Dar pasos hacia una mejor salud puede ser tan simple como salir a caminar. Esta actividad cotidiana, al alcance de casi todos, se ha convertido en una herramienta poderosa para mejorar el bienestar físico y mental.
Más allá de ser un medio de transporte o una forma de despejar la mente, caminar de forma regular puede contribuir a perder peso, fortalecer el sistema cardiovascular, reducir el estrés y mejorar el sueño.
Un estudio publicado en JAMA Network Open, liderado por Amanda E. Paluch, concluyó que caminar más pasos al día se asocia con una menor mortalidad, sin importar la velocidad de la caminata. Los resultados mostraron que quienes daban al menos 7.000 pasos diarios tenían entre 50% y 70% menos riesgo de muerte en comparación con quienes caminaban menos.
Factores que influyen en la quema de calorías al caminar
La cantidad de calorías quemadas al caminar depende de variables como el peso corporal, la edad, el ritmo, la duración y el tipo de terreno. Por ejemplo, según detallaó Prevention, una persona de 70 kilogramos puede quemar aproximadamente 100 calorías por milla (1,6 kilómetros) a un ritmo moderado, y más si incrementa la velocidad o camina en pendientes.
El conteo de pasos también funciona como un incentivo conductual. Alcanzar los 7.000 a 10.000 pasos diarios, como señala el estudio de JAMA Network Open, citado por Prevention, puede marcar una diferencia significativa en la salud general, incluso sin que el ejercicio sea de alta intensidad.
Cifras promedio de calorías quemadas según peso, distancia y ritmo
Aunque las cifras varían según el metabolismo y la composición corporal, se estima que:
- Una persona de 70 kilogramos quema entre 100 y 115 calorías por kilómetro, dependiendo del ritmo.
- Una persona de 54 kilogramos quema entre 85 y 100 calorías en la misma distancia.
Caminar en superficies irregulares o con inclinación aumenta el esfuerzo y, por tanto, el gasto energético.
Consejos para aumentar la quema de calorías al caminar
Para mejorar los resultados, se recomienda:
- Aumentar la intensidad caminando más rápido o más tiempo.
- Subir pendientes o inclinar la cinta de correr.
- Usar mancuernas ligeras para activar la parte superior del cuerpo.
Estas estrategias aumentan la frecuencia cardíaca, estimulan el metabolismo y mejoran la resistencia.
Cómo saber si se están quemando suficientes calorías y la importancia de la dieta
Se puede estimar el esfuerzo prestando atención a señales como sudoración leve o respiración acelerada. Una escala de esfuerzo percibido entre 6 y 7 sobre 10 suele ser suficiente para obtener beneficios fisiológicos sin excederse.
La alimentación equilibrada es esencial. Para favorecer la pérdida de peso y mantener energía durante el ejercicio, se recomienda una dieta rica en proteínas magras, grasas saludables, carbohidratos complejos, vegetales y fibra. También conviene reducir el consumo de calorías vacías provenientes de bebidas azucaradas, alcohol y productos procesados.
El seguimiento de la actividad física se ha vuelto más accesible gracias a la tecnología. Prevention sugiere herramientas como relojes electrónicos, que permitan controlar pasos, ritmo cardíaco, calorías estimadas y progresos semanales.
Plan de entrenamiento de caminata para principiantes
Un programa progresivo facilita la incorporación del hábito. Se recomienda:
- Semana 1: caminar 10 minutos diarios (800 metros aprox.)
- Semana 2: aumentar a 20 minutos diarios
- Semana 3: subir a 30 minutos o 2 kilómetros
- Semana 4: llegar a 40-45 minutos diarios o 3 millas (4,8 kilómetros)
Un día puede destinarse al descanso y otro a estiramientos. Se pueden incluir mancuernas para fortalecer brazos y mejorar el tono muscular.
Beneficios adicionales de caminar
Caminar con regularidad ofrece múltiples beneficios más allá del control de peso:
- Reduce el estrés al disminuir el cortisol, la hormona relacionada con la ansiedad y la acumulación de grasa abdominal.
- Mejora el sueño, al facilitar la relajación mental y física.
- Fortalece huesos, músculos y el sistema cardiovascular.
- Disminuye el riesgo de enfermedades crónicas, como diabetes tipo 2, hipertensión y obesidad.
Según el estudio de JAMA Network Open, dar más de 7.000 pasos al día —aunque sea en bloques cortos y a ritmo suave— puede reducir considerablemente el riesgo de mortalidad. Prevention también destaca que caminar con constancia es una de las mejores inversiones en salud a largo plazo.