El órgano más antiguo de la cristiandad vuelve a sonar en Jerusalén tras ocho siglos de silencio - (EFE)

Ocho siglos después de haber sido sepultado por los cruzados al huir de Belén, un órgano milenario ha recuperado su voz original gracias a un proyecto internacional liderado por el musicólogo español David Catalunya.

El instrumento, considerado el órgano más antiguo de la cristiandad y probablemente el más longevo que aún puede sonar en el mundo, será presentado públicamente este 9 de septiembre en Jerusalén.

El hallazgo, impulsado por el Instituto Complutense de Ciencias Musicales de Madrid (ICCMU) y financiado por el European Research Council (ERC), marca un hito en la historia de la música y el patrimonio cultural.

El órgano fue construido en el siglo XI en Francia y trasladado a Tierra Santa en el siglo XII para acompañar la liturgia cruzada en la iglesia de la Natividad de Belén. Un siglo después, ante la inminente expulsión de los clérigos latinos, el instrumento fue enterrado junto a otros tesoros, como campanas cuya posible relación sonora aún se investiga.

El redescubrimiento de este órgano no solo representa un avance científico, sino que también permite revivir una parte esencial de la tradición musical medieval.

Un proyecto internacional liderado por el musicólogo David Catalunya recupera el instrumento medieval hallado en Belén - (EFE)

El proceso que condujo a este descubrimiento comenzó en 2019, cuando David Catalunya, entonces investigador en la Universidad de Oxford, localizó una referencia sobre el órgano y decidió iniciar una investigación exhaustiva.

El proyecto, que actualmente se desarrolla en el ICCMU de Madrid bajo el nombre ‘Resound’, cuenta con el respaldo del ERC y la colaboración de expertos internacionales.

El equipo de investigación ha trabajado en estrecha cooperación con el organero Winold van der Puten y el Studium Biblicum Franciscanum de Jerusalén, aunque no participan instituciones israelíes en la iniciativa.

La historia del órgano está marcada por su periplo a través de Europa y Oriente Medio. Tras su construcción en Francia, el instrumento fue llevado a Belén, donde permaneció en uso hasta el siglo XIII. En 1906, arqueólogos del Studium Biblicum Franciscanum de Jerusalén hallaron el órgano durante una excavación, junto a otros objetos litúrgicos.

A pesar de que el instrumento fue protegido y expuesto, su relevancia pasó inadvertida para la comunidad académica durante más de un siglo, hasta que la investigación actual permitió comprender su verdadero valor histórico y musical.

El hallazgo, impulsado por el ICCMU y financiado por el ERC, marca un hito en la historia musical y patrimonial - (REUTERS/Ammar Awad)

La recuperación del órgano implicó la fabricación de réplicas en los Países Bajos, con el objetivo de reconstruir las partes perdidas y restaurar el sonido original. Las réplicas, elaboradas por van der Puten, se trasladaron a Jerusalén para ser comparadas con los tubos originales conservados en el Terra Sancta Museum. El equipo utilizó una caja de órgano portátil para realizar las pruebas.

Según relató Catalunya a EFE, el 20 de mayo de 2025 se produjo el descubrimiento clave: algunos de los tubos originales, en un estado de conservación excepcional, emitieron sonido sin necesidad de restauración ni intervención alguna. “Nos sorprendió de una manera extraordinaria”, afirmó el investigador, quien describió la experiencia como “abriendo la tumba de un faraón” y viviendo “como flotando dentro de un sueño”.

El propio Catalunya, que también es organista, será el encargado de hacer sonar los tubos originales durante la presentación en Jerusalén, recreando la vibración medieval que acompañó la liturgia cruzada en la iglesia de la Natividad de Belén.

Ocho de los tubos suenan “como si estuvieran hechos ayer”. Sobre el carácter del instrumento, el musicólogo subrayó: “Es muy distinto al de un órgano moderno o incluso del Renacimiento. Es un sonido sorprendente y con mucho carácter, muy rico y variado a lo largo del registro entre tubos graves, medios y agudos”.

La presentación pública del órgano, prevista para el 9 de septiembre, permite que por primera vez en la historia moderna se escuche el sonido original de estos tubos milenarios. Catalunya enfatizó que la investigación sigue en marcha y que los resultados obtenidos hasta ahora no son definitivos, ya que el estudio del instrumento y su contexto histórico continúa tras este acontecimiento sin precedentes.