Un tormentoso día vivió el dueño de un Mercedes-Benz 230 SL Pagoda este sábado en la Autopista Panamericana. El lujoso auto de colección que había sacado ese mismo día del taller perdió una rueda en medio de la vía y provocó un choque múltiple que destruyó el coche.
De acuerdo a las imágenes que circularon en las redes sociales durante las últimas horas, todo habría sido provocado porque el vehículo perdió una rueda en el corazón de la calzada, a la altura del cruce con Camino del Buen Ayre. Según pudo saber Infobae, el conductor había sacado el Mercedes-Benz blanco del taller ese mismo día durante la mañana después de hacer una refacción, pero todo ocurrió por una tuerca mal ajustada.
El impacto se produjo cerca de las 9:30, cuando el auto quedó inmovilizado sobre la vía rápida de la autopista. Las imágenes registradas por transeúntes muestran cómo la rueda desprendida quedó a pocos metros del vehículo, sin señalización, lo que generó una situación de extremo peligro para los demás conductores. Seguido a esto, otro automóvil que circulaba a alta velocidad embistió la parte trasera del Mercedes-Benz, desplazándolo violentamente hacia el guardarraíl y que otros vehículos se los lleven por delante. A pesar de la magnitud del choque, no se reportaron víctimas fatales ni heridos, solo daños materiales de consideración.

Según lo que adelantaron, la causa del siniestro habría sido una tuerca mal ajustada en una de las ruedas. Este desperfecto mecánico provocó que esta se desprendiera del eje mientras el auto transitaba por la autopista, dejando al vehículo detenido y vulnerable en plena vía rápida. La ausencia de señalización o balizas en el momento previo al choque agravó la situación, ya que otros conductores no lograron advertir la presencia del obstáculo hasta instantes antes del impacto.
La secuencia del accidente generó una rápida intervención de los servicios de emergencia y obligó a interrumpir parcialmente el tránsito en la zona. Personal de seguridad vial y bomberos trabajaron para retirar los vehículos siniestrados y despejar la calzada. La destrucción del Pagoda fue total: el impacto afectó tanto la carrocería como parte del chasis, resultando en la pérdida casi irreparable de una pieza considerada de alto valor para los coleccionistas de automóviles clásicos.
Las imágenes del siniestro, difundidas ampliamente a través de redes sociales, muestran la secuencia completa: desde el momento en que el Mercedes-Benz quedó detenido, hasta el choque posterior que lo dejó cruzado sobre varios carriles.

El Mercedes-Benz 230 SL Pagoda actualmente puede alcanzar a valores por encima de los 130.000 a 180.000 dólares, dependiendo del modelo. Producido entre 1963 y 1971, el W113 es reconocido por su diseño innovador y su techo rígido removible, que le valió el apodo de “Pagoda” debido a la forma particular de su estructura. Este ejemplar, en particular, había pasado los últimos dos años en proceso de restauración.
El Pagoda es un modelo icónico dentro de la historia automotriz. Concebido bajo la supervisión de Friedrich Geiger y presentado en el Salón del Automóvil de Ginebra de 1963, el W113 se distinguió por su estilo funcionalista y líneas rectas, una marcada diferencia respecto a sus predecesores. Dotado de un motor de seis cilindros en línea de 2.308 cc y 150 CV en su versión original, ofrecía innovaciones como transmisión automática y frenos de disco en las cuatro ruedas, elementos avanzados para la época.
En tanto, debe su sobrenombre al particular diseño de su techo rígido removible, ideado por Paul Bracq, que recuerda a las construcciones orientales cuando se observa desde la parte trasera. Este detalle técnico permitió que el modelo se comercializara tanto en versión descapotable como con techo duro, sin necesidad de desarrollar variantes adicionales. Durante sus ocho años de producción, se fabricaron 48.912 unidades en diferentes motorizaciones (230, 250 y 280 SL), consolidando su estatus como uno de los deportivos más valorados de la marca alemana.