“Durante meses pensé que el cansancio extremo y la necesidad constante de dormir eran parte del estrés o de mi edad”, confesó Camilla Luddington, actriz británica reconocida por su papel de Jo Wilson en Grey’s Anatomy, al revelar públicamente que padece la enfermedad de Hashimoto.
La noticia, compartida recientemente durante un episodio del pódcast “Call It What It Is”, que conduce junto a su colega Jessica Capshaw, ha puesto en el centro de la conversación una afección autoinmune que afecta principalmente a mujeres y que suele pasar inadvertida bajo síntomas comunes. Según detalló la propia Luddington su experiencia personal ilustra los desafíos del diagnóstico y la importancia de la concienciación sobre la salud tiroidea.
Qué es la enfermedad de Hashimoto
La enfermedad de Hashimoto es una afección autoinmune en la que el sistema inmunitario ataca por error la glándula tiroides, afectando su funcionamiento y provocando una disminución progresiva de la producción de hormonas tiroideas. Según la Sociedad Argentina de Endocrinología y Metabolismo, se trata de “una de las enfermedades autoinmunes más frecuentes”, causada por “una reacción del sistema inmunitario contra la glándula tiroides, que es pequeña con forma de mariposa y está ubicada en la base del cuello”.
El avance lento de la enfermedad corresponde a la destrucción progresiva del tejido tiroideo por parte de anticuerpos. El hipotiroidismo resultante provoca una reducción generalizada de la actividad metabólica orgánica. Así lo explica la Clínica Universidad de Navarra: “La tiroiditis de Hashimoto es un cuadro clínico que se deriva de una reducida actividad de la glándula tiroides. Las hormonas tiroideas (T4 y T3), cuya síntesis está regulada por la TSH secretada en la hipófisis, tienen como misión fundamental regular las reacciones metabólicas del organismo”.
La enfermedad es más frecuente en mujeres, especialmente a partir de los 40 años y en personas con antecedentes familiares de enfermedades tiroideas o autoinmunes. De acuerdo con datos de la Cleveland Clinic: “Hashimoto afecta a aproximadamente 5 de cada 100 personas en Estados Unidos, con una prevalencia significativamente mayor en mujeres”.
Síntomas y diagnóstico
Los síntomas iniciales de la enfermedad de Hashimoto suelen ser sutiles y de evolución lenta. Las señales más frecuentes incluyen:
- Fatiga constante
- Intolerancia al frío; la persona se vuelve especialmente friolenta
- Apatía, indiferencia emocional y depresión
- Disminución de memoria y capacidad de concentración
- Piel seca, cabello seco y quebradizo
- Fragilidad de uñas y palidez cutánea
- Aumento de peso y tendencia a la constipación
- Somnolencia excesiva
El diagnóstico se basa en el examen físico, el análisis de sangre para medir los niveles de TSH y de hormonas tiroideas, así como la detección de anticuerpos específicos. El portal sobre temas médicos MSD Manual detalla: “El diagnóstico se basa en los resultados de la exploración física y del análisis de sangre. Las personas con hipotiroidismo se sienten cansadas y no toleran el frío. El tratamiento consiste en tomar la hormona tiroidea de por vida”.
En algunos casos, puede observarse el desarrollo de bocio: una hinchazón indolora en la parte frontal del cuello. El análisis de anticuerpos anti-tiroideos y ecografías complementan la evaluación ante sospechas de afectación glandular.
Tratamiento y control
El abordaje terapéutico es crónico y se fundamenta en la reposición hormonal. La Endocrine Society sostiene: “El tratamiento más eficaz es un medicamento sintético (artificial) de T4, llamado levotiroxina. Una pastilla diaria puede restaurar el nivel normal de hormona tiroidea y TSH en el torrente sanguíneo y normalizar su función tiroidea”. El manejo es individualizado y requiere revisiones clínicas y de laboratorio periódicas para ajustar dosis y garantizar el efecto terapéutico.
Las recomendaciones acerca de la dieta y los suplementos alimenticios son claras. La Sociedad Argentina de Endocrinología y Metabolismo puntualiza: “No existen datos respecto a si realizar una dieta libre de gluten en ausencia de enfermedad celíaca juega un papel en la salud de los pacientes con o sin enfermedad tiroidea establecida. Se recomienda cumplir una dieta variada y completa en los pacientes con tiroiditis de Hashimoto”.
Sin medicación, el riesgo de complicaciones aumenta considerablemente. El hipotiroidismo no tratado puede afectar el sistema cardiovascular, neurológico y, en casos graves, llevar al coma mixedematoso. En este contexto, el seguimiento profesional regular resulta clave para mantener el equilibrio hormonal y la calidad de vida.
En la experiencia de Luddington, el agotamiento superaba cualquier explicación habitual, y ni el descanso ni la rutina diaria lograban aliviarlo, lo que la impulsó a buscar respuestas más allá de lo esperado.