Argentina suele carecer de fibra alimentaria y variedad de nutrientes, aunque reconoció las limitaciones prácticas de una cocina colectiva en las pensiones deportivas: “A veces los chicos rechazan las verduras y las comidas deben adaptarse para evitar desperdicios”.

La falta de variedad y fibra en la dieta de jóvenes futbolistas puede afectar su desarrollo físico

Además, subrayó la importancia del trabajo interdisciplinario entre nutricionistas y médicos de los clubes para asegurar controles médicos regulares y ajustes según las necesidades individuales de cada deportista.

Respecto al riesgo de una dieta insuficiente o desbalanceada, Gancedo advirtió: “Un deportista sin suficiente energía ni nutrientes puede sufrir fatiga, lesiones e incluso problemas en el desarrollo físico. También es clave cuidar la hidratación, porque una mala ingesta de líquidos y sales puede derivar en dolores de cabeza, calambres y hasta golpes de calor en épocas estivales”.

La licenciada en nutrición subrayó que, además de cubrir macronutrientes en cantidad y calidad, es indispensable prestar atención al consumo de minerales como zinc, calcio y hierro, especialmente en etapas de crecimiento. “Lo recomendable es hacer controles de laboratorio de manera regular —mínimo cada seis meses— para detectar deficiencias y ajustar la dieta”, detalló ante Infobae.

Fantuzzi amplió: “Lo que necesita un deportista en estas edades es cubrir los tres macronutrientes: hidratos de carbono, como arroz, papa, batata, fideos, pastas y pan, para aportar energía; proteínas para favorecer el crecimiento, el desarrollo y la recuperación, idealmente de origen animal como carnes, huevos y lácteos, o de origen vegetal como las legumbres; y grasas, priorizando las de buena calidad, como aceites, y reduciendo las saturadas que aportan algunas carnes. Además, frutas y verduras por su aporte de vitaminas, minerales y fibra, todo enmarcado en una buena hidratación diaria.”

Café y pan con queso

El desayuno de café, pan y queso reabre el debate sobre la nutrición en divisiones inferiores

Respecto al menú que se ve en el video de la pensión de San Lorenzo y el revuelo que generó, la licenciada Martínez dijo: “Lo primero que hay que averiguar es si esa alimentación es así todos los días o hay más variedad el resto de la semana, porque el video muestra solo un día puntual. No se ve muy presente el tema de la fruta, que junto con las verduras aportan vitaminas, minerales y antioxidantes, y normalmente es lo que menos consumen”.

Al hablar de la adaptación de la dieta al gusto de los jóvenes y la introducción gradual de alimentos más saludables, Martínez consideró que “lo ideal sería darles lo mejor, porque son chicos y el desgaste físico es enorme. Pero también hay cuestiones de gustos y preferencias: a veces aunque el ideal sea arroz integral con pechuga de pollo, vegetales y demás, muchos no están acostumbrados, no les gusta y no comen. De a poco hay que introducir nuevos alimentos para familiarizarlos, aunque muchas veces hay que ceder ante eso».

En cuanto al desayuno mostrado por el joven arquero de San Lorenzo, Gancedo comentó: “Viendo ese desayuno, con pan y queso, destaco que tiene hidratos de carbono y proteínas, lo cual está bien. Lo que habría que analizar es la cantidad, porque lo visto en el video parece poco para un deportista. Entiendo, de todos modos, que en una pensión la comida se adapta a la mayoría y no siempre se disponen alternativas como pan integral”.

Respecto al almuerzo, Gancedo señaló que la combinación de pan de carne con arroz resulta adecuada en cuanto a aportes energéticos, aunque puede ser necesario incorporar más verduras para aumentar el contenido de micronutrientes. Consultada sobre la merienda, remarcó: “La leche chocolatada funciona muy bien como recuperación después del esfuerzo físico, y la combinación con pan y queso aporta energía y proteínas. La clave estaría en revisar las cantidades y sumar alimentos integrales si es posible”.

Además, se refirió a la cena del video, compuesta por ravioles y tortilla, en ese caso la cantidad de carbohidratos podría estar cubierta, aunque el aporte proteico podría mejorar y sería ideal conocer si además hubo postre con lácteos para añadir más proteína.