La deshidratación puede elevar los niveles de glucosa en sangre, complicando el control de la diabetes y aumentando el riesgo de complicaciones (Imagen Ilustrativa Infobae)

Las personas con diabetes presentan una mayor tendencia a la deshidratación. Esta condición puede agravarse porque la deshidratación eleva los niveles de glucosa en sangre. Según la Asociación Americana de la Diabetes, quienes viven con esta enfermedad pueden experimentar una pérdida de líquidos importante, en parte debido a un aumento en la frecuencia urinaria y a determinados medicamentos.

Este contexto refuerza la importancia de mantener una ingesta adecuada de líquidos, ya que incluso unos pocos días de consumo insuficiente de agua pueden concentrar la glucosa en la sangre, complicando el control de la enfermedad.

Además, la hidratación correcta implica beneficios generales para la salud, pero cobra una relevancia especial en la gestión de la diabetes porque ayuda de manera directa a mantener el equilibrio glucémico requerido para un manejo efectivo de la condición.

Recomendación de agua de coco sin azúcar

Los dietistas recomiendan la ingesta de agua de coco sin azúcar añadida como una estrategia efectiva tanto para hidratarse como para controlar los niveles de azúcar en sangre. Esta bebida destaca por no contener azúcares agregados y por su alto contenido en electrolitos naturales.

El agua de coco sin azúcar es perfecta para diabéticos por sus electrolitos naturales y bajo nivel de carbohidratos (Imagen Ilustrativa Infobae).

El agua de coco resulta adecuada para personas con cualquier tipo de diabetes, ya que proporciona una alternativa sabrosa a otras bebidas dulces que pueden contener grandes cantidades de azúcares simples.

Kelsey Kunik, nutricionista estadounidense, dijo en una entrevista con Eating Well que, si bien el agua sigue siendo la mejor elección para hidratarse, el agua de coco sin azúcar puede ofrecer un toque dulce sin el impacto negativo de los azúcares añadidos, lo que constituye un aliciente para quienes buscan variedad y sabor en su dieta diaria.

Beneficios y características de la agua de coco sin azúcar

El agua de coco sin azúcar presenta varias ventajas. Un vaso de 8 onzas (aproximadamente 237 mililitros) contiene cerca de 10 gramos de carbohidratos, principalmente azúcares naturales derivados de la planta, y alrededor de 44 calorías.

Este aporte calórico y de carbohidratos es sensiblemente menor que el de otras bebidas, como el té dulce o los refrescos, que pueden superar fácilmente el doble o el cuádruple de ese contenido, debido a los azúcares añadidos.

Además, el agua de coco es rica en potasio, con 400 miligramos por porción, equivalentes al 9% del valor diario recomendado y aporta otros electrolitos esenciales para la hidratación corporal. Estos nutrientes ayudan, entre otras funciones, a regular la presión arterial, un aspecto crucial ya que las personas con diabetes tienen predisposición a problemas cardíacos y habitualmente no alcanzan los niveles óptimos de potasio.

El agua de coco, por su bajo contenido calórico, también se ajusta a los planes de control de peso, una pieza clave en el manejo integral de la diabetes.

Las bebidas deportivas convencionales contienen azúcares añadidos que afectan negativamente a los diabéticos, a diferencia del agua de coco (Imagen Ilustrativa Infobae)

Agua de coco versus otras bebidas

El agua de coco sin azúcar aventaja a muchas bebidas populares cuando se consideran las necesidades de las personas con diabetes. Comparada con las bebidas deportivas convencionales, el agua de coco aporta menos calorías y carece de azúcares añadidos.

Por ejemplo, una bebida deportiva típica contiene cerca de 65 calorías y 13 gramos de azúcar por cada 8 onzas, mientras que la misma cantidad de agua de coco ofrece 44 calorías y 10 gramos de carbohidratos, todos de origen natural. Además, los electrolitos que contiene cumplen la función de hidratar, sin el riesgo de sobrecargar de glucosa el organismo, como ocurre con las bebidas azucaradas.

Por su composición y bajo aporte calórico, la sustitución de estas bebidas deportivas por agua de coco sin azúcar puede ser ventajosa en términos de control glucémico, gestión del peso y salud cardiovascular.

Es relevante señalar que en situaciones de ejercicio intenso que exceda una hora, podría ser necesario recurrir a bebidas diseñadas para reponer grandes pérdidas de carbohidratos y electrolitos, aunque se recomienda que estas contengan menos de 15 gramos de azúcar por porción o, en su defecto, emplear suplementos sin azúcar.

Otras opciones de bebidas y alimentos

Además del agua pura y el agua de coco sin azúcar, existen otras alternativas válidas para hidratarse adecuadamente con diabetes. Se incluyen el té y el café sin azúcar, el agua con gas y las aguas saborizadas sin endulzantes añadidos.

Mantener una buena hidratación ayuda a gestionar mejor la glucosa, favoreciendo un equilibrio necesario en la diabetes (Imagen Ilustrativa Infobae)

Estas opciones facilitan la variabilidad en la ingesta de líquidos, lo que puede favorecer la adherencia a planes de hidratación. Otro recurso son los alimentos ricos en electrolitos, especialmente frutas y hortalizas, que además añaden fibra, vitaminas y minerales útiles para el control glucémico.

La combinación de una hidratación adecuada y una alimentación rica en nutrientes contribuye a la prevención de picos y caídas bruscas de azúcar en sangre.

Al adquirir agua de coco, es fundamental revisar cuidadosamente la etiqueta nutricional del producto, ya que algunas marcas pueden vender envases que contienen más de una porción. De esta manera, la cantidad real de calorías y carbohidratos que se consume podría ser superior a la esperada si no se verifica la información.

Este detalle resulta particularmente relevante para quienes manejan diabetes, pues un error en el cálculo de la ingesta puede afectar negativamente el control glucémico. Verificar el etiquetado asegura que la cantidad de azúcar natural y calorías coincida con el plan individual de alimentación y metas de salud de cada persona.