El sitio de un edificio de apartamentos alcanzado por un ataque de drones rusos, en Mykolaiv, Ucrania, 25 de mayo de 2025. (REUTERS/Viktoriia Lakezina)

El jefe del Servicio de Inteligencia Exterior de Ucrania reveló el domingo que su país posee evidencia contundente de que el régimen de China está proporcionando material esencial para la guerra de agresión rusa, incluyendo componentes electrónicos críticos para drones, maquinaria especializada y productos químicos militares.

Oleg Ivashchenko, director del servicio de inteligencia exterior ucraniano, declaró en una entrevista con la agencia estatal Ukrinform que las autoridades de Kiev han documentado un flujo constante de suministros chinos hacia Rusia, a pesar de las afirmaciones públicas de Beijing sobre su supuesta neutralidad en el conflicto.

“Tenemos información de que China facilita maquinaria, productos químicos especiales, pólvora y componentes especialmente diseñados para usos militares”, señaló Ivashchenko durante la entrevista publicada este domingo.

El funcionario de inteligencia añadió que su servicio ha “verificado datos de 20 plantas rusas” donde se utilizan estos materiales de origen chino para la producción de armamento y equipos militares utilizados en la invasión de Ucrania, que comenzó en febrero de 2022.

Dependencia tecnológica

Una fábrica rusa de drones basados en el iraní Shaed. El 80% de los componentes electrónicos esenciales utilizados en los drones rusos proceden actualmente de China

Según los datos revelados por el servicio de inteligencia ucraniano, la dependencia rusa de la tecnología china ha alcanzado niveles críticos en 2025. La inteligencia de Kiev determinó que el 80% de los componentes electrónicos esenciales utilizados en los drones rusos proceden actualmente de China, según reportó el medio ucraniano Ukrainska Pravda.

Esta revelación cobra especial relevancia considerando el uso intensivo que las fuerzas rusas han hecho de drones en sus ataques contra territorio ucraniano. Solo en el más reciente bombardeo masivo, Rusia lanzó 298 drones contra Ucrania, lo que constituye “la mayor cifra” registrada durante toda la guerra, según confirmó Yuriy Ignat, portavoz de la fuerza aérea ucraniana.

Los ataques del fin de semana dejaron al menos 12 muertos y decenas de heridos, incluyendo varios menores de edad, en lo que los servicios de emergencia describieron como una “noche de terror” en la región de Kiev y otras áreas del país.

Redes de suministro encubiertas

Ivashchenko detalló que las entregas de materiales chinos a Rusia operan a través de sofisticadas redes de encubrimiento diseñadas para evadir las sanciones internacionales. Estas operaciones “suelen implicar reetiquetados, nombres engañosos y empresas fantasma a través de las cuales se envían de China a Rusia los artículos necesarios para fabricar microelectrónica”, explicó el funcionario de inteligencia.

Esta información corrobora acusaciones previas del presidente ucraniano Volodimir Zelensky, quien en abril acusó directamente a China de suministrar armas a Rusia. “Recibimos información de que China está suministrando armas a Rusia”, declaró Zelensky en una rueda de prensa en Kiev, añadiendo que los servicios de inteligencia habían “detectado la presencia de pólvora y artillería de origen chino”.

Alianza económica y militar en expansión

El presidente ruso, Vladímir Putin (D), estrecha la mano de su homólogo chino, Xi Jinping (I), durante una ceremonia de bienvenida antes de sus conversaciones en el Kremlin, en Moscú, el 8 de mayo de 2025. EFE/EPA/Evgenia Novozhenina / POOL

Las revelaciones de la inteligencia ucraniana se producen en el contexto de una creciente alianza entre Moscú y Beijing. Durante una visita de Xi Jinping a Moscú en mayo, los líderes de ambas naciones sellaron una alianza económica valorada en 200.000 millones de dólares y reforzaron sus lazos políticos.

En esa ocasión, Xi Jinping prometió que Beijing apoyaría a Moscú frente al “acoso hegemónico” occidental, mientras Putin destacó que el intercambio comercial entre ambos países había alcanzado casi 245.000 millones de dólares el año anterior.

La cooperación militar se ha intensificado paralelamente a los vínculos económicos. Kiev anunció la semana pasada la captura de dos ciudadanos chinos que luchaban en las filas del ejército ruso, y Zelensky denunció que cientos de ciudadanos chinos han sido reclutados por Rusia para participar en la guerra.

Reacción internacional tras el último ataque ruso

El último bombardeo ruso ha generado llamados a endurecer la presión internacional sobre Rusia y sus aliados. El gobierno alemán declaró el domingo que los aliados de Kiev “deben reaccionar con determinación” tras el bombardeo récord de drones rusos.

“No podemos aceptar esto”, declaró el ministro de Relaciones Exteriores alemán Johann Wadephul a la cadena ARD, añadiendo que el presidente ruso Vladimir Putin “está pisoteando los derechos humanos, esto es una afrenta”.

Por su parte, la jefa de diplomacia de la Unión Europea, Kaja Kallas, pidió ejercer “la mayor presión internacional” sobre Rusia, señalando que “los ataques de anoche muestran una vez más que Rusia está decidida a aumentar el sufrimiento y a aniquilar a Ucrania”.

A pesar de un reciente intercambio de prisioneros entre Rusia y Ucrania —el mayor desde el inicio de la invasión con 1.000 prisioneros de cada bando— la escalada militar continúa intensificándose. Los ataques rusos han causado víctimas civiles en múltiples regiones ucranianas, mientras que drones ucranianos han provocado el cierre temporal de aeropuertos en Moscú.

El presidente Zelensky ha renovado sus llamados a la comunidad internacional para que ejerza mayor presión sobre Putin, pidiendo específicamente que se apunte contra “las debilidades de la economía rusa” para forzar el fin de la guerra.