Tras haberlo dejado por escrito en diciembre de 2024, cuando decidió prorrogarlo por seis meses más, el Gobierno ha decidido ahora dejar caer el programa de financiamiento Cuota Simple, que reemplazó el Ahora 12 con la llegada al gobierno de Javier Milei. El programa vence el 30 de junio y, según confirmaron fuentes oficiales, no será renovado.
En la última extensión, el Gobierno ya había limitado los alcances del programa. No sólo restringió las cuotas a 3 y 6, sino que también lo acotó a los comercios pyme de todo el país. Lo hizo ya con la idea de que el esquema finalice a mediados de este año, con el argumento de que “ya no es necesario” porque el mercado está ofreciendo buenas condiciones de financiación.
La medida alcanzará a todas las ramas de consumo habilitadas bajo ese régimen y marca el fin del último programa oficial de compras en cuotas con tasas subsidiadas.
Los últimos números disponibles del programa, si bien no fueron malos, mostraron una caída respecto del año pasado. Ya se venía reflejando una pérdida de participación de Cuota Simple respecto del resto de los planes de cuotas vigentes en el mercado y los números de abril, y del acumulado del año, lo confirmaron.
Ya se venía reflejando una pérdida de participación de Cuota Simple respecto del resto de los planes de cuotas vigentes en el mercado
Durante el cuarto mes del año, el programa registró un volumen de $433.755 millones, con 3.104.485 operaciones realizadas. El ticket promedio se ubicó en $139.719. Respecto a marzo, la facturación mostró un incremento nominal del 2,6%, aunque el volumen en términos reales cayó 4,1% al descontar el efecto de la inflación.
El rubro de indumentaria volvió a ocupar el primer lugar entre los sectores más activos: representó el 41,7% del total de la facturación y el 46,2% de las transacciones. En segundo lugar se ubicaron los neumáticos, repuestos y kits de conversión vehicular, con el 9,9%, y luego calzado y marroquinería, con el 7,9 por ciento.
El impacto interanual también reflejó un deterioro: el consumo real medido entre abril de 2024 y abril de 2025 cayó 28,6%, como consecuencia de la reducción en la cobertura del programa y las condiciones macroeconómicas. En los primeros cuatro meses del año, el programa acumuló $1,75 billones en ventas.
Plazos de financiamiento más elegidos
Los plazos preferidos por los usuarios se dividieron casi en partes iguales: el 47,4% de las compras se realizó en tres cuotas y el 52,6% en seis cuotas. El desglose por rubros mostró variaciones. En indumentaria, el 21,4% se financió en tres cuotas y el 20,2% en seis. En el caso de neumáticos, la proporción fue del 4,7% y 5,3%, respectivamente.
El 47,4% de las compras se realizó en tres cuotas y el 52,6% en seis cuotas
Rubros como línea blanca, teléfonos celulares, muebles, anteojos, perfumería y servicios educativos también formaron parte de la lista de sectores con operaciones relevantes, según los datos oficiales.
A nivel regional, la Patagonia registró el ticket promedio más elevado del país con $174.905. En Ciudad Autónoma de Buenos Aires, el valor promedio fue de $132.705, mientras que Cuyo y la región Centro marcaron niveles cercanos a los $130.000. Las cifras más bajas se observaron en el NEA, con $101.498. En todas las provincias, el rubro dominante por facturación fue la indumentaria, por encima de los artículos para el hogar, equipamiento personal y tecnología.
Cambios normativos y tasa
Desde su relanzamiento, en enero de 2024, Cuota Simple atravesó varias modificaciones regulatorias. La Secretaría de Comercio habilitó en distintas etapas la incorporación de nuevos rubros como turismo, materiales para la construcción, servicios de instalación y organización de eventos, y kits de conectividad satelital. Al mismo tiempo, eliminó los topes máximos de financiación para varias categorías, entre ellas motos, anteojos y equipamiento médico.
Uno de los elementos clave fue la evolución de la tasa nominal anual (TNA), que comenzó en 80%, bajó luego a 60%, y siguió descendiendo hasta alcanzar el 44,55% en enero de 2025. A partir de mayo de 2024, se estableció una fórmula que fijaba las tasas del programa como un 125% de la Tasa de Política Monetaria.
Esto arrojó valores de referencia como 6,03% en tres cuotas, 11,45% en seis cuotas, 16,45% en nueve y 21,07% en doce cuotas cuando el plan aún permitía esas extensiones. A fines de 2024, el Gobierno anunció que Cuota Simple continuaría solo hasta junio del año siguiente, con una estructura limitada.
El escenario financiero
Con el fin del programa confirmado para el 30 de junio, las principales entidades financieras ya han comenzado a diseñar sus propias ofertas de financiación para reemplazar el incentivo estatal. Las nuevas propuestas incluyen líneas de tres, seis y hasta doce cuotas, con tasas de interés libres que oscilan entre 50% y 70% nominal anual.
Estas líneas se instrumentan a través de consumos con tarjeta de crédito y se concentran en alianzas comerciales con cadenas de retail, marketplaces y plataformas de e-commerce. En fechas especiales, como el Día del Padre, por ejemplo, la oferta de financiación sumado a descuentos se potencia.
Desde abril, cuando el consumo nuevamente se planchó luego de mostrar indicios de reactivación durante los primeros tres meses del año, volvieron a aparecer las promociones más agresivas, desde descuentos de hasta 30% o más de las marcas hasta financiación de hasta 12 cuotas, o 18 en el caso de los electrodomésticos, sin interés. Es decir, el interés siempre existe, pero muchos comercios hoy optan por absorber ese costo y ofrecer el mismo precio al contado que en pagos para fomentar la demanda.
En otros lados, lo incluyen en el precio y ofrecen los pagos sin interés como estrategia comercial. La realidad actual es que los precios están tendiendo a la baja y se suma una agresiva oferta de cuotas por el contexto macroeconómico y la competencia de los productos que ingresan del exterior.