A comienzos de 2024, Roly Serrano vivió uno de los episodios más críticos de su vida. Fue tras un accidente automovilístico en plena ruta, cuando regresaba de una temporada teatral en Córdoba. La colisión, que podría haber terminado en tragedia, lo obligó a permanecer internado durante nueve meses en el Instituto Médico de Alta Complejidad. Su estado de salud, frágil al inicio, fue evolucionando lentamente. Hoy, con una conciencia distinta y en plena rehabilitación, Roly volvió a aparecer en la televisión para contar su historia.

Lo hizo en Almorzando con Juana (El Trece), donde fue invitado el domingo por Juana Viale a compartir su testimonio. Su tono fue calmo, reflexivo, y cada palabra que dijo retumbó en el estudio. “El accidente que yo tuve fue porque mi cuerpo me lo había advertido. Me dijo: ‘Vos estás cansado’”, comenzó. Fue entonces cuando la conductora, directa, quiso saber más: “¿Vos te dormiste?”. Y Roly respondió con honestidad: “No se sabe bien qué pasó. Venía de la temporada de Córdoba. El cuerpo te dice ‘ya está, ya está’ y uno insiste, cree que puede más. La omnipotencia. ‘Yo puedo, yo lo hago’”, confesó con crudeza.

En ese repaso íntimo y crudo, reveló el detalle más impactante que le ocasionó el accidente en ese momento: la amnesia. “Después, yo me senté un momentito y me olvidé. Me desperté tres meses después”, contó. Así, dejó en claro que no recuerda nada del impacto, ni siquiera cuando llegó la ambulancia. “Nada. No sé”, dijo, con la voz baja.

El actor aseguró que no recuerda nada del impacto (Gustavo Gavotti)

Y mientras reconstruía los primeros momentos posteriores al choque, la escena que narró fue casi surrealista: “Yo me bajé de la camioneta, me fui a fijar qué había pasado con el otro coche, si no había pasado nada. Fui, una parejita se paró, me atendió, y yo me senté ahí, les di mi documento, todo lo que yo tenía de valor, y ellos me lo cuidaron. Llamé a un amigo, Pablo, para que viniera a buscarme”. Y después, el vacío.

No es la primera vez que Roly habla del episodio. Meses atrás estuvo en La Noche de Mirtha (El Trece), donde conmovió a Mirtha Legrand con su relato. “Bajé casi 50 kilos”, dijo entonces. “Me dormí. Venía de la temporada teatral de Córdoba y en la ruta me dormí”.

En ese mismo programa recordó cómo, días antes, había recibido una advertencia que prefirió ignorar. “‘El Pumita’, el Puma Goity, me llamó dos días antes y me dijo: ‘Hermano, ¿vas a venirte?’. ‘Sí, ya terminé la temporada, voy a descansar dos días y me vuelvo’, le dije. ‘No vengas solo’, me pidió. Yo le dije que iba a buscar a alguien. Pero me sentía tan cansado… y no le hice caso”, se lamentó.

Viajé solo y gracias a Dios y a la vida no lastimé a la familia a la que choqué. El choque fue de atrás. Yo me dormí y me llevé por delante el coche que venía. Iba a 100 kilómetros por hora, pero es una camioneta pesada”, explicó. “Dos días antes había descansado, pero estaba muy gordo. Muy fumador. Muy todo. Excesos”, remarcó. Mirtha lo interrumpió con afecto: “Estás aquí. Estás fantástico, Roly. Estás espléndido”. Y el estudio lo aplaudió.

Hoy, el actor se muestra más liviano, pero no solo físicamente. “Camino con un andador”, contó en la mesa de Juana. Y con humor, agregó lo que le dijo su colega y amigo: “Como dijo Daniel Aráoz en lo de Juanita: ‘Rolito no está para el salto del tigre, pero en unos meses… esperemos un poquito’”.

Si bien recibió propuestas para volver al escenario, incluso de Osvaldo Laport, que lo invitó a sumarse a su obra en Carlos Paz, y otras ofertas para Mar del Plata, decidió postergar su regreso. “Con Osvaldo charlamos. Tuvimos una conversación muy adulta. Decidí que no, que primero tenía que curarme bien”, contó.

La pregunta que sobrevolaba toda la conversación fue finalmente dicha por Legrand: “¿Pensaste que te morías?”. Y Roly, sin dudar, respondió: “No, nunca. En ningún momento”. Pero luego hizo una pausa. “Sentí que estaba mal. Viste cuando decís ‘hoy no quiero vivir este momento, quiero estar dentro de cuatro meses o un año. A ver cómo estaré’. Sí, eso sí”.