El Servicio Meteorológico Nacional anticipa registros de temperatura superiores a lo normal en regiones clave del país durante el verano 2026 (Imagen Ilustrativa Infobae)

El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) difundió el pronóstico climático trimestral para enero, febrero y marzo de 2026, en el que advirtió que varias regiones de Argentina podrían experimentar temperaturas y precipitaciones por encima de los valores habituales para esa época del año.

De acuerdo con el informe del SMN, se proyectan temperaturas superiores a lo normal en Cuyo, La Pampa, Buenos Aires y el sur del Litoral, así como una tendencia “normal o superior a lo normal” en gran parte del norte del país y sectores de la Patagonia.

Respecto a las lluvias, el pronóstico anticipa acumulados “normales o superiores a lo normal” en el Noroeste Argentino (NOA) y el sur de la Patagonia, mientras que en el resto de las regiones las precipitaciones se mantendrían en los valores medios históricos.

El SMN destaca una tendencia marcada hacia temperaturas elevadas en el verano 2026 para zonas clave del país (SMN)

El informe identificó la región de Cuyo, La Pampa, Buenos Aires y el sur del Litoral como las áreas con mayor probabilidad de registrar temperaturas medias terciadas por encima del rango considerado normal para el trimestre.

Allí, las condiciones favorecerían registros que, según la categorización oficial, superarán el límite superior del rango normal, definido por los análisis históricos de referencia.

En paralelo, el norte argentino, el oeste de Santa Fe, Córdoba y sectores norte y central de la Patagonia presentan una perspectiva de temperaturas “normales o superiores a lo normal”, lo que implica valores medios que podrían ubicarse entre el promedio histórico y el umbral superior.

Por su parte, el sur de la Patagonia se mantendría dentro del rango considerado normal para el trimestre, según destacó el SMN.

Cuyo, La Pampa, Buenos Aires y el sur del Litoral presentan mayor riesgo de olas de calor según el informe oficial (SMN)

El organismo aclaró que las previsiones trimestrales expresan valores promedio, sin reflejar variaciones más breves, como oscilaciones térmicas, frentes, olas de calor o frío. Por este motivo, aconsejó prestar atención a los pronósticos diarios y semanales, así como consultar el sistema de alerta por temperaturas extremas disponible en sus canales oficiales.

En cuanto a las lluvias, el informe resalta que el Noroeste Argentino (NOA) y el sur de la Patagonia presentan mayores probabilidades de acumulados “normales o superiores a lo normal”. El pronóstico advierte que, en estas zonas, las precipitaciones medias trimestrales podrían ubicarse dentro del rango considerado habitual o incluso superarlo.

Para el resto del país —incluyendo las provincias del norte, la región del Litoral, la franja central, norte y centro de la Patagonia— se esperan lluvias dentro de los parámetros normales, en promedio trimestral.

El documento aclara que, aunque las perspectivas sean de menor o igual precipitación, podrían ocurrir eventos aislados de fuerte intensidad que no quedan anticipados a escala estacional, lo que refuerza la importancia de seguir la información climatológica de corto plazo.

El informe subraya que los promedios trimestrales no reflejan olas de calor puntuales, por lo que la vigilancia diaria es crucial (Freepik)

Para definir categorías como “superior a lo normal”, el Servicio Meteorológico Nacional utiliza el método de terciles históricos. Se separan los registros de temperatura y precipitación en tres partes iguales. El intervalo central constituye el rango “normal”, que representa valores medios del trimestre con una oscilación de aproximadamente 0,5 ℃ por debajo o por encima del promedio.

Cuando las previsiones se sitúan más allá del límite superior de ese rango, se consideran “superiores a lo normal”; por debajo, “inferiores a lo normal”. Un pronóstico de “precipitación superior a la normal” indica una mayor probabilidad de que las lluvias excedan el umbral superior del rango histórico, mientras que una advertencia sobre “temperaturas superiores” señala la posible presencia de registros promedios por encima del máximo habitual del período analizado.

El informe advierte que el pronóstico estacional se fundamenta en proyecciones probabilísticas elaboradas a partir de modelos numéricos y estadísticos, ajustados a las condiciones oceánicas y atmosféricas actuales.

El pronóstico trimestral destaca la probabilidad de lluvias por encima del promedio en el Noroeste Argentino y el sur de la Patagonia (Imagen Ilustrativa Infobae)

Bajo una fase neutra del fenómeno El Niño – Oscilación del Sur (ENOS), las probabilidades se distribuyen en partes iguales entre las distintas categorías, salvo cuando los modelos resaltan tendencias marcadas.Este pronóstico no ofrece valores exactos ni permite anticipar la evolución semanal ni eventos puntuales de impacto, como tormentas severas u olas de calor. Por ello, el Servicio Meteorológico Nacional recomienda mantener seguimiento activo de los alertas diarios y las perspectivas semanales, para estar al tanto de cualquier evento significativo que pueda no estar captado por el pronóstico trimestral.

La construcción del pronóstico climático trimestral se sustenta en un consenso a partir de datos experimentales de modelos numéricos, estadísticos nacionales y del análisis reciente de condiciones oceánicas y atmosféricas.