El ministro de Relaciones Exteriores de Brasil, Mauro Vieira, calificó como un “comienzo auspicioso” el encuentro que mantuvo el miércoles en Washington con su par estadounidense, Marco Rubio, marcando el inicio de un proceso de negociaciones comerciales entre ambos países. El diálogo resulta significativo en el contexto de las recientes tensiones bilaterales, derivadas del arancel adicional del 50% implementado por el gobierno de EEUU sobre una amplia gama de productos brasileños desde el pasado mes de agosto.
La reunión se concretó luego de una llamada telefónica realizada la semana pasada entre los presidentes Luiz Inácio Lula da Silva y Donald Trump, en la cual ambos mandatarios instruyeron a sus cancilleres a entablar un diálogo directo con el fin de resolver la crisis comercial surgida por las nuevas medidas arancelarias.
Vieira aseguró a periodistas brasileños —en la sede de la embajada de Brasil en la capital estadounidense— que se trató de un primer paso positivo y que ambas delegaciones “trabajarán a partir de ahora en una serie de reuniones que serán acordadas para los próximos días”.
Durante el encuentro, Vieira reiteró el pedido que el propio Lula planteó la semana anterior sobre la “necesidad de revertir” las medidas adoptadas por Estados Unidos “a partir de julio”. El canciller subrayó que el levantamiento de las sanciones exigirá un proceso de negociación estructurado, que se pondrá en marcha en los próximos días mediante una agenda de encuentros entre funcionarios de ambos gobiernos.
Además del impacto arancelario directo —que afecta a una parte importante de las exportaciones brasileñas a Estados Unidos con un gravamen del 50%— Brasil se vio objeto de otras sanciones, como la revocación de visas a varios magistrados de la Corte Suprema y otras personalidades públicas brasileñas. El gobierno estadounidense justificó estas represalias en respuesta a la supuesta “caza de brujas” contra el ex presidente Jair Bolsonaro, político cercano a Trump que fue recientemente condenado por golpismo en Brasil.
Vieira señaló que el clima en la reunión fue “constructivo”, predominando el interés por centrarse en “aspectos prácticos para reanudar las negociaciones”, en concordancia con la buena predisposición que, según ambos equipos, demostraron los presidentes en sus últimos contactos. Recordó, además, que durante la videollamada del 6 de octubre, Lula y Trump acordaron empoderar a sus cancilleres para buscar una salida negociada, destacando la sintonía personal mostrada en el reciente encuentro de ambos en Nueva York durante la Asamblea General de la ONU.
La comitiva brasileña contó, además de Vieira, con la participación de representantes del equipo diplomático. Por parte estadounidense, se destaca la intervención del Representante de Estados Unidos para el Comercio, Jamieson Greer, quien tomó parte tanto en la cita a solas como en la reunión ampliada entre delegaciones.
El canciller brasileño también informó que se baraja la posibilidad de un nuevo encuentro presencial entre Lula y Trump, aunque tal cita aún depende de “la agenda de los jefes de Estado y del momento y lugar que se considere más conveniente”. Vieira aclaró ante la prensa que ambos gobiernos están interesados en que sus presidentes se reúnan “en breve”, aunque todavía se desconoce si la ocasión será la próxima semana en Malasia, a donde Lula viajará para asistir a la cumbre de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN).
(Con información de AFP y EFE)