Carlos González Vaca, “El Estrella”.

La justicia chilena dictó este lunes la pena máxima contra Carlos Leonardo González Vaca, alias “Estrella”, identificado como líder de una de las células del Tren de Aragua en Chile.

El fallo, emitido por el Tribunal Oral en lo Penal de Iquique, condena al imputado a presidio perpetuo calificado, pena que impide la opción de libertad condicional antes de 40 años, por delitos que incluyen secuestro con homicidio, tráfico de migrantes, trata de personas con fines de explotación sexual y asociación ilícita en calidad de jefe.

La sentencia fue el resultado de un juicio considerado histórico, que se extendió por más de tres meses y requirió la presentación de más de 1.000 pruebas documentales, 224 testigos y 38 peritos. La fiscal regional de Tarapacá, Trinidad Steinert, valoró la resolución como ejemplar y aseguró que “es una sentencia que demuestra que el Estado de Chile es quien tiene el control”.

Durante el proceso, se comprobó que la célula dirigida por “Estrella” operó entre 2021 y 2022 en la región de Tarapacá, al norte del país. La organización, definida por el tribunal como una estructura criminal jerárquica, asumió el control territorial en zonas estratégicas, con un alto grado de planificación, y se dedicó al crimen organizado, incluyendo secuestros con mutilación y asesinatos como método de intimidación.

La sentencia fue el resultado de un juicio considerado histórico, que se extendió por más de tres meses y requirió la presentación de más de 1.000 pruebas documentales, 224 testigos y 38 peritos

Junto con González Vaca, otras once personas fueron condenadas por delitos similares. Destaca el caso de Hernán Landaeta Garlotti, alias “Satanás”, quien fue condenado a cadena perpetua simple y 47 años adicionales de cárcel. Landaeta fue identificado como el principal sicario del grupo, responsable de actos de violencia extrema, incluyendo amedrentamientos a mujeres víctimas de trata.

Otros tres acusados recibieron penas de presidio perpetuo simple, entre ellos Zeus Velásquez, Juan Carlos Blanco y Daniel Azuaje, mientras que el resto de los miembros de la célula fue sentenciado a penas que oscilan entre 2 y 22 años de prisión. Además, dos mujeres vinculadas al grupo fueron condenadas a más de 20 años de cárcel.

Esta es la segunda gran sentencia en contra del Tren de Aragua en Chile. En marzo, otro tribunal condenó a 34 miembros de la organización a penas que, en conjunto, sumaron más de 560 años de prisión. Las autoridades chilenas consideran que la banda criminal venezolana ha logrado establecer operaciones significativas en el país, replicando el modelo violento con el que emergió en la cárcel de Tocorón, en Venezuela, en 2014.

La condena llega meses después de que el gobierno estadounidense de Donald Trump declarara al Tren de Aragua como una organización terrorista extranjera y una amenaza global a la seguridad de Estados Unidos, lo que ha intensificado el seguimiento internacional a sus actividades en América Latina.

Según informes de inteligencia, la red criminal ha expandido su influencia más allá de Venezuela, con presencia activa en Colombia, Perú, Ecuador, Brasil y Chile, aprovechando flujos migratorios, vacíos institucionales y zonas urbanas vulnerables. La sentencia en Tarapacá representa un intento firme del Estado chileno por frenar el avance del crimen organizado transnacional, y marca un hito judicial que, según la fiscalía, servirá de precedente para futuras causas similares.

(Con información de AP, AFP y EP)