Parte de los 860 kilos de carne en mal estado secuestrado en la localidad mendocina de Las Heras (El Sol)

La seguridad alimentaria volvió a estar bajo escrutinio en la provincia de Mendoza después de un operativo realizado este lunes en el departamento de Las Heras. La Policía Rural Delegación Centro decomisó 860 kilos de carne y productos no aptos para el consumo humano.

El procedimiento, que abarcó dos comercios dedicados a la venta de alimentos, puso en evidencia deficiencias en los controles sanitarios y la circulación de productos prohibidos en la región.

De acuerdo con lo informado el portal El Sol, el despliegue policial se realizó en colaboración con personal de Bromatología de la Municipalidad de Las Heras y contó con la intervención de la Dirección Provincial de Ganadería.

La investigación se inició tras la toma de una muestra de carne en uno de los comercios, cuyo análisis en laboratorio arrojó un dato alarmante: el producto correspondía a carne equina, comercializada de manera irregular para consumo humano. Esta revelación encendió las alertas sobre el origen y la trazabilidad de los alimentos ofrecidos en el circuito comercial local.

La totalidad de la mercadería incautada fue trasladada a la Planta de Tratamiento de Residuos de El Borbollón, donde se procedió a su desnaturalización, con el objetivo de evitar que los productos ingresen nuevamente al mercado y proteger la salud pública.

En el transcurso del operativo, los agentes decomisaron carnes frescas, hamburguesas, pollos, viandas y otros productos elaborados que no cumplían con los requisitos sanitarios exigidos por la normativa vigente. Según las autoridades, los alimentos presentaban un alto riesgo para la salud de los consumidores, por lo que se procedió al retiro inmediato de la mercadería de ambos locales.

El operativo se llevó a cabo en dos carnicerías de Las Heras

Decomisaron más de 1600 kilos de carne en mal estado en Neuquén

A mediados del mes de noviembre, a partir de un control realizado sobre las rutas en Neuquén, se logró decomisar más de mil kilos de carne que se encontraban en mal estado. Con el fin de terminar con la comercialización informal, también se realizaron operativos en la localidad de Zapala.

La carga total comprendía más de 1.600 kilos de carne en mal estado y sin documentación sanitaria. La intervención, liderada por el Control de Ingreso Provincial de Productos Alimenticios (Cippa), se realizó en colaboración con la Policía y el área de Bromatología, y abarcó tanto operativos en rutas como inspecciones en carnicerías de la ciudad de Zapala.

Durante uno de los procedimientos, las autoridades incautaron un cargamento compuesto por 48 medias reses de cerdo, cuyo peso total alcanzó los 1.430 kilos. Este lote carecía de certificado sanitario, documentación tributaria y sello identificatorio que acreditara su procedencia de un establecimiento habilitado.

Las mediciones de temperatura efectuadas en el lugar arrojaron valores entre 16° C y 20° C, superando ampliamente el rango permitido para el transporte seguro de carne, lo que representa un riesgo sanitario considerable para los consumidores. Según explicaron los especialistas, la ruptura de la cadena de frío favorece la proliferación de bacterias y la posibilidad de contaminaciones cruzadas, comprometiendo la inocuidad del alimento.

En paralelo, el Cippa llevó a cabo fiscalizaciones en carnicerías de la localidad de Zapala, donde se intervinieron aproximadamente 240 kilos de carne en mal estado, sin posibilidad de identificar su origen ni trazabilidad. En todos los casos, el material decomisado fue retirado de circulación y se labraron las actas correspondientes para dar inicio a las actuaciones administrativas y judiciales pertinentes.