Irving

Elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México (SSC-CDMX) detuvieron el pasado 17 de abril a Irving “N” y Roberto “N” ―de 30 y 38 años de edad respectivamente―, dos hombres que pertenecían a una banda apodada “Los Gordos” y quienes fueron detenidos por su presunta responsabilidad en el despojo e invasión de distintas propiedades, según los reportes oficiales, en los límites de las alcaldías Venustiano Carranza y Cuauhtémoc.

La información de la policía capitalina, así como del reportero Carlos Jiménez en el programa C4 en Alerta, dieron a conocer que la detención de ambos presuntos criminales ocurrió después de que se difundiera un video en el que, aparentemente, una de sus parejas llegaran a agredir a un grupo de mujeres para sacarlas a la fuerza de un departamento, ubicado muy cerca de la avenida Circunvalación y la zona centro de la CDMX, incluso con disparos al aire. El argumento para portarse de esta forma era que “no les habían pagado la cuota para evitar que los sacaran por la fuerza”.

Ante el reporte de disparos, el Centro de Comando y Control (C2) Norte tomó conocimiento de la situación y movilizó a agentes en campo para su atención. A la par, la evidencia mostrada en redes sociales les permitió que los trabajos de reconocimiento y captura de los dos presuntos implicados fuera más sencillo.

Un historial de antecedentes penales

La información preliminar de dependencias de seguridad presume que ambos hombres no son un simples “improvisados”. Tanto Irving como Roberto “N” cuentan con una serie de antecedentes penales y, de igual manera, se les ha acusado por cerca de 10 delitos; entre ellos, se encuentran también temas de extorsión y robo.

Al momento de la aprehensión, se les aseguraron diversas armas de fuego y dinero en efectivo. Al mismo tiempo, los efectivos de seguridad detallaron que será un Ministerio Público quien determine la situación jurídica de estos dos sujetos en los próximos días.

La estrategia para invadir casas en el norte y centro de la CDMX

El modus operandi de “Los Gordos” comenzaba con la identificación de inmuebles aparentemente desocupados o en disputa legal. Una vez seleccionados, ingresaban a las propiedades, cambiaban cerraduras y colocaban rejas nuevas para asegurar su control. En algunos casos, utilizaban documentos falsificados para simular contratos de arrendamiento o escrituras, y se presentaban como legítimos ocupantes.​

Sobre esa línea. Jiménez igualmente publicó una serie de imágenes donde se puede observar cómo el par de probables delincuentes esperaban a las afueras de una residencia para cometer los actos criminales. Se les ve platicar, pero, en cuanto salen sus presuntas víctimas, aprovechan para agredirlas y comenzar la discusión.

Una serie de imágenes muestra la forma en que

La intimidación y la violencia eran herramientas comunes en su accionar. Amenazaban a los propietarios legítimos, exigiéndoles dinero a cambio de no ser desalojados o sufrir daños físicos. En una ocasión, tras la negativa de una víctima a pagar, uno de los integrantes realizó una detonación al aire con un arma de fuego, obligando al afectado a entregar una suma de dinero. ​