El fin de semana de Wanda Nara en Europa fue bien agitado. El sábado voló a Munich para presenciar la victoria del Paris Saint-Germain sobre el Inter. Curiosamente, dos ex clubs de Mauro Icardi, a quien no se privó de lanzarle un dardo envenenado a través de sus historias. Desde Alemania, la empresaria regresó a Milán en un jet privado para disfrutar de una relajada y divertida noche junto a sus amigos más cercanos.
Allí la esperaban parte del grupo de amigas conocidas como “Las Payarolas”, Natt Córdoba, influencer y maquilladora y Paula Barreiro. Y también El Chaqueño, un reconocido colorista de Hair Malambo, quien la peinó la mañana en que fue a la audiencia de divorcio y publicó en sus historias una vista desde el departamento de Wanda en la que decía: “Cuando le tomás la casa a Wanda Nara”. Todos ellos viajaron para acompañarla, pero no fueron a Munich, sino que se quedaron a disfrutar la piscina y las comodidades del departamento que la empresaria tiene en esa ciudad italiana.
En sus historias, Wanda mostró un despojador donde guarda las llaves de los autos de lujo que tiene en Milan. Se pudieron ver una decena de ellas, entre las que había un Bentley, un Mercedes Benz, un Rolls Royce Wraith y la conocida Lamborghini rosa.
La decisión fue tomar el Rolls Royce blanco, pero enseguida un detalle la alarmó. Los automóviles de lujo podrán tener todo, pero hay que cargarles combustible como a cualquiera. En el tablero, que publicó, se puede observar claramente que dice “autonomía: 1 km”. Al límite. Por suerte para Wanda, había una estación de servicio cerca y ella misma se mostró cargando nafta.
Luego sí, disfrutó la noche entre amigos, buena comida y ricos tragos. En sus historias plasmó una conversación entre El Chaqueño y Paula Barreiro, que la llevó a preguntar “¿están peleando por mí?“, porque la joven le preguntaba al estilista si tenía un amor platónico con alguien que no identifico: la respuesta fue que le gustaba su personalidad. Al mismo tiempo que llegaba la comida, Nara les preguntó: ”¿están hablando de mi?“, en medio de una carcajada. Y El Chaqueño le retrucó: ”No te gusta nada». También publicó una foto a pura risa junto a Natt Córdoba, ambas chocando sus mojitos. A la vuelta de la salida, exhausta, se sacó sus icónicos zapatos Louboutin colorados y los dejó exhibidos en el volante del auto.
El paso de Wanda por Europa no pasó desapercibido. Además de su dura audiencia de divorcio con Mauro Icardi, motivo principal de su estadía en el Viejo Continente, el partido al que asistió entre el PSG y el Inter de Milán no dejó de generar revuelo. La atención se desvió temporalmente hacia Achraf Hakimi, futbolista marroquí del PSG y ex compañero de Icardi, cuya actuación durante el evento, así como su vida personal, han capturado interés mediático debido a su reciente separación de la actriz Hiba Abouk. La presencia de Hakimi en las historias de Wanda levantó sospechas sobre potenciales vínculos o intereses personales, especialmente con la especulación de que la modelo marroquí con quien se le ha relacionado también estuvo en el juego.
Por otro lado, la relación de Wanda con el entorno parisino ha dado mucho que hablar. Según contó Yanina Latorre, recibió un trato privilegiado en Múnich por parte del entorno del club parisino, al ser invitada por una destacada figura del PSG, otorgándole así acceso directo al ambiente reservado del equipo.
Mientras tanto, Mauro Icardi, su exesposo, también mantiene su presencia mediática. El jugador, vinculado al Galatasaray, no solo se encuentra lidiando con la complejidad de su proceso de divorcio, sino que además está fortaleciendo lazos familiares en Italia junto a la China Suárez y sus hijos. Su reciente aparición en el Festival de Cine de Ibiza en compañía de su pareja muestra su deseo de proyectar una imagen de unidad y renovación personal pese a las circunstancias adversas.
Precisamente Ibiza será el próximo destino de Wanda Nara y su grupo de amigos. ¿Habrá algún cruce?