Björn Borg reflexionó sobre sus aprendizajes personales y lamentó nunca haber ganado el US Open (Captura de video: YouTube)

Björn Borg no solo redefinió el tenis moderno con su estilo imperturbable y temprano éxito, sino que también dejó una huella cultural que aún perdura. A más de cuatro décadas de su retiro, sigue siendo un referente para nuevas generaciones de jugadores y aficionados.

En diálogo con The Times, el extenista sueco reveló aspectos poco conocidos de su vida personal y profesional, desde sus inicios en Södertälje hasta su vínculo con Leo, su hijo menor, que hoy transita el circuito profesional bajo la sombra y la inspiración de su apellido.

Trayectoria y logros de Björn Borg

Borg nació en Södertälje, a 29 kilómetros al sur de Estocolmo, y desde muy joven mostró un talento excepcional para el deporte. Su ascenso fue meteórico: en 1974, con apenas 18 años, se convirtió en el campeón más joven del Roland Garros.

Dos años después, en 1976, repitió la hazaña en Wimbledon, donde también se coronó como el campeón más joven hasta ese momento. Durante su carrera, Borg conquistó un total de 11 títulos de Grand Slam, una cifra que lo situó entre los grandes del tenis mundial.

Su dominio en las canchas se caracterizó por su fortaleza física y mental. Según relató a The Times, su frecuencia cardíaca en reposo era de apenas 32 latidos por minuto, lo que le permitía mantener un rendimiento óptimo incluso en partidos de larga duración. “Estaba en una forma física increíble. Por eso, cuando jugaba partidos, nunca me cansaba, ni siquiera si jugaba seis horas”, destacó.

Björn Borg conquistó en total 11 Grand Slams, 5 veces consecutivas en Wimbledon y 6 en Roland Garros (Captura de video: YouTube)

Sin embargo, la presión y la exposición mediática lo llevaron a tomar una decisión inesperada: retirarse del tenis profesional a los 26 años. Borg explicó que perdió la motivación y sentía que no podía ser él mismo fuera de la cancha.

“Al final, estaba en mi habitación todo el tiempo. Eso no era divertido. Me presioné mucho, no solo por mí, sino también por el tenis”, confesó en la entrevista. Tras su retiro, se dedicó a una empresa de ropa que lleva su nombre y formó una familia en Estocolmo.

Cambios en el tenis y anécdotas de su época

El tenis que conoció Borg en sus inicios era un deporte tradicional, pero su generación transformó el ambiente y la percepción pública. “Cuando llegué al tenis, era un deporte muy tradicional. Pero lo cambiamos: nos convertimos en estrellas del rock“, relató a The Times.

El sueco también compartió detalles sobre sus supersticiones y rutinas durante los torneos. “Era muy supersticioso cuando jugaba. No me afeité durante Wimbledon y llevaba una camiseta específica a rayas. Por la mañana, tenía que despertarme en un lugar específico de la cama. Todos los jugadores tienen tics. Y empeora si empiezas a ganar partidos”, explicó.

El sueco recordó cómo su generación modernizó el tenis y detalló sus rituales en Wimbledon (Captura de video: YouTube)

Su carácter competitivo se forjó desde la infancia. Borg recordó que, a los 11 o 12 años, su mal comportamiento en la cancha le valió una suspensión de seis meses en su club de tenis. “Estaba muy decepcionado, pero al volver no dije nada. Me dije: ‘Eso no va a volver a pasar’. Fue una gran lección”, relató.

Relación con su hijo Leo y reflexiones sobre la paternidad en el deporte

La relación entre Borg y su hijo Leo ofrece una perspectiva singular sobre la paternidad en el deporte de alto rendimiento. Leo, quien en su infancia destacó como futbolista, sorprendió a la familia al decidir dedicarse al tenis.

Leo era un futbolista muy talentoso, pero un día dijo: ‘Quiero jugar al tenis’. Y le preguntamos: ‘¿En serio?’. Porque podría ser una desventaja para él si nos comparan. Pero es cosa suya. Viaja por todo el mundo y juega muy bien”, relató.

Leo Borg ocupa actualmente el puesto 495 del ranking ATP, lejos de su mejor marca alcanzada en septiembre de 2023, cuando llegó al puesto 334 (REUTERS)

El intento por transmitirle su experiencia a Leo dio lugar a una anécdota reveladora. “Cuando era un poco mayor, le dije: ‘Quizás pueda enseñarte algunas cosas’. Me respondió: ‘Papá, no entiendes nada de tenis’”, recordó el extenista.

Opiniones sobre el tenis actual

Borg observa con interés la evolución del tenis y destacó los avances en materia de igualdad de género. “Me encanta ver jugar a las mujeres. Creo que deberían cobrar lo mismo que los hombres. Si nos fijamos en el tenis masculino y femenino actual, están igualados”, opinó durante la entrevista con The Times.

El extenista subrayó que, en la actualidad, las condiciones de seguridad y la gestión de la fama han mejorado, lo que habría facilitado su permanencia en el circuito profesional si hubiera competido en esta época.

Episodios personales, arrepentimientos y su vínculo con McEnroe

Entre los momentos más curiosos de su vida tras el retiro, Borg recordó su intento de subastar los trofeos obtenidos durante su carrera, en 2006. Aclaró que no lo hizo por necesidad económica, sino por el deseo de dejar atrás esa etapa.

“No fue la decisión correcta. John McEnroe me llamó varias veces y me dijo: ‘No puedes vender tus trofeos de Wimbledon’. Finalmente, me costó más dinero comprarlos de vuelta”, comentó. La relación con su histórico rival se ha mantenido cercana a lo largo de los años, al punto de intercambiar bromas y pedidos personales.

Björn Borg y John McEnroe se despidieron en 2024 como capitanes de la Laver Cup tras siete ediciones (REUTERS/Andrew Boyers)

Borg también se refirió a la película Borg vs. McEnroe, que retrata su rivalidad con el estadounidense. Considera que la representación de su carácter fue demasiado seria, aunque disfrutó el resultado final y destacó que su hijo Leo lo interpretó de niño.

Al reflexionar sobre su trayectoria, compartió uno de sus mayores aprendizajes: “El mejor consejo es confiar en uno mismo. Esa fue mi desventaja en la vida: confiaba en mucha gente y no en mí mismo”. A esto sumó un lamento deportivo que todavía conserva: no haber logrado nunca el título del US Open.