Un dolor de cabeza intenso no es la única manifestación característica de una migraña. Especialistas en neurología advierten que esta afección puede expresarse a través de síntomas inusuales, cuya identificación resulta fundamental para quienes buscan alivio y un tratamiento efectivo.
Según información recogida por Prevention y publicaciones de la Universidad de Harvard, reconocer estas señales poco conocidas puede tener un impacto directo en la calidad de vida de quienes sufren migrañas.
La migraña ha sido definida por el Dr. Hao Huang, neurólogo especializado en cefaleas, como una “afección neurológica compleja” que abarca mucho más que el dolor de cabeza convencional, según comentó a Prevention. Esta complejidad incluye una amplia gama de síntomas, algunos de los cuales suelen pasar inadvertidos. El Dr. Christopher Gay, anestesiólogo y especialista en dolor intervencionista, señaló en Prevention: “Durante un episodio de migraña ocurre una cascada de cambios nerviosos, vasculares y químicos en el cerebro”. Esta situación favorece la aparición de manifestaciones variadas, a veces inesperadas.
Manifestaciones atípicas y comunes
Entre los síntomas atípicos de la migraña, los expertos resaltan la dificultad para hablar o comprender palabras, confusión mental, alteraciones de la memoria, bostezos excesivos y deseos repentinos de consumir alimentos previos al dolor de cabeza.
También pueden aparecer debilidad en un solo lado del cuerpo, zumbidos en los oídos y alucinaciones olfativas, es decir, percibir olores que no existen. La Fundación Americana de la Migraña (AMF) subraya que, en la fase inicial o prodrómica, puede aumentar la necesidad de orinar. Durante el dolor de cabeza, son comunes las sensaciones de punzada de hielo en la cabeza, mareos, congestión nasal, ansiedad y depresión.
En escenarios poco habituales, los síntomas pueden simular un accidente cerebrovascular: descenso del rostro, debilidad de los brazos, entumecimiento, confusión y dificultad en el habla, según reporto la AMF.
Más allá de estos síntomas poco comunes, existen manifestaciones frecuentes en la migraña. La institución detalla que las más habituales son rigidez en el cuello, dolor de cabeza pulsátil de moderada a intensa (habitualmente en un solo lado), náuseas, vómitos, sensibilidad a la luz y al sonido, mareos, visión borrosa y aumento del dolor con la actividad física.
La migraña se desarrolla generalmente en varias fases: el pródromo, con cambios de humor, dolor cervical, antojos o bostezos; el aura, con alteraciones visuales, hormigueo o dificultades del lenguaje; el dolor de cabeza propiamente dicho; y el postdromo, identificado como “resaca de migraña”, que incluye fatiga y problemas para concentrarse.
Estudios de la Universidad de Harvard también ratifican la diversidad de fases y la importancia de reconocerlas para un abordaje terapéutico adecuado.
Prevención y consejos ante la migraña
Para prevenir las crisis de migraña, Harvard recomienda identificar y evitar los factores desencadenantes individuales o estar preparado para ellos si no pueden evitarse. Adoptar hábitos saludables, como mantener un horario regular de sueño, llevar una dieta equilibrada y evitar el consumo de drogas y alcohol, contribuye a reducir la frecuencia de las crisis. Además, la institución sugiere consultar con un profesional de la salud sobre la posibilidad de utilizar fármacos preventivos en casos graves o crónicos.
Cuando el episodio migrañoso ya se presenta, Harvard aconseja refugiarse en una habitación oscura y silenciosa, aplicar una compresa fría y mantenerse adecuadamente hidratado.
Si existen medicamentos recetados, es fundamental tomarlos al inicio de los síntomas. También indica que algunos remedios de venta libre, la cafeína y los baños calientes pueden resultar de ayuda, aunque la eficacia de los tratamientos varía entre personas. Por este motivo, la universidad insiste en la importancia de conocer los factores desencadenantes y construir un estilo de vida adaptativo.
Cuándo buscar atención médica
Existen señales de alarma que requieren atención médica inmediata. La Fundación Americana de la Migraña (AMF) advierte que una cefalea de intensidad máxima y aparición súbita, diferente de los episodios habituales, o acompañada de síntomas neurológicos nuevos —como caída facial, debilidad, alteraciones visuales o dificultades en el habla— puede indicar una urgencia médica.
La Fundación también señala que la fiebre y la rigidez en la nuca pueden sugerir una meningitis, una inflamación potencialmente mortal del sistema nervioso central. Además, convulsiones, confusión, pérdida de visión, síntomas que persisten más de una hora, o dolor de cabeza posterior a un traumatismo, requieren evaluación médica inmediata.
En casos de migrañas que no mejoran con los tratamientos habituales, consultar a un especialista permite acceder a nuevas alternativas terapéuticas y mejorar la calidad de vida, tal como recomienda la Fundación Americana de la Migraña.