Lo que inicialmente se pensó como un nuevo ataque hacia miembros de la fuerza pública, rápidamente se desmintió, luego de confirmarse que se trató de un atentado sicarial contra dos jóvenes que se movilizaban en una motocicleta.
El ataque armado se registró en la tarde del 1 de mayo en la Troncal del Caribe, una vía que conecta Santa Marta con Ciénaga, en Magdalena.
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De acuerdo con la prensa local, las víctimas, identificadas como Harold y Andrés Felipe Ochoa, eran primos y se desplazaban en motocicleta cuando fueron interceptados por sicarios cerca de las instalaciones de la empresa Drummond.
De acuerdo con los familiares de las víctimas, los jóvenes habían viajado la mañana desde sus lugares de origen, en el corregimiento de Buenos Aires (jurisdicción de Aracataca) y el municipio de Fundación, hacia el sector de Gaira.
El propósito del viaje era tramitar un documento de paz y salvo con el equipo de fútbol Unión Magdalena, ya que Andrés Felipe, que había formado parte de las divisiones menores del club, necesitaba el documento para concretar su vinculación con otro equipo de la región Caribe. Al no lograr obtener el trámite, decidieron regresar a sus hogares.
El ataque ocurrió mientras los primos se movilizaban en motocicleta en dirección a Ciénaga. En el trayecto, los agresores, que también se desplazaban en una motocicleta marca Auteco de la línea Boxer, color negra, los interceptaron y les dispararon en repetidas ocasiones.
Harold murió en el lugar del ataque, mientras que Andrés Felipe intentó escapar, pero fue alcanzado por los sicarios, que le dispararon y lo dejaron tendido en la vía.
Fue gracias a la rápida reacción de tropas del Batallón de Alta Montaña N.6, acantonadas en una base militar cercana, que se dio inicio a una persecución tras ser alertadas por militares apostados en un puesto de control próximo a las instalaciones de Drummond.
La persecución culminó en el barrio La Paz, cuando los sospechosos intentaron huir en contravía hacia Santa Marta.
En ese contexto, las autoridades desmintieron rumores iniciales que sugerían que el ataque estaba dirigido contra la estación militar de Papare. Aclararon que el hecho violento no tuvo como objetivo ninguna instalación militar.
Entre tanto, los cadáveres de los jóvenes permanecieron por varias horas en el lugar de los hechos, mientras las autoridades correspondientes llegaban a realizar las diligencias urgentes.
Actualmente, se adelantan investigaciones para esclarecer los móviles del doble homicidio y determinar las responsabilidades correspondientes.
Otra versión de los hechos indica que los cuerpos sobre la vía pertenecerían a los sicarios; sin embargo, esta información no fue confirmada oficialmente.
Altercado entre dos hombres terminó en tragedia en Puerto Colombia
Un hombre de 39 años fue asesinado tras recibir un disparo en la cabeza mientras conversaba con su agresor en una calle del municipio de Puerto Colombia (Atlántico).
Según informó la Policía Metropolitana de Barranquilla, el hecho ocurrió en la tarde del jueves 1 de mayo, alrededor de la 1:50 p. m., en la intersección de la calle 6A con carrera 11, en el barrio El Corzo, sector del Arroyo de Alameda.
La víctima, identificada como Jhonatan Barros Hernández, se encontraba sobre una motocicleta marca TVS de color negro y azul, con placas QIS-14F, cuando un hombre se le acercó y entabló una conversación.
En medio del diálogo, el agresor sacó un arma de fuego y le disparó directamente en la cabeza. Tras el ataque, el perpetrador huyó del lugar a bordo de una motocicleta de alto cilindraje, tomando rumbo desconocido.
Barros Hernández quedó gravemente herido en el lugar del ataque y, pese a los esfuerzos de quienes se encontraban cerca, falleció pocos minutos después debido a la gravedad de la lesión. Las autoridades iniciaron una investigación para identificar y capturar al responsable del homicidio.