La ministra de Exteriores adjunta de Ucrania, Mariana Betsa, en una foto de archivo (EFE/EPA/TIL BUERGY)

Mariana Betsa, viceministra de Asuntos Exteriores de Ucrania, reclamó este jueves en la sede de las Naciones Unidas, en Nueva York, la necesidad de una “misión militar de aliados sobre el terreno” como medida imprescindible para detener la invasión de Rusia.

Durante su intervención en un debate de la Asamblea General de la ONU sobre los territorios ocupados por fuerzas rusas, Betsa advirtió que “la guerra continuará” si no se concreta esta presencia aliada.

Betsa agradeció la labor de los 35 países que integran la llamada Coalición de Voluntarios, reunida en París este mismo día. Ucrania espera de este foro garantías concretas de seguridad por tierra, mar y aire que sirvan como elemento de disuasión frente a nuevas agresiones rusas una vez termine el actual conflicto.

“Rusia no se detendrá por sí sola. Se detendrá solo cuando nosotros, como comunidad internacional, la paremos mediante una presión común que incluya sanciones políticas, económicas y financieras”, remarcó la diplomática en la ONU.

En paralelo al discurso de Betsa, el presidente de Francia, Emmanuel Macron, confirmó este jueves que 26 miembros de la Coalición de Voluntarios han asumido el compromiso de desplegar apoyos en el terreno ucraniano o de proporcionar presencia en el mar o en el aire para reforzar la seguridad de Kiev.

Betsa reiteró durante el debate que su país nunca reconocerá “los territorios ocupados por Rusia” y prometió luchar “por su integridad territorial y su restauración”. Recalcó también el compromiso de Ucrania con la paz y puso el foco en los ataques rusos sobre ciudades ucranianas, vinculando la escalada militar a las recientes apariciones públicas de Vladimir Putin junto a su homólogo chino, Xi Jinping, y al primer ministro indio, Narendra Modi, durante la Cumbre de la Organización de Cooperación de Shanghái.

Ante las declaraciones de la representante ucraniana, el embajador de Rusia ante la ONU, Vasili Nebenzia, argumentó que los territorios ocupados en Ucrania “son nuevas entidades de la Federación de Rusia”, incorporadas tras “votaciones libres de sus residentes”. Nebenzia tachó al gobierno ucraniano de “régimen nazi” y lo acusó de “rusofobia” y de haber accedido al poder con el respaldo de Occidente. No obstante, también aseguró que Moscú mantiene la disposición para negociar la paz, siempre que se reconozcan “las nuevas realidades territoriales”, en referencia a la anexión de Crimea y otras cuatro regiones desde 2014.

El embajador de Rusia ante la ONU, Vasili Nebenzia (REUTERS/Jeenah Moon)

A nivel diplomático, el presidente ucraniano Volodimir Zelensky afirmó haber mantenido una conversación telefónica con líderes europeos y el presidente estadounidense Donald Trump para analizar sanciones sobre Rusia y reforzar la defensa del espacio aéreo ucraniano. “Hablamos sobre cómo acercar la situación a la paz real. La presión debe utilizar medidas fuertes, especialmente económicas, para forzar el fin de la guerra”, indicó Zelensky en redes sociales.

Al término de la cumbre en París, Zelensky y Macron celebraron el compromiso de 26 países para establecer garantías de seguridad tras un alto el fuego. Macron aclaró que la lista concreta de países y los detalles sobre la forma de contribución no se harán públicos para preservar la seguridad de la operación. El canciller alemán Friedrich Merz confirmó la participación de Alemania en la financiación, el armamento y el adiestramiento de las fuerzas armadas de Ucrania.

Por su parte, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, afirmó que el compromiso mostrado por los 26 países ayuda a sostener una paz duradera y disuadir futuras agresiones. Von der Leyen resaltó que lo que está en juego “es la seguridad de todo el continente”. El primer ministro británico Keir Starmer aseguró, además, que los aliados incrementarán el suministro de misiles de largo alcance y advirtió contra cualquier confianza en el presidente ruso.

Macron y Merz coincidieron en la necesidad de mantener abiertas las vías diplomáticas para lograr un alto el fuego, aunque insistieron también en que la escalada de presión mediante sanciones seguirá si Rusia descarta las conversaciones de paz. La Unión Europea trabaja en el decimonoveno paquete de sanciones, mientras sus máximos representantes reiteran el objetivo común de garantizar la “regeneración de las fuerzas ucranianas” y la seguridad integral del país.

El presidente ucraniano Volodimir Zelensky se reunió con el presidente francés Emmanuel Macron para la cumbre de la Coalición de Voluntarios este jueves en París (REUTERS)

En la cita, participaron de modo presencial o telemático representantes de 35 países, entre los que se incluyen el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, y líderes del bloque comunitario. El enviado principal de Estados Unidos para el conflicto ucraniano, Steve Witkoff, asistió en representación de Washington, mientras se prevé que el gobierno estadounidense detalle en los próximos días la magnitud de su participación en el nuevo dispositivo de seguridad.

El presidente Zelensky calificó como “necesaria” una cumbre directa con su homólogo ruso, aunque hasta ahora no ha habido avances para concretar ese encuentro. Putin sugirió la posibilidad de recibir a Zelensky en Moscú, pero Kiev ha descartado esa opción y mantiene su exigencia de una reunión con testigos internacionales.

Las próximas jornadas serán clave para definir el respaldo militar y diplomático sobre el que descansará la seguridad de Ucrania y la respuesta internacional frente a la continuación de la guerra.

(Con información de EFE y EP)