El odontólogo Manuel Posadas Arcentales reconoció ante el Ministerio Público que favoreció con una intervención estética a la fiscal especializada en lavado de activos Elizabeth Peralta, gracias a un acuerdo que mantenía con el conductor de televisión Andrés Hurtado, quien enfrenta 18 meses de prisión preventiva por una trama de tráfico de influencias, sobornos y lavado de activos.
Según un informe difundido este domingo por Perú21, el dentista dijo al fiscal supremo Alcides Chinchay que tenía un contrato de tipo canje, donde Hurtado promocionaba su clínica en su programa a cambio de atención dental gratuita para personas enviadas por la producción del show.
El centro odontológico de Posadas, fundado en 2010 y reconocido por atender a figuras del espectáculo, se benefició con la exposición televisiva. Por su parte, el conductor utilizó el acuerdo para obtener atenciones personales y para sus conocidos, incluidos funcionarios públicos. Entre los beneficiados, según la investigación, estuvo la fiscal Peralta, quien enfrenta una orden de impedimento de salida del país por 18 meses.
De acuerdo con el diario, que cita fuentes oficiales, Posadas admitió que realizó un procedimiento estético de revestimiento dental a Peralta, que comenzó el 12 de julio de 2020. En ese momento, la magistrada ya tenía una amistad de cinco años con Hurtado.
Peralta fue apartada preventivamente de su cargo por la Autoridad Nacional de Control del Ministerio Público, tras ser acusada de cobrar comisiones ilegales para intervenir en un caso de presunto tráfico ilegal de oro. En rigor, la Fiscalía la investiga por presuntamente pedir un millón de dólares para anular la incautación, una operación que involucra a Hurtado y a la familia Siucho.
Posadas confirmó a Perú21 que acudió al Ministerio Público a declarar, aunque no detalló si mencionó a Peralta. El abogado de la fiscal, Benji Espinoza, fue consultado sobre las intervenciones estéticas de su clienta, pero no respondió.
Espinoza presentó un recurso al Poder Judicial para anular pruebas incautadas a Peralta, que incluyen un USB en el que se escucha a su patrocinada admitir haber negociado su ascenso en 2015 con el extinto Consejo Nacional de la Magistratura.
El diario menciona que, durante la investigación, el Ministerio Público descubrió que Peralta utilizaba otra línea telefónica a nombre de su hija, Erika Soto, sin tener autorización judicial para incautar documentos en su primera visita a las oficinas de Peralta en septiembre.
Soto, abogada y socia de un estudio legal, es propietaria de varias propiedades, incluido un departamento en Surco. En diálogo con el rotativo, negó que su madre le hubiera proporcionado dinero para estas adquisiciones.