El uso de la inteligencia artificial en la realización cinematográfica está creciendo de forma exponencial. Un joven festival de cine, ahora en su tercer año, exhibe hoy lo que esta tecnología es capaz de hacer en pantalla.
El AI Film Festival anual, organizado por Runway, una empresa especializada en video generado por IA, comenzó el jueves en Nueva York con diez cortometrajes de todo el mundo que hicieron su debut en la pantalla grande.
“Hacer esto, hace tres años, parecía una locura”, dijo Cristóbal Valenzuela, CEO de Runway, al público. “Hoy millones de personas producen miles de millones de videos usando herramientas que antes solo podíamos imaginar”.
El propio festival ha crecido notablemente desde su debut en 2023. Según Valenzuela, alrededor de 300 personas enviaron sus películas en la primera edición, frente a las aproximadamente 6.000 recibidas este año.
La selección de hora y media abarcó una amplia gama de estilos creativos y temas ambiciosos. Total Pixel Space, de Jacob Alder, se llevó el premio mayor. El cortometraje de 9 minutos y 28 segundos se pregunta cuántas imágenes posibles, reales o no, existen en el espacio digital y usa las matemáticas para calcular una cifra colosal. Una serie de imágenes impactantes, que va desde momentos de la vida cotidiana hasta situaciones que desafían la realidad, ofrece a los espectadores un vistazo de lo que existe.
Por su parte, Jailbird de Andrew Salter, que obtuvo el segundo lugar, narra el viaje de una gallina —desde el punto de vista del ave— a una prisión humana en el Reino Unido para participar en un programa de rehabilitación conjunta. En tercer lugar quedó One, una historia futurista sobre viajes interplanetarios dirigida por Ricardo Villavicencio y Edward Saatchi.
Los diez filmes exhibidos fueron finalistas seleccionados de entre miles que se presentaron al AI Film Festival de Runway este año. Los cortos también se proyectarán la próxima semana en Los Ángeles y París.
La forma en la que se usa y ejecuta la IA es un factor que evalúa el jurado al decidir los ganadores del festival. Pero no todas las películas fueron hechas enteramente con IA. Si bien los criterios de participación requieren que cada proyecto incluya video generado por IA, no existe un umbral específico, por lo que algunos cortos adoptan un enfoque de “medios mixtos”, combinando tomas reales, imágenes y sonidos de la vida real con elementos generados por IA.
“Queremos animar a la gente a explorar y experimentar con esto”, señaló Valenzuela en una entrevista previa a la función del jueves.
Conseguir un cortometraje coherente usando IA generativa no es tarea sencilla. Se requieren muchas instrucciones y un sinfín de indicaciones detalladas para que incluso una escena breve tenga sentido y resulte consistente. No obstante, el alcance de lo que esta tecnología permite ha aumentado considerablemente desde la primera edición del AI Film Festival en 2023, y eso se refleja en las obras actuales. Aunque persisten ciertos límites, el video generado por IA se vuelve cada vez más realista y verosímil.
Runway fomenta el uso de sus propias herramientas de IA para las películas presentadas en su festival, pero los creadores también pueden recurrir a otros recursos disponibles. En el sector, las herramientas que emplean IA para crear videos a partir de texto, imágenes y/o audio han evolucionado rápidamente en los últimos años y son cada vez más accesibles.
“La forma en que esta tecnología se ha integrado en el cine, la cultura mediática y la cultura pop, realmente se ha acelerado”, dijo Joshua Glick, profesor asociado de cine y artes electrónicas en Bard College.
Añadió que el festival de Runway, que forma parte de un puñado de eventos que buscan destacar el potencial creativo de la IA, llega en un momento en el que las empresas del sector buscan mayor legitimidad y reconocimiento para las herramientas que desarrollan, con el objetivo de consolidar alianzas en Hollywood.
La IA ya tiene una presencia notable en Hollywood, posiblemente incluso más amplia de lo que el público imagina. Más allá de los titulares —y a veces controversias— por su uso en grandes producciones para “rejuvenecer” actores o crear escenas llamativas, Glick apunta que esta tecnología suele incorporarse en la edición, retoques digitales y una variedad de trabajos detrás de cámaras, como la organización de material grabado.
Los ejecutivos de la industria suelen recalcar que la IA puede hacer más eficiente el proceso cinematográfico, permitiendo que tareas que antes requerían horas puedan resolverse en minutos, y fomentando la innovación.
No obstante, el avance y la adopción rápida de la IA también ha acrecentado la preocupación por su impacto, sobre todo en los trabajadores.
La International Alliance of Theatrical Stage Employees —que representa a profesionales detrás de cámaras en Estados Unidos y Canadá— “ha adoptado desde hace mucho las nuevas tecnologías que mejoran el arte de narrar historias”, señaló Vanessa Holtgrewe, vicepresidenta internacional de IATSE, en un comunicado. “Pero también hemos sido claros: la IA no debe usarse para menoscabar los derechos ni los trabajos de los trabajadores”.
IATSE y otros sindicatos siguen dialogando con los grandes estudios y estableciendo acuerdos para regular el uso de la IA. El Sindicato de Actores de Pantalla-Federación Estadounidense de Artistas de Televisión y Radio también ha exigido protección frente a la IA para sus miembros, un punto central en recientes negociaciones laborales.
Para el AI Film Festival de Runway, Valenzuela espera que exhibir filmes que integran video generado por IA muestre lo que es posible hacer, y cómo esta tecnología puede ayudar, no perjudicar, a los creativos.
“Es natural temer al cambio… Pero es clave entender lo que puedes hacer con esto”, afirmó Valenzuela. Incluso el propio cine, añadió, nació “gracias a avances científicos que en su momento fueron incómodos para muchos”.
Fuente: AP