Un hallazgo numismático en Senon reescribe el conocimiento sobre la economía urbana romana en el noreste de Francia (INRAP)

El reciente hallazgo de tres depósitos de monedas romanas en Senon, al norte del departamento de Meuse, Francia, atrae la atención de la comunidad arqueológica.

Durante una excavación del Instituto Nacional de Investigaciones Arqueológicas Preventivas (Inrap), los especialistas descubrieron miles de monedas perfectamente conservadas, ocultas en grandes vasijas de cerámica y enterradas en el corazón de un antiguo barrio residencial romano.

Según los expertos consultados por Paris Match, este descubrimiento ofrece una nueva perspectiva sobre la historia económica y urbana de la región.

El equipo del Inrap documentó meticulosamente cada estrato del terreno, permitiendo reconstruir las fases de ocupación y ocultamiento (INRAP)

Depósitos planificados y contexto residencial exclusivo

Los depósitos, localizados en una parcela de 1.500 m², fueron encontrados cuidadosamente enterrados en fosas acondicionadas, lo que sugiere una operación planificada y estructurada. Las monedas, fechadas entre los años 280 y 310 d.C., permanecieron ocultas durante siglos dentro de viviendas de la Antigüedad tardía.

El Inrap destacó que estos conjuntos no fueron depositados de manera improvisada; todo indica una gestión coordinada y opuesta a la clásica imagen del tesoro escondido en emergencias. Los recipientes cerámicos, con las bocas al nivel del suelo, estaban dispuestos para facilitar el acceso, lo cual refuerza la hipótesis de un uso cotidiano o institucional y no una acción desesperada. La disposición planificada contradice la visión del tesoro oculto apresuradamente.

El contexto urbano de Senon, según la información recopilada por Paris Match, revela una ciudad transformada tras la romanización. Hacia finales del siglo I d.C., la ciudad expandió su perímetro y modernizó sus métodos constructivos, explotando la caliza local. Las viviendas donde se hallaron los depósitos disponían de suelos de cal y calefacción por hipocausto, elementos que evidencian un nivel de vida alto.

Las monedas emergieron de viviendas dotadas de suelo de cal y sistemas térmicos, en un sector privilegiado junto a la plaza central de la antigua ciudad (INRAP)

Este sector residencial, cercano a la plaza pública y edificaciones monumentales, reflejaba la prosperidad de una de las principales ciudades de los Médiomatriques, subrayó el Inrap en su comunicado del 26 de noviembre. Las mejoras en vivienda y urbanismo ilustran la prosperidad alcanzada.

Hipótesis sobre la función y destino de los fondos

Las posibles funciones de los depósitos apuntan a una gestión monetaria compleja, ideada para el mediano o largo plazo. Los arqueólogos consideran que esos fondos pudieron servir como caja de ahorro familiar, institucional o militar.

Una teoría mencionada por Paris Match los vincula con una fortificación situada a solo 150 metros, lo que permite pensar que las monedas tenían el propósito de pagar la soldada de los militares destacados en la zona.

A pesar de los incendios que afectaron el barrio, las viviendas se reconstruyeron antes de su abandono en el siglo IV; los depósitos quedaron ocultos bajo los restos de las construcciones.

Expertos consideran que los tesoros pudieron formar parte de reservas gestionadas a lo largo del tiempo por entidades domésticas o militares vinculadas a la estructura defensiva local (INRAP)

Este hallazgo resulta relevante no solo por la cantidad de monedas encontradas —la región de Meuse cuenta con más de 30 descubrimientos similares—, sino por la oportunidad de documentar el contexto exacto del enterramiento.

Según el Inrap, en declaraciones recogidas por Paris Match, la densidad de los vestigios confirma la existencia de una aglomeración urbana significativa, cuya magnitud real aún no había sido probada arqueológicamente.

Valor histórico y proyección del descubrimiento

El hallazgo en Senon proporciona a los investigadores información inédita sobre la vida cotidiana, la circulación monetaria y las estrategias económicas de una pequeña ciudad romana en los últimos siglos del Imperio.

De esta manera, el descubrimiento aporta un testimonio singular sobre la complejidad y riqueza de la historia local, además de abrir una nueva vía de estudio para comprender la evolución social y económica de la región en la Antigüedad tardía.