Un hombre de 49 años murió tras ser atropellado por una conductora en estado de ebriedad en la localidad bonaerense de General Pacheco, partido de Tigre, cuando se dirigía a trabajar en el barrio de Nordelta.

El hecho ocurrió el domingo 28 de diciembre, cuando Oscar Olivera, quien estaba próximo a cumplir 50 años y a convertirse en padre por primera vez, fue embestido por una camioneta Jeep Renegade conducida por Yesica Loreley Quevedo. Una cámara de seguridad registró el momento en que Olivera cruzaba el Corredor Bancalari y fue alcanzado por el vehículo, confirmaron fuentes judiciales a Infobae.

Las imágenes son impactantes y muestran cómo la mujer embistió a la víctima y arrojó varios metros sobre la banquina.

El test de alcoholemia reveló que Quevedo tenía 0,63 gramos de alcohol por litro de sangre, superando el límite permitido de 0 en la provincia de Buenos Aires. Tras el accidente, la conductora fue detenida e imputada por homicidio culposo, pero recuperó la libertad el martes tras pagar una fianza, lo que provocó indignación entre los familiares de la víctima.

De este paso procesal, el fiscal a cargo del caso, José Amalla, no fue notificado. Sin embargo, las fuentes aclararon que la mujer fue imputada por un delito excarcelable: el homicidio culposo.

“En realidad a mí mucho no me contaron por mi estado. Pero lo mataron de una manera muy brutal. Yo creo que hay que hacer justicia, necesitamos justicia y queremos justicia y que esto no quede impune, que se sepa toda la verdad y que esta persona pague como se merece. Que la verdad salga a la luz. No tengo palabras, en realidad. Es muy difícil para mí. Me robaron todo, me robaron el futuro. No va a conocer a su bebé y eso me tiene muy mal. Justicia queremos”, dijo Paola, la pareja de Oscar, en diálogo con Telefe Noticias.

Yesica Loreley Quevedo, la mujer acusada de atropellar al hombre en Tigre

“A mí me avisaron a las diez de la mañana y solo sé eso. En el lugar hay muchas cámaras, es todo un proceso. Ayer nosotros recién pudimos enterrar a nuestro hermano, o sea que ahora estamos sacando fuerzas de donde no tenemos para pedir justicia por él”, dijo a su turno Karina, también al mismo canal de televisión.

En medio de lágrimas, Paola describió a su pareja como un hombre trabajador y buena persona. “Él se levantaba todos los días a las cuatro de la mañana. A las cinco y media salió de casa y después de ahí, le mandé mensaje porque siempre me contestaba: “Amor, llegué bien, cuidate”. Pero no me contestaba, no me contestaba. Después llegó toda mi familia a comunicarme este lamentable hecho. Era una persona sana, buena, que no se merecía lo que le pasó“, agregó Paola.

Respecto al recorrido que hacía Oscar, la mujer reveló que los fines de semana lo cambiaba porque el colectivo que pasaba cerca de su casa no circulaba a horario, por lo que se veía obligado a buscar otro recorrido.

“Ella iba alcoholizada. No sé si lo asistió, no sé cómo ella se manejó. Lo que sabemos es que en el momento fue detenida. Se dice en estos momentos que ella pagó una fianza y ha salido en libertad, pero la verdad, se dicen un montón de cosas. Lo que nosotros queremos es justicia por nuestro hermano, que pague porque le robó todo”, agregó la hermana.

En ese sentido, Karina aprovechó el espacio en el canal para pedir la colaboración de testigos y que se acerquen a la justicia para aportar datos.

El hombre atropellado en Tigre

“Si alguien vio algo que se comuniquen. Si vieron algo, lo que sea. Como nos pasó a nosotros, el día de mañana le puede tocar a otro y tenemos que estar unidos para llegar a lograr a hacer algo, no puede quedar así”, agregó.

La investigación, actualmente a cargo de Amallo, estuvo al inicio en la fiscalía del también fiscal de San Isidro Cosme Iribarren.

La víctima vivía en Grand Bourg, partido de Malvinas Argentinas. El próximo 7 de enero iba a cumplir 50 años.

Respecto a la acusada, se dio a conocer que es oriunda de Merlo, pero en la actualidad vive en Lomas de Zamora. Tiene un emprendimiento de mats para yoga.

Asimismo, su camioneta -registrada a su nombre- posee siete infracciones por exceso de velocidad impagas, en lugares como Tigre, San Isidro, Merlo, Ituzaingó y Dolores. Su deuda asciende casi a 1.800.000 pesos.