En el AmCham Summit 2025, tres CEOs marcaron que adaptarse al nuevo escenario, invertir con visión global y liderar la incorporación tecnológica son responsabilidades que el sector privado debe asumir sin esperar condiciones ideales

Durante el panel “El rol del sector privado en la generación de empleo sostenible” del AmCham Summit 2025, realizado en el Centro de Convenciones de Buenos Aires (CEC), tres referentes del empresariado argentino compartieron sus visiones sobre el escenario económico local y los desafíos que enfrenta el país en el marco del programa del Gobierno de Javier Milei.

Martín Ticinese, presidente de Cervecería y Maltería Quilmes, abrió su exposición con una afirmación contundente: “Sin duda, bueno, hoy Argentina es distinta. Cambió y el que no se adapte va a quedar afuera”. A su juicio, resulta indispensable que las estructuras normativas y legales acompañen ese cambio con rapidez y flexibilidad. “Por eso la importancia de tener, desde el marco legal y también desde la parte de legislación, una estructura que te permita poder adaptarte”, remarcó.

Ticinese señaló que minimizar el impacto de los cambios ocurridos desde diciembre de 2023 era un error. “El nivel de swing que tuvo Argentina, desde la parte económica a la parte macro, es enorme, y todo requiere su tiempo de adaptación, de aprendizaje y de reconocer que, si seguimos haciendo las cosas como antes, no vamos a ir a un buen futuro”, explicó. Consideró que la transformación estructural que vive el país exige nuevos enfoques, especialmente por parte del sector privado.

Según el presidente de Quilmes, el crecimiento económico representa la solución a muchos de los problemas actuales. “Lo que necesita Argentina es crecer. ¿Cuál es la solución a todos los males? Es que Argentina crezca, que las compañías crezcan”, afirmó. En ese sentido, insistió en la necesidad de mantener consistencia en el rumbo económico, dado que los procesos de planificación, inversión y generación de empleo requieren previsibilidad. “Para definir procesos de toma de gente, inversiones, presupuestos, planes de un año, dos años, tres años, diez años, las cosas no pueden cambiar tan rápido. Y para eso, creo que la consistencia y el rumbo necesitamos mantenerlo. Esa es nuestra responsabilidad”, puntualizó.

Ticinese también destacó la vocación de largo plazo de su empresa. “Nosotros queremos estar acá 135 años más. Por eso es nuestra vocación total en atacar los problemas de competitividad, de eficiencia, con muchísima disciplina.” Agregó que la Argentina cuenta con recursos humanos y naturales valiosos, lo que otorga una base sólida para construir un futuro con empleo sostenible.

“Nosotros, los privados, somos los que generamos condiciones dentro de cada una de nuestras empresas para crear ese empleo sostenible a largo plazo como factor principal de ese futuro para Argentina”, afirmó. También mencionó que 6,3 millones de personas tienen empleo privado registrado en el país, lo que representa una base importante desde la cual expandir el impacto del sector productivo.

Por su parte, Martín Galdeano, CEO de Ford Argentina, puso el foco en la necesidad de competitividad a escala internacional como eje para definir las estrategias de inversión, y evitó dar detalles de su reunión con el ministro de Economía, Luis Caputo, de este lunes. Sí confirmó que planteó la necesidad de bajar impuestos para que la industria sea más competitiva.

“Nosotros venimos a invertir de una forma que nos permita ser competitivos con otros lugares del mundo”, sostuvo. Destacó que la automotriz destinó casi 700 millones de dólares a su planta de Pacheco, donde produce la pick-up Ranger, así como a su cadena de proveedores.

En ese proceso, Galdeano detalló que la empresa invirtió más de 40.000 horas de entrenamiento para transformar perfiles laborales tradicionales en trabajadores capacitados en tecnología y mantenimiento de robots. Esta estrategia de reconversión laboral formó parte de una política más amplia que incluye acuerdos sindicales competitivos.

El CEO de Ford remarcó que una inversión de esa magnitud no puede orientarse únicamente al mercado interno. “No hacés una inversión de semejante porte para abastecer solo a Argentina. Tenés que ir a buscar el mercado”. En ese sentido, destacó que la exportación de servicios de ingeniería y conocimiento se transformó en una pieza clave del modelo de negocios. “Eso nos lleva un tiempo importante en cómo lo pensamos, cómo lo estructuramos y cómo salimos a competir con servicios de ingeniería del mundo”, añadió.

Galdeano subrayó que la empresa tiene 6.000 empleados directos y alcanza a 90.000 personas en todo el país, lo que, a su juicio, muestra una presencia federal significativa y una capacidad de tracción sobre el empleo indirecto.

El tercer expositor fue Daniel Ketchibachian, CEO de Aeropuertos Argentina, quien abordó el papel del sector privado en la transformación tecnológica del país. En particular, destacó el rol central de la inteligencia artificial como herramienta clave para el futuro económico. “Hoy te tengo que decir que sea un nexo para traer a Argentina la inteligencia artificial”, expresó. Para Ketchibachian, el desafío no consiste solo en adoptar tecnología, sino en entender el papel que va a jugar en todas las categorías, en todas las industrias.

“El sector privado tiene que ser aquel que permita que la inteligencia artificial posibilite a las empresas volver a ser potencia mundial”, afirmó. Según el CEO, ignorar el potencial transformador de esta tecnología podría significar perder una oportunidad estratégica para el país. Por eso, consideró urgente que el empresariado comprenda la dimensión del cambio que se avecina.