El escenario del 44° Congreso
Internacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses

Del 14 al 16 de mayo de 2025, Mar del Plata congregó el 44° Congreso Internacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses, organizado por la Asociación de Médicos Forenses de la República Argentina (AMFRA) y respaldado por la Universidad FASTA. El encuentro contó con 62 ponentes nacionales e internacionales y ofreció más de 50 mesas redondas, paneles y conferencias simultáneas en tres salas.

Héctor Brunner, presidente de AMFRA, abrió la jornada inaugural y afirmó: “Este Congreso representa la consolidación de un espacio que no solo promueve el perfeccionamiento profesional, sino también un compromiso con la justicia, la verdad científica y la dignidad humana”. Brunner destacó que la convocatoria superó los 400 asistentes, cifra que, dijo, “refleja el interés por abordar problemáticas reales de la disciplina”.

La programación combinó sesiones técnicas con debates sobre dilemas morales y derechos individuales. En la sección dedicada a tanatorradiología, Matilde Buzzi, jefa de Radiología del Equipo Forense de la Corte Suprema, explicó: “Las imágenes permiten conservar integridad del cadáver y agilizar el proceso judicial sin comprometer principios religiosos”. Buzzi ejemplificó casos en que esta tecnología redujo tiempos periciales de siete a dos días.

En el panel sobre accidentología laboral, Ricardo Nachman, director del Centro Nacional de Medicina Forense en Israel, presentó estadísticas sobre siniestros en obra y dijo: “El análisis de trayectorias balísticas aplicadas a entornos industriales aporta datos precisos para determinar responsabilidad”. Nachman vinculó esos resultados con el uso de armas de baja letalidad en contextos policiales y concluyó: “Se requiere capacitación continua para evitar fallos en cadena de custodia”.

Uno de los ejes centrales giró en torno a la eutanasia. El rabino Fishel Szlajen inauguró el congreso con una conferencia sobre objeción de conciencia y secreto profesional. “Propongo un criterio que salvaguarda la voluntad del paciente y evita tanto el suicidio asistido como el homicidio médico”, dijo Szlajen. Según el orador, esa propuesta garantiza “una muerte digna sin abdicar del cuidado profesional ni del respeto legal”.

Participaron más de 60 ponentes nacionales e internacionales

Durante la mesa sobre virtopsias, Szlajen coincidió con Buzzi y Nachman para exponer aplicaciones prácticas de autopsias virtuales. El rabino Szlajen señaló que esa técnica “responde a reivindicaciones religiosas que provocan rechazo a las necropsias convencionales”. Por su parte, Nachman apuntó: “La tecnologia 3D reduce riesgos de contaminación y mantiene validez legal”.

La discusión sobre metaperitajes reunió a juristas y peritos. Laura Gómez, del Colegio de Abogados de Córdoba, defendió la revisión independiente de dictámenes y sostuvo: “Garantizar transparencia implica permitir segundas opiniones sin generar tribulación procesal”. Gómez ilustró su ponencia con fallos recientes donde se revocaron peritajes por errores de metodología.

El tópico de inimputabilidad penal atrajo a especialistas en psiquiatría forense. Carlos Damín revisó casos de trastornos mentales severos y señaló: “El criterio actual exige pericia interdisciplinaria para diferenciar entre enfermedad y simulación”. Damín añadió que ese enfoque derivó en ajustes en protocolos de evaluación que “mejoran la adecuada aplicación de sanciones”.

Un panel sobre toxicología forense incluyó aportes de Guido Berro Rovira, de Uruguay, quien describió avances en detección de sustancias emergentes. “La cromatografía de última generación acelera la identificación de compuestos en muestras biológicas”, explicó Berro Rovira. Además, advirtió sobre “el incremento de sustancias sintéticas para eludir controles”.

Maikel Vargas Sanabria, de Costa Rica, abordó maltrato infantil y síndromes de niño agredido. Vargas Sanabria presentó criterios de diagnóstico y aseguró: “La integración entre pediatría y forense es clave para intervenciones tempranas”. El expositor propuso guías de actuación conjunta con servicios sociales para proteger menores.

La ética en secretismo profesional centró una mesa en la que María Ruiz, fiscal de Santiago del Estero, subrayó: “El deber de confidencialidad no puede entorpecer investigaciones de delitos de lesa gravedad”. Ruiz recordó casos donde la omisión de datos periciales “retrasó procesos judiciales por meses”.

El cierre académico incluyó la palabra del vicerrector de FASTA, Silvano Penna, quien sostuvo: “El trabajo no es una tarea fría ni meramente técnica; es, en esencia, una responsabilidad con los vivos a través del respeto por los muertos”. Penna resaltó la coordinación entre juristas, técnicos y bioeticistas como “factor decisivo para abordar desafíos legislativos y sociales”.

La coordinación del evento estuvo a cargo de Gerardo Chiodetti, del juez de Cámara Esteban Viñas y de Norberto Rubinstein. Los organizadores gestionaron la logística, convocaron a ponentes de Europa, América y Asia y garantizaron el desarrollo puntal de todas las actividades.