Wanda Nara en la entrada de la UFI Benavidez (Adrián Escandar)

Wanda Nara se presentó hoy lunes ante la Justicia para declarar en la causa que investiga a Nicolás Payarola, su ex abogado, acusado de al menos trece hechos de estafa. Entre las víctimas se encuentran Juan Marcelo Montiel, padre del campeón del mundo Gonzalo Montiel, y Macarena Posse, hija del ex intendente Gustavo Posse, concejal de San Isidro y ex abogada de Nara. El daño se calcula en, al menos, tres millones de dólares.

La conductora e influencer fue citada por el fiscal Cosme Iribarren, titular de la UFI Benavidez, que, dos semanas atrás, ordenó el arresto de Payarola y los allanamientos a su casa y sus estudios en Nordelta. Allí, la Policía Bonaerense encontró varios documentos vinculados a la conductora e influencer; la Bonaerense tuvo una orden expresa de hallarlos.

En su declaración, Nara complicó a Payarola, aseguran fuentes del caso.

La denuncia del caso que complicó a Nara es la de Macarena Posse, que conoció a la conductora a través de Payarola, para representarla en cuatro expedientes en torno a su divorcio con Mauro Icardi. En diversas conversaciones aportadas a la causa, según Posse, acordaron una cláusula de un pago de 600 mil dólares si Nara rescindía el patrocinio de Posse antes del año.

“La razón de esa cláusula era sencillamente la exposición, tiempo, dedicación, cantidad de expedientes, seguimiento casi 24/7 de la clienta en cualquier horario”, aseguró Posse en su denuncia, a la que accedió Infobae. Según la abogada, su colega y la conductora evitaron hábilmente firmar el convenio de trabajo que incluía este artículo. En abril último, Nara dejó de responder.

Wanda, “reconoció que ella tenía vínculo con las letradas y que constantemente hablaba en particular con una de ellas, que no firmó la revocatoria, no recordó haber firmado la revocatoria. La salida de ellas de los expediente era todo un enojo de Payarola porque no estaba de acuerdo con la manera en que llevaban las cosas. Todo pasaba por él, que firmaba muchas cosas, no recordó haber firmado el convenio pero tampoco lo negó y básicamente todo se centraba en las decisiones de él. Nunca le habló del convenio. Está en los chats y la documentación, que había un convenio», asegura una fuente clave

Por lo pronto, Iribarren considera a Nara una testigo, lo que compulsa a la conductora a decir la verdad. El fiscal, también, buscó determinar una versión que trascendió en medios la semana pasada que indicó que Payarola le adeudaría a su ex clienta cerca de 300 mil dólares.

Cosme Iribarren, fiscal del caso (Adrián Escandar)

Payarola -que empleó a L-Gante, la ex pareja de Nara, para promocionarse en sus redes- continúa detenido en una celda policial de la zona de Pacheco, luego de que, meses atrás, la Justicia sanisidrense le otorgara una caución real de $40 millones. Sofía Ferrarazo, su pareja, también imputada en la causa por tres hechos, lo visitó por primera vez días atrás. Negó todas las acusaciones al ser indagada. En su declaración, Payarola mismo había pedido que la Justicia citara a Nara.

Dos nuevas víctimas se presentaron ante el fiscal en la jornada del miércoles pasado. El primero fue un joven representante de influencers, de 18 años. “A esta víctima, según la denuncia, Payarola e hizo hacer una empresa, le prometió que iba a trabajar para Wanda y L-Gante, y nada”, asegura un investigador. El manager habría perdido 20 mil dólares en el estudio de Payarola.

La segunda víctima es dueña de una clínica de estética. “Denunció que el abogado le prometió una inversión en un fideicomiso y le sacó 200 mil dólares”, continúa la fuente.