La disputa mediática entre Wanda Nara, Mauro Icardi y la China Suárez sumó un nuevo capítulo que avivó las llamas del conflicto. Zaira, hermana de Wanda, dejó entrever su posición de manera sutil pero impactante, generando un revuelo inmediato entre sus seguidores. El epicentro de la polémica fue un video breve que compartió en sus redes sociales, donde, más allá de su rutina de maquillaje y su look playero, la elección de la música se robó toda la atención.
En el clip, Zaira optó por acompañar el posteo con la canción “Parte & Choque”, de Alex Krack y Jøtta, un tema que podría haber pasado desapercibido de no ser porque fue el mismo que la China utilizó en su famoso video de los “cuernitos” dirigido a Wanda en el punto más álgido de la controversia. La letra de la canción, repleta de referencias provocadoras, parecía aludir a la tensa relación entre las partes: “Que la parte y la choque y que solita trepe y se monte; cuando yo le hablo, que solita se alborote…”. Este gesto, lejos de ser casual, fue interpretado como un golpe estratégico que posicionó a la modelo en el centro del cruce mediático, especialmente porque Zaira se venía manteniendo al margen de cualquier tipo de opinión al respecto.
Las reacciones no tardaron en llegar. Los seguidores de las hermanas Nara llenaron la publicación con comentarios cargados de apoyo y una cuota de picardía. Entre los mensajes más destacados, podían leerse frases como: “Zaira agitando siempre”, “Temita y besito a la oriental”, “Club Atlético Zaira Nara” y “Aguante las Nara. Son mil veces mejores que la China”. Otros, en cambio, celebraron el gesto de forma más directa: “A vos te queda mejor esta canción”.
Semanas atrás, un episodio que alimentó aún más las tensiones ya existentes. Todo comenzó con el video que la actriz compartió en TikTok, donde, en apariencia, ejecutaba una coreografía inofensiva, pero que se convirtió en un símbolo de provocación directa hacia la empresaria. La razón: Suárez realizó el gesto de los “cuernitos” en medio de la danza, un guiño que, en el contexto de su conflictiva historia con la empresaria, resultó explosivo para sus seguidores.
La polémica no se limitó al gesto. La locación del video llamó la atención de inmediato. La actriz se encontraba en lo que muchos identificaron como “la casa de los sueños”, una exclusiva propiedad que Nara había deseado adquirir junto a Icardi tiempo atrás. Este detalle no pasó desapercibido, y la publicación fue rápidamente viralizada. El Ejército de LAM, una de las cuentas más activas en redes sociales, compartió el video con un comentario que resumía la interpretación generalizada: “La China desde la casa de los sueños de Wanda le manda cuernitos”. La reacción de los usuarios no tardó en llegar. “Todo vuelve”; “Qué lindo va a ser cuando le caiga el karma”; “Cero personalidad”; “Es una mina grande”; “Mmm esto no termina bien chiquis…”, fueron solo algunos de los cientos de mensajes que llenaron las redes.
Este episodio, que por sí solo parecía suficiente para agitar las aguas, no fue más que un eslabón en la larga cadena de conflictos que comenzó en 2021, cuando Wanda Nara descubrió que su pareja de ese entonces, Mauro, había tenido un encuentro clandestino con la exintegrante de Casi Ángeles en un lujoso hotel de París. Aquella revelación desató un huracán mediático que, hasta el día de hoy, no ha perdido fuerza. Entre declaraciones cruzadas, separaciones, reconciliaciones y nuevos enfrentamientos, el triángulo amoroso se ha convertido en una de las historias más explosivas y comentadas del espectáculo.
La coreografía de los “cuernitos” fue interpretada por muchos como un golpe intencional hacia la conductora, en un momento donde las tensiones parecían haber bajado. Sin embargo, lejos de cerrar heridas, este gesto reabrió las viejas disputas. El video no solo revivió la polémica, sino que reforzó la narrativa de un enfrentamiento sin tregua.
La novela, que comenzó con un mensaje de texto y terminó en un escándalo global, sigue demostrando que está lejos de terminar. Cada nuevo capítulo, ya sea un video de TikTok, un posteo críptico en Instagram o un gesto aparentemente inocente, es suficiente para avivar un fuego que parece inextinguible. Por su parte, Zaira no solo encendió el interés de los usuarios, sino que también evidenció la complejidad de una trama donde cada gesto, por más sutil que sea, tiene el potencial de alimentar una polémica que parece no tener fin.