Una consultora que cerró su proyección de inflación de agosto, que se conocerá la semana próxima, sorprendió en el mercado este lunes: estimó que el IPC será más bajo que el 1,9% que registró julio.
Se trata de la suba mensual en el Gran Buenos Aires medida por C&T Asesores Económicos, que fue de 1,6 por ciento. El mes anterior habían estimado un 1,9% -dato que luego coincidió con el índice nacional oficial- por lo que esperan, en definitiva, que el ritmo de precios de agosto haya sido menor al de julio. La expectativa inicial en buena parte de los economistas era que en agosto tuviese lugar el principal efecto de las tensiones cambiarias, ya que la suba del dólar de julio se concentró en los últimos días del mes.
En defintiva, para C&T el ritmo de precios de agosto resultó en un incremento interanual de 32,5%, el más bajo desde julio de 2018. Según la consultora, esta menor inflación se explicó principalmente por la baja en rubros estacionales. “Los componentes ligados al turismo, como hotelería, paquetes y transporte en avión, se redujeron luego del pico habitual de julio debido a las vacaciones de invierno”, explicaron, mientras que la indumentaria se ajustó a la baja por las liquidaciones de temporada. Sin embargo, las verduras registraron un alza cercana al 10%, lo que contribuyó a mantener cierta presión sobre los precios.
La inflación núcleo se mantuvo estable en 1,5% mensual, reflejando la dinámica de los precios subyacentes sin considerar los componentes más volátiles. Entre los rubros que más subieron, se destacaron bienes y servicios varios, con un incremento de 6% mensual impulsado por el aumento en los cigarrillos, y transporte y comunicaciones, donde se combinó la caída de los rubros turísticos con el alza del transporte público y el precio de los autos.
En tanto, el conjunto de alimentos y bebidas se elevó 1,7% mensual, con un impacto relevante de verduras y productos lácteos, mientras que la carne aumentó 1,3%, por debajo del promedio del mes, y los panificados se movieron en niveles similares pero más bajos que en meses anteriores. Los servicios vinculados a vivienda, educación y salud mostraron aumentos moderados, apenas superiores al promedio, mientras que el equipamiento y mantenimiento del hogar reflejó un crecimiento en línea con la media, influido por ajustes en los salarios del servicio doméstico.
No es la única consultora que midió una inflación en agosto más baja que en julio: también lo hizo Analytica (1,8%), y Libertad y Progreso, con 1,7 por ciento. Otras registraron aceleraciones pero leves.
Equilibra, por ejemplo, consignó este lunes que su estimación es de 2 por ciento. “Según nuestras estimaciones del IPC Nacional, en agosto el IPC Nivel General subió 2% y el IPC Núcleo 1,9 por ciento. Los precios Estacionales (2,5%) y Regulados lideraron el alza del mes (2,4%)”, mencionaron.
Otras estimaciones
En tanto, Orlando J. Ferreres arrojó resultados ligeramente distintos. La inflación mensual se ubicó en 2,1%, con un incremento interanual de 32,2%, mientras que la inflación núcleo avanzó 1,8% mensual, acumulando un alza de 30,2% anual.
Según la consultora, la inflación general acumulada hasta agosto alcanzó 19,7%, y la núcleo acumuló 17,8%. “El IPC-OJF mostró un aumento de 2,1% mensual en agosto. En cuanto a los principales rubros, Bienes Varios, Alimentos y bebidas y Equipamiento y funcionamiento del hogar encabezaron las subas del mes, registrando alzas mensuales de 6,5%, 2,9% y 2,6% respectivamente”, señalaron.
El informe destacó que los rubros de Transporte y comunicaciones y Salud también contribuyeron al incremento de precios, con subas de 2,2% y 1,9% mensual. Por su parte, los bienes y servicios estacionales avanzaron 4,5% mensual, mientras que los Regulados aumentaron 2,0%. Estas cifras reflejan que, aunque la inflación mostró una desaceleración respecto a julio, algunos sectores específicos continúan registrando aumentos relevantes, especialmente aquellos vinculados a bienes de consumo estacionales y servicios esenciales.
Según la consultora LCG los alimentos en agosto aumentaron el 3%; sucede a la vez que el Relevamiento de Precios Minoristas (RPM), de la consultora Eco Go arrojó en la última semana una “marcada desaceleración”, por lo que el número del mes para el rubro alimenticio cerraría en 2,5% incorporando las subas de precios en el ítem “alimentos consumidos fuera del hogar”.
En la cuarta semana del mes, los aumentos más notables se dieron en el sector servicios. Por caso, los “servicios telefónicos” aumentaron 2,7 por ciento. Pero en alimentos la dinámica fue más suave. Las carnes se mantuvieron “relativamente estables” y subieron 0,3%; el pollo aumentó 2,3%, los fiambres cayeron 0,8%), y los valores de la carne vacuna y el cerdo no tuvieron.
En frutas y verduras, el aumento osciló entre 1,2% y 1,3%. La mayor suba en frutas se dio en manzanas (2,4%) y en “Otras verduras frescas y congeladas” el alza fue del 1,8 por ciento.
“En promedio, los precios de alimentos acumulan un incremento del 2% mensual. Este dato incorpora el bajo arrastre de julio (0,3%)”, dijeron fuentes consultadas por la agencia NA, según las cuales la inflación minorista) de agosto estaría en torno al 2,1%, aunque -aclararon “todavía no está del todo cerrado, ya que falta la última semana del mes; entendemos que va a terminar en 2%, aproximadamente”.