El Parlamento ucraniano aprobó el jueves por amplia mayoría un proyecto de ley para restablecer la independencia de las principales agencias anticorrupción del país, revirtiendo una controvertida medida de la semana pasada que había limitado sus poderes y provocado las primeras grandes protestas desde el inicio de la invasión rusa.
La sesión parlamentaria, que fue la primera transmitida en vivo desde que comenzó la guerra hace casi tres años y medio, comenzó con una pelea a golpes entre dos legisladores, reflejando el ambiente tenso que rodea la controversia anticorrupción en un momento crítico para el país.
La nueva legislación fue aprobada con 331 votos a favor y nueve abstenciones, casi un centenar más de los 226 necesarios para sacar adelante una ley, según las cifras oficiales de la Verkhovna Rada, el parlamento ucraniano.
En las afueras del parlamento, manifestantes que se habían congregado para seguir el debate celebraron el resultado con gritos y aplausos.
Poco después, la ley fue promulgada por el presidente Volodimir Zelensky. “Acabo de firmar el documento y el texto se publicará de inmediato. Esto garantiza el trabajo normal e independiente de los organismos anticorrupción y de todas las fuerzas del orden de nuestro país”, declaró.
Marcha atrás tras críticas internacionales
La medida revierte una ley aprobada el 22 de julio que colocaba a la Oficina Nacional Anticorrupción de Ucrania (NABU) y a la Fiscalía Especializada Anticorrupción (SAP) directamente bajo el control del fiscal general, quien es nombrado por el presidente.
Esa legislación inicial había sido fuertemente criticada por la Unión Europea, que apoya a Kiev en su guerra contra Rusia, así como por la sociedad civil ucraniana, dando lugar a importantes manifestaciones en el país que representaron las primeras grandes protestas desde que comenzó la invasión a gran escala de Rusia el 24 de febrero de 2022.
La primera ministra, Yulia Sviridenko, aplaudió la decisión del jueves y aseguró que con la nueva ley se “elimina el riesgo de injerencia en el trabajo de los organismos de lucha contra la corrupción”.
“Se trata de una respuesta clara a las expectativas de la sociedad y de nuestros socios europeos”, agregó en redes sociales.
Crisis política para Zelensky
Confrontado a la primera crisis política grave desde que empezó su mandato hace seis años, el presidente Volodimir Zelensky inicialmente intentó defender el texto aprobado el 22 de julio, acusando al NABU y al SAP de ser ineficaces y de estar bajo “influencia rusa”.
Zelensky dijo que su objetivo había sido acelerar las investigaciones prolongadas, asegurar más condenas y eliminar la interferencia rusa en las investigaciones, sin dar detalles específicos.
Sin embargo, ante la presión pública y internacional, el presidente ucraniano cambió de rumbo. Este jueves aseguró haber “escuchado” a los manifestantes.
El ministro ucraniano de Exteriores, Andrii Sybiha, celebró la decisión. “Lo arreglamos”, escribió en X, añadiendo que su país “está comprometido con las reformas y la lucha contra la corrupción” y que Zelensky “demostró un enfoque de principios”.
Respaldo de la UE
La comisaria de Ampliación de la UE, Marta Kos, quien había descrito los cambios legislativos de la semana pasada como “un serio paso atrás”, dio la bienvenida a la aprobación del proyecto de ley y dijo que los legisladores habían “corregido el voto dañino de la semana pasada”.
“La ley de hoy restaura salvaguardias clave, pero los desafíos permanecen”, escribió en X Kos, quien monitorea el historial de los países candidatos a unirse al bloque. “La UE apoya las demandas de reforma de los ciudadanos (ucranianos). Mantener los valores fundamentales y luchar contra la corrupción debe seguir siendo la prioridad”.
Guillaume Mercier, portavoz de la Comisión Europea, consideró que el proyecto de ley aprobado restablece las “principales salvaguardias” que permiten la “independencia” de las agencias anticorrupción.
Combatir la corrupción arraigada es crucial para las aspiraciones de Ucrania de unirse a la UE y mantener el acceso a miles de millones de dólares de vital ayuda occidental en la guerra. También es un esfuerzo que goza de un amplio apoyo público.
La rama ucraniana de Transparencia Internacional había criticado la legislación de la semana pasada, diciendo que debilitó una de las reformas más significativas desde lo que Ucrania llama su Revolución de la Dignidad en 2014.
Las nuevas disposiciones
El nuevo texto renueva la mayoría de las disposiciones que garantizan la independencia del NABU y del SAP, según el documento publicado en la página web del Parlamento.
La legislación también establece verificaciones adicionales, como tests regulares con detector de mentiras para los empleados que tengan acceso a información clasificada, para evitar cualquier “acción en provecho” de Rusia.
Zelensky subrayó que bajo la nueva ley, el fiscal general y sus adjuntos no pueden dar órdenes a las agencias anticorrupción ni interferir en su trabajo.
Momento crítico en el frente
La controversia anticorrupción surgió en un momento particularmente delicado para Ucrania. El ejército ruso, que es más grande, está acelerando sus esfuerzos para perforar las defensas de primera línea de Ucrania e intensificando su bombardeo de ciudades ucranianas.
También hay incertidumbre sobre cuántas armas adicionales pueden proporcionar los socios occidentales de Ucrania y con qué rapidez, lo que hace que mantener la confianza pública en el liderazgo sea fundamental.
Aunque las protestas no pedían la destitución de Zelensky, la controversia amenazó con socavar la confianza pública en sus líderes en este momento crítico para el país.