Pablo Quirno se desempeñaba como secretario de Finanzas en el Ministerio de Economía y también tenía un cargo en la Cancillería

El presidente Javier Milei eligió a Pablo Quirno para reemplazar a Gerardo Werthein al frente del Ministerio de Relaciones Exteriores. El funcionario, uno de los colaboradores más cercanos al ministro de Economía Luis “Toto” Caputo, ya estaba a cargo de la Secretaría de Relaciones Económicas Internacionales y había intervenido en las conversaciones con inversores y organismos internacionales.

La decisión forma parte de una nueva reconfiguración del gabinete que el Gobierno lleva a cabo a días de las elecciones. Un comunicado oficial confirmó hoy la designación. Con esta designación, el mandatario busca consolidar el núcleo económico del Ejecutivo y sostener la articulación entre la política exterior y la estrategia financiera.

Además de la Secretaría de Finanzas, hasta ahora, Quirno dirigía también la Secretaría de Relaciones Económicas Internacionales en la Cancillería. Desde ese rol mantiene contacto con fondos de inversión y representa al país en las mesas de negociación global. Además, se desempeña como secretario de Finanzas, puesto que, según fuentes del Ministerio de Economía, conservará hasta nuevo aviso.

Se trataba de un doble rol. En diciembre de 2024, cuando se oficializó su paso a la Cancillería, el Palacio de Hacienda decidió no reemplazarlo en Finanzas y mantenerlo al frente de ambas funciones. En ese momento, se consideró que su continuidad era clave para garantizar la estabilidad del programa financiero y la relación con los mercados.

Pablo Quirno, primero de la izquierda, junto a Luis Caputo, Javier Milei, Santiago Bausili y Vladimir Werning

Quirno es licenciado en Ciencias Económicas por The Wharton School de la Universidad de Pensilvania, Estados Unidos. En el ámbito privado, desarrolló una extensa carrera en el sector financiero internacional. Fue director para América Latina de J.P. Morgan en Nueva York y formó parte del Comité de Gerenciamiento Regional de la entidad. También actuó como asesor financiero de gobiernos y empresas en Estados Unidos, América Latina, Europa y Asia, con foco en fusiones, adquisiciones, reestructuraciones corporativas y procesos de privatización.

Su experiencia en el sector público comenzó en 2016, cuando se incorporó al Ministerio de Hacienda y Finanzas Públicas durante la gestión de Alfonso Prat-Gay. El 29 de febrero de ese año fue designado coordinador general de la Secretaría de Finanzas. En 2017 se sumó al equipo de Caputo como jefe de Gabinete del Ministerio de Finanzas, donde participó en las negociaciones con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y en la implementación del régimen de Participación Público-Privada (PPP).

En julio de 2018, Caputo lo convocó para integrar el Directorio del Banco Central, donde trabajó durante tres meses, hasta el cierre de la gestión de su entonces superior en la entidad. Ambos mantuvieron una relación profesional estrecha que continuó en el ámbito privado y se consolidó en los equipos de política económica del actual Gobierno.

Antes de asumir en el actual gabinete, Quirno formó parte de la consultora Anker, el grupo económico que delineó la estrategia macroeconómica que Milei adoptó durante la transición presidencial. Anker fue clave en la definición de una hoja de ruta que dejó atrás la idea de una dolarización inmediata. En esa etapa, Santiago Caputo, sobrino del ministro de Economía, ofició de enlace entre el equipo técnico y el presidente electo.

Durante los primeros meses de gestión de Luis Caputo, Quirno ocupó la Secretaría de Finanzas y supervisó la política de deuda pública en pesos, la coordinación con los organismos multilaterales de crédito y la promoción del Régimen de Incentivos para Grandes Inversiones (RIGI). También participó en las conversaciones con empresas extranjeras interesadas en proyectos de infraestructura y energía.

En diciembre de 2024, la salida de Florencia Misrahi de la Agencia Nacional de Recaudación y Control Aduanero (ARCA) derivó en una serie de movimientos dentro del equipo económico. Juan Pazo, que había sido designado secretario de Relaciones Económicas Internacionales en la Cancillería, pasó a dirigir la AFIP, y su puesto fue ocupado por Quirno.

Diana Mondino, ex canciller, trabajó junto a Quirno

Ese nombramiento coincidió con una etapa de fuerte actividad en Finanzas, marcada por una licitación de deuda por 6 billones de pesos y por la continuidad de las negociaciones con el FMI. Fuentes oficiales destacaron entonces que el funcionario combinaba conocimiento técnico y vínculos internacionales que resultaban estratégicos para el Gobierno.

La figura de Quirno se consolidó en el círculo de confianza de Milei y Caputo. En el Banco Central, en la consultora Anker y en el actual Ministerio de Economía, mantuvo una posición clave en la formulación de políticas financieras y en la comunicación con los mercados.

Desde su llegada al Gobierno, Quirno también sostuvo un perfil activo en la defensa pública del programa económico. En las redes sociales destacó la reducción del impuesto inflacionario y del costo de capital como factores decisivos para la recuperación del valor de los activos argentinos.

En el plano diplomático, su designación en la Cancillería lo coloca al frente de las negociaciones comerciales con los principales socios de la Argentina. Una de sus experiencias recientes fue la participación en la Cumbre del G20 en Brasil, donde acompañó a Javier Milei en la reunión bilateral con el presidente chino Xi Jinping. Las relaciones económicas y comerciales con China representan uno de los desafíos más relevantes de su nueva función, dado el déficit acumulado en el intercambio bilateral, que ronda los USD 90.000 millones desde 2008 y alcanzó cerca de USD 4.000 millones en los primeros diez meses de 2025.

En su nueva posición, Quirno tendrá a su cargo las relaciones económicas internacionales del país, un ámbito que abarca la vinculación con organismos multilaterales, las negociaciones de acceso a mercados y la coordinación de políticas comerciales. Su perfil técnico y su relación directa con Caputo le otorgan influencia sobre los aspectos financieros de la política exterior.