Rusia comunicó este viernes que las conversaciones para alcanzar un acuerdo de paz con Ucrania se encuentran en “pausa”, mientras Volodimir Zelensky advirtió que el presidente ruso, Vladimir Putin, tiene como objetivo la ocupación total del país. Los recientes intentos de intermediación del presidente estadounidense, Donald Trump, tampoco consiguieron avances significativos para poner fin al conflicto iniciado en febrero de 2022 tras la invasión rusa. Los ataques terrestres y aéreos de Rusia se han mantenido, incrementando la preocupación internacional por la situación en Europa del Este.
El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, confirmó que “nuestros negociadores tienen la posibilidad de comunicarse a través de canales, pero por ahora se puede hablar más bien de una pausa” en las conversaciones con Kiev. Estas declaraciones llegan al mismo tiempo que Rusia y su aliado Bielorrusia inician este viernes ejercicios militares conjuntos, lo que ha provocado inquietud en la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
Esta semana, Polonia denunció vuelos de 19 drones en su espacio aéreo atribuidos a Moscú, obligando a activar las defensas antiaéreas de la OTAN. El primer ministro polaco, Donald Tusk, calificó el incidente como una incursión deliberada. Por su parte, Rusia negó las acusaciones e indicó que no se han presentado pruebas sobre la nacionalidad de los drones. En respuesta a estas tensiones, varios Estados de la Unión Europea y la propia UE convocaron a embajadores rusos, incluyendo a Francia, Alemania, Suecia, Países Bajos y España.
El secretario general de la OTAN, Mark Rutte, anunció este viernes el lanzamiento de una operación para “reforzar todavía más” las posiciones de la alianza militar a lo largo del flanco oriental, en cercanías de Rusia. Rutte informó que estas actividades se desarrollarán en los próximos días e involucrarán a países como Dinamarca, Francia, Reino Unido y Alemania.
En cuanto a los esfuerzos diplomáticos, las tres rondas de negociaciones directas entre Rusia y Ucrania, así como la cumbre entre Trump y Putin celebrada en agosto en Alaska, no lograron avances substanciales para detener los combates. Las fuerzas rusas continúan el avance sobre el territorio ucraniano y Putin reiteró su intención de proseguir la ofensiva mientras no se cumplan sus demandas, entre ellas más concesiones territoriales por parte de Kiev.
Trump ha repetido amenazas de sanciones adicionales contra Moscú si no se detiene la ofensiva, pero aún no ha materializado estas advertencias. Consultado por Fox News sobre su umbral de paciencia frente a la situación, Trump expresó: “Está agotándose y agotándose rápidamente, pero se necesitan dos para bailar tango”. Además añadió: “Es asombroso. Cuando Putin quería hacerlo, Zelensky no quería. Cuando Zelensky quería hacerlo, Putin no quería. Ahora Zelensky quiere y Putin es una incógnita. Vamos a tener que intervenir de manera muy, muy fuerte”.
Ucrania por su parte descarta cualquier cesión de territorio como moneda de cambio para un acuerdo de paz y pide una cumbre entre Putin y Zelensky, opción que el dirigente ruso ha rechazado hasta el momento. Zelensky advirtió a los países occidentales que Putin mantiene la intención de “ocupar toda Ucrania” y que solo una presión internacional significativa podría frenar esa ambición.
Los ejercicios militares conjuntos entre Rusia y Bielorrusia, denominados “Zapad” y realizados cada cuatro años, se desarrollan en un contexto de creciente tensión regional. El Ministerio de Defensa ruso divulgó un video mostrando vehículos blindados, helicópteros y buques durante las maniobras. Mientras que Peskov aseguró que se trata de “ejercicios planificados, no están dirigidos contra nadie”, Zelensky puso en duda ese carácter y afirmó que no solo apuntan a Ucrania.
Polonia estima que cerca de 40.000 soldados estarán posicionados cerca de la frontera con Bielorrusia hasta finalizar los ejercicios, mientras que Lituania y Letonia adoptaron cierres parciales en su espacio aéreo por precaución. Las maniobras se sitúan cerca de Borísov, al este de Minsk, en Bielorrusia, según autoridades locales, con “acciones prácticas” previstas también en territorio ruso y en las aguas del mar de Barents y el mar Báltico.
Las maniobras Zapad anteriores en 2021 movilizaron hasta 200.000 soldados rusos, pocos meses antes del inicio de la invasión en Ucrania. Para la edición actual, el volumen sería mucho menor debido al despliegue masivo de militares rusos en territorio ucraniano. Bielorrusia anunció en enero la participación de 13.000 efectivos para los ejercicios, cifra que en mayo se rebajó a la mitad.
(Con información de AFP)