Una nueva oleada de ataques rusos con misiles y drones sobre la capital ucraniana dejó al menos dos muertos y 12 personas heridas durante la madrugada del jueves, según informaron las autoridades locales. El asalto provocó incendios en varios distritos de Kiev y se produjo un día después del mayor bombardeo registrado en más de tres años de guerra.
“El ataque a la capital continúa. Drones enemigos siguen acercándose a la ciudad”, escribió el alcalde de Kiev, Vitali Klitschko, en un mensaje publicado en Telegram. Periodistas de la agencia AFP en la ciudad informaron sobre fuertes explosiones durante la noche y destellos provocados por los sistemas de defensa aérea.
Klitschko señaló inicialmente que cinco personas resultaron heridas, cuatro de ellas hospitalizadas. Sin embargo, el jefe de la administración militar de Kiev, Tymur Tkachenko, elevó la cifra a 2 muertos y 13 heridos horas más tarde. “Lamentablemente, tenemos dos muertos. Estas personas fueron asesinadas por los rusos. Es una pérdida terrible. Mis condolencias a sus familias y seres queridos”, expresó en Telegram.
La administración militar alertó sobre una “amenaza de uso de armas balísticas enemigas”, mientras que la Fuerza Aérea ucraniana advirtió posteriormente que “un grupo de misiles se aproxima a Kiev desde el este”.
Los restos de drones interceptados causaron incendios en edificios residenciales en los distritos de Solomyansky y Shevchenkivsky, según precisó Klitschko. También se registraron fuegos en garajes y una estación de servicio en el distrito de Darnytsky.
Las autoridades insistieron en que los ciudadanos no compartan imágenes de los ataques. “¡Tu vida y salud son más importantes que filmar el ataque!”, escribió Tkachenko en Telegram. “¡No distribuyas fotos ni videos, el enemigo podría aprovecharlos!”.
El ataque del jueves se produjo tras un bombardeo récord de misiles y drones lanzado por Moscú el día anterior, que causó al menos un civil muerto y ejerció una presión significativa sobre las defensas aéreas ucranianas, ya limitadas por la intensidad del conflicto.
Las autoridades ucranianas advierten que estos ataques forman parte de una tendencia de escalada que afecta a centros urbanos y a infraestructuras críticas. Kiev ha pedido más apoyo internacional, alertando sobre el agotamiento de sus recursos defensivos.
En el plano diplomático, las negociaciones entre Rusia y Ucrania se mantienen estancadas. Este año se realizaron dos rondas de conversaciones directas, que facilitaron intercambios de prisioneros, pero no han generado avances hacia un alto el fuego, como propusieron Ucrania y Estados Unidos.
Este jueves está previsto un encuentro entre el secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, y su homólogo ruso, Serguéi Lavrov, en los márgenes de una reunión de la ASEAN en Malasia. Se espera que aborden tanto el conflicto como otros temas de seguridad regional.
Mientras persiste la amenaza de nuevos ataques, las autoridades de Kiev mantienen activos los protocolos de emergencia y reiteran el llamado a la población para que permanezca atenta a las alertas y utilice los refugios disponibles.
(Con información de AFP)