MIÉRCOLES, 21 de mayo de 2025 (HealthDay News) — Luchar contra una enfermedad crónica realmente la elimina de la persona, dejándola vulnerable a la depresión.

Y las personas con múltiples problemas de salud a largo plazo son incluso más propensas a caer presas de la depresión, según un estudio reciente.

Algunas combinaciones de enfermedades pueden más que duplicar la probabilidad de que una persona eventualmente sea diagnosticada con depresión, informaron los investigadores este mes en la revista Nature Communications Medicine.

«La atención de la salud con frecuencia trata la salud física y mental como cosas completamente distintas, pero este estudio muestra que debemos mejorar en la anticipación y la gestión de la depresión en las personas con enfermedades físicas», señaló en un comunicado de prensa el coinvestigador Bruce Guthrie, profesor de práctica general de la Universidad de Edimburgo, en Reino Unido.

En el estudio, los investigadores siguieron a más de 142,000 participantes en el estudio en curso del Biobanco del Reino Unido que tenían al menos un problema de salud crónico, pero sin antecedentes de depresión. Las edades de las personas oscilaban entre los 37 y los 73 años.

Los investigadores encontraron que aquellos con las tasas más altas de enfermedades físicas tenían un riesgo 2.4 veces mayor de depresión, el más alto encontrado en el estudio. Estos pacientes tenían en promedio más de cuatro problemas de salud crónicos.

El riesgo de depresión se duplicó en las personas que sufrían de trastornos de migraña o problemas pulmonares crónicos, mientras que la enfermedad cardiaca combinada con diabetes aumentó el riesgo en un 78%, muestran los resultados.

Las afecciones digestivas como el síndrome del intestino irritable (SII), la enfermedad celíaca y la enfermedad hepática también aumentaron el riesgo de depresión en un 83 por ciento en las mujeres, y el doble en los hombres, encontraron los investigadores.

«Casi todos los grupos de morbilidad física se asocian con un mayor riesgo de depresión posterior que el grupo sin afecciones físicas al inicio del estudio», escribieron los investigadores.

En general, alrededor de 1 de cada 12 personas en los grupos de mayor riesgo desarrollaron depresión en los próximos 10 años, en comparación con alrededor de 1 de cada 25 personas sin afecciones físicas, encontraron los investigadores.

«Observamos asociaciones claras entre las afecciones de salud física y el desarrollo de la depresión, pero este estudio es solo el comienzo», señaló en un comunicado de prensa la investigadora principal, Lauren DeLong, estudiante doctoral de la Universidad de Edimburgo. «Esperamos que nuestros hallazgos inspiren a otros investigadores a investigar y desentrañar los vínculos entre las condiciones de salud física y mental».

Más información

La Clínica Mayo ofrece más información sobre la depresión.

FUENTES: Universidad de Edimburgo, comunicado de prensa, 13 de mayo de 2025; Nature Communications Medicine, 13 de mayo de 2025