Las cadenas de supermercados cuestionaron la medida que impuso el Municipio de Pilar

Los cuestionamientos al nuevo esquema impositivo impulsado por el intendente de Pilar, Federico Achával, crecieron en los últimos días. La modificación de la Tasa de Derecho Ambiental fijó un recargo del 2% sobre el importe neto de IVA en cada compra y generó señales de rechazo en economistas, cámaras del sector comercial y cadenas de supermercados. El tributo impactó en supermercados, hipermercados, centros comerciales, hoteles, industrias, empresas de servicios y universidades privadas.

En una nota de opinión a Infobae, el economista Roberto Cachanosky analizó el cambio y advirtió por sus efectos en los consumidores. Sostuvo que la decisión creó “un costo oculto para las familias” y afirmó que “la lógica del intendente Achával es cobrar pequeños montos a una gran cantidad de personas, lo suficiente para recaudar sin provocar una reacción social”. Estimó que una familia tipo podía enfrentar “$14.000 adicionales” si el recargo se trasladaba al precio final de las compras mensuales. Señaló que el esquema fortalecía “el modelo recaudatorio local” y vinculó la proliferación de tributos municipales con un sistema que, según su visión, “se transformó en un factor de decadencia”.

En su análisis, Cachanosky mencionó que el municipio aplica además tasas por Publicidad y Propaganda, Derecho de Oficina y Plusvalía. Citó a Juan Bautista Alberdi al señalar que “el peor enemigo de la riqueza del país ha sido la riqueza del fisco”, y planteó que el aumento impuesto en Pilar afectó a todos los consumidores, “aunque el sobrecosto no sea visible en el ticket”.

El nuevo régimen tributario se estableció a través de la Ordenanza Fiscal e Impositiva N°112/25. El sistema dejó atrás el esquema de monto fijo y lo reemplazó por una alícuota del 2% aplicable a cada operación realizada dentro del partido desde el 1° de diciembre. Las cadenas recibieron la notificación oficial y comenzaron a adecuar sus sistemas, con un plazo límite fijado para el 15 de diciembre. La fecha generó preocupación en el sector por la disponibilidad técnica y operativa.

Este cartel había sido colocado en los locales de Changomás el año pasado, cuando el Municipio de Pilar creó la Tasa de Protección Ambiental, por un monto fijo

La Asociación de Supermercados Unidos (ASU) envió una carta a la secretaria de Hacienda del municipio, Anahí Moretti, en la que solicitó una audiencia “urgente”. Su director ejecutivo, Juan Vasco Martínez, sostuvo que la aplicación del gravamen provocará “graves perjuicios” a los vecinos de Pilar y advirtió que las empresas enfrentarán “problemas operativos severos por la falta de tiempo, especificaciones técnicas y reglamentación complementaria”. La entidad remarcó que el 2% “encarece cada producto vendido” en el distrito y señaló que la ausencia de un mínimo no imponible “implica que la percepción se aplica sobre cualquier importe”.

Los mayoristas nucleados en la Cámara Argentina de Distribuidores y Autoservicios Mayoristas (Cadam) expresaron “profunda preocupación y rechazo” ante el aumento. La entidad indicó que la medida impactará “de manera inmediata en el precio final que pagan los consumidores” y destacó que el encarecimiento resultará más sensible en diciembre, cuando aumenta la actividad comercial. La cámara sostuvo que el tributo “profundiza la presión impositiva sobre un sector que ya opera con altos costos” y que el traslado de la carga al valor de los productos básicos “termina afectando el bolsillo de millones de familias”.

La Cámara Argentina de Comercio y Servicios (CAC), presidida por Mario Grinman, manifestó su posición crítica hacia los incrementos tributarios en diversas jurisdicciones y catalogó la tasa ambiental de Pilar como “desmesurada”. El comunicado expresó que la “voracidad fiscal” constituye un problema extendido y que la combinación de altos impuestos y actividades informales “vuelve inviables” muchas operaciones productivas. La entidad exhortó a los gobiernos locales a “evitar nuevos incrementos tributarios y revertir los recientemente dispuestos”.

El ministro de Economía, Luis Caputo, volvió a cuestionar duramente la suba de una tasa en Pilar

Las críticas también llegaron desde el Ejecutivo Nacional. El ministro de Economía, Luis Caputo, expresó: “No compren nada en Pilar. No avalen el accionar irresponsable de su intendente. Muy bien la ASU, es lo que hay que hacer: exponerlos. Que todos sepan quién está verdaderamente a favor y quién está en contra de la gente y la industria”, escribió en su cuenta oficial de X.

La crítica reciente se sumó a las objeciones que el funcionario ya había planteado la semana anterior. “Mientras en La Libertad Avanza trabajamos para bajar impuestos y hacer más competitiva nuestra industria, los intendentes kirchneristas los suben como si nada. No van a aprender nunca. No les interesa la gente. Y encima te quieren vender que su modelo es de desarrollo”, expresó Caputo en ese mensaje.