Milei en un acto en la Bolsa de Comercio de Rosario junto con el gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro (RS Fotos)

Las provincias podrían ser punta de lanza para el regreso de los emisores de deuda del sector público argentino en el mercado internacional. Un grupo de provincias ya manifestó en público y comenzó sus procesos internos para buscar financiamiento en Wall Street. Santa Fe aceleró y busca autorización para colocar USD 1.000 millones a una tasa, esperan, inferior al 10% anual.

El gobierno de Maximiliano Pullaro envió un proyecto a su legislatura local para conseguir permiso de emisión de deuda externa y luego buscará la habilitación del Gobierno nacional. Actualmente, por el régimen de responsabilidad fiscal vigente, la Nación evalúa qué nivel de endeudamiento tiene una provincia antes de autorizar una operación en el mercado externo. El tope de servicios de deuda es de 15% de los ingresos provinciales, y Santa Fe, explican fuentes locales, está en 1,5%, por lo que no ven razones para que la Casa Rosada no lo apruebe.

El re-acceso a los mercados internacionales es uno de los temas de mayor análisis sobre los próximos pasos del plan económico del gobierno de Javier Milei. Este martes, sin ir más lejos, fue consultado el ministro de Economía Luis Caputo en el AmCham Summit, y comentó que su expectativa es que la Nación pueda retornar este año. Dependerá para eso el nivel de riesgo país, que por ahora se sostiene por encima de los 600 puntos.

Incluso con esos números de riesgo argentino, hay emisores del sector privado que consiguieron tasas por debajo de los dos dígitos: Pampa Energía lo hizo al 8% por un monto de 340 millones de dólares. La pregunta que sobrevuela, entonces, es qué interés debería pagar el sector público cuando dé el primer paso entre los inversores de Wall Street.

Los ministros de economía Santa Fe, Pablo Olivares, de Chaco, Alejandro Abraam y de Buenos Aires, Pablo López en un evento reciente de Adcap Grupo Financiero

La especulación que hicieron desde Santa Fe es que el nivel actual de riesgo país está “al filo”, por lo que explicaron que un número más alto cerraría las puertas, pero que tampoco sería necesario una baja mucho más pronunciada para tener una tasa de un dígito anual al alcance. “Es una de las provincias que mejor crédito tiene por el bajo nivel de deuda, que es menos de 7% de los recursos anuales”, mencionó una fuente santafecina.

La provincia que gobierna Pullaro esperará a tener las dos autorizaciones, local y nacional, para embarcarse en road shows con inversores internacionales. Y creen que al Gobierno nacional le convendrá que haya provincias que salgan primero al mercado a ver qué apetito hay para financiar al sector público argentino. Otras dos provincias también manifestaron su intención ir a Wall Street en algún momento de los próximos meses: la Ciudad de Buenos Aires y Córdoba.

Para un funcionario provincial involucrado en las tratativas, los gobernadores deben aprovechar esta ventana de oportunidad para ir al mercado internacional ya que “entre agosto y septiembre por la incertidumbre cambiaria el clima financiero puede ser más difícil” y que en los Estados Unidos los fondos inversores y bancos colocadores de los bonos prefieren tener los deal cerrados antes de las vacaciones de verano en julio cuando la actividad financiera entra en receso.

En las provincias creen que para la Nación es conveniente que haya provincias que salgan a testear al mercado con riesgo argentino antes de que sea el soberano el que vuelva a emitir en la plaza internacional. “Entendemos que (con la colocación) haríamos un bien al colectivo”, dijeron desde Santa Fe. “Además, implica ingreso de divisas porque son dólares que van a ingresar en BCRA, la provincia va a ejecutar sus gastos en pesos”, ampliaron desde la provincia. La emisión santafecina, de suceder, será para financiar un plan de inversión en infraestructura.

Para Eric Ritondale, economista jefe de Puente, una de las entidades que suele actuar como colocadora de los bonos de provincias, aseguró que “se espera que algunas provincias avancen con emisiones internacionales en los próximos meses, antes de las elecciones de octubre, en tanto podría haber una ventana de oportunidad”.

Milei en AmCham dijo que el riesgo país

“Apetito internacional hay, ya que las provincias se han estado desendeudando en forma sostenida en los últimos años, y algunas tienen ambiciosos planes de desarrollo de obras de infraestructura para apuntalar las inversiones privadas. No es un inconveniente para el soberano que las provincias acudan al mercado, más bien diría lo contrario y es algo positivo y esperable”, dijo a Infobae.

No hay, por el momento, contactos directos de Nación con inversores internacionales para explorar posibilidades de financiamiento en el exterior, aseguran fuentes oficiales. Un comunicado de un grupo de bonistas que consiguieron un fallo favorable en una corte de Londres por el caso de los cupones PBI argentinos salió a asegurar que el Ministerio de Economía mantuvo reuniones con fondos de inversión en esa ciudad para hablar sobre la salida argentina al mercado internacional.

“Mecon está haciendo rondas en Londres con fondos. Empieza el juego para que los inversores abran sus carteras. Solo hay un problema: Argentina sigue desafiando la sentencia de un tribunal británico de 1.500 millones de euros sobre warrants del PBI. Argentina, respete los tribunales británicos si planea recaudar dinero en Londres», comunicó un consorcio de bonistas agrupados que empuja en la corte de ese país.

Desde el Ministerio de Economía mencionaron que esas reuniones, en realidad, tienen que ver con una charla a distancia que dio el secretario de Finanzas, Pablo Quirno en un evento financiero organizado por el banco Santander, y que no fue un road show ante inversores para buscar financiamiento.

El riesgo país se sostiene por encima de los 600 puntos. Aun así, tendría espacio para una caída en los próximos meses. Portfolio Personal Inversores consideró que la deuda argentina tuvo dos factores que influyeron de manera positiva: “Los últimos dos grandes drivers de la deuda argentina fueron el nuevo esquema cambiario anunciado el 11 de abril y, en el plano político, el buen resultado de la LLA en la Ciudad de Buenos Aires el 18 de mayo”. Javier Milei, en AmCham, fue más gráfico y dijo que el riesgo país “va a colapsar”.