La suba de tasas en Brasil impulsa al alza del real.

El Banco Central de Brasil subió la tasa de interés 25 puntos básicos esta semana, una decisión que supuso la séptima alza consecutiva, la que además contrarió las proyecciones de que las mantendría estables.

Con expectativas de inflación sin anclar y una economía resistente, el Comité de Política Monetaria (Copom) decidió por unanimidad elevar la tasa Selic de referencia al 15%, la más alta desde julio de 2006.

La autoridad monetaria brasileña tomó la decisión en el marco de una inflación anual que disminuyó a 5,32% en mayo de 2025 -desde el 5,53% en abril-, una tasa mínima de tres meses, pero aún por encima del objetivo oficial máximo de 4,5% anual. Por lo tanto, la tasa de interés real en Brasil se arrima al 10%, una cifra muy alta que, como consecuencia, impulsa a una apreciación del real brasileño.

Para frenar la inflación, el Banco Central llevó la tasa de referencia a 15%, con una suba de 4,25 puntos desde fines de septiembre

Al ritmo de esta suba de tasas, el real se aprecia en 2025 un 12,5% respecto del dólar de EEUU, frente a una inflación acumulada en el primer semestre de solo 2,7 por ciento. En lo que va del año, el dólar en Brasil cayó de 6,18 reales a a 5,49 reales por unidad.

Esta dinámica puede ayudar a la competitividad cambiaria de la Argentina e incentivar la demanda desde Brasil para los productos argentinos. Hay que recordar que el saldo comercial entre ambos países entre enero y mayo fue negativo en USD 2.451 millones para Argentina, distinto a lo sucedido en ese período de 2024 cuando había resultado superavitario en USD 142 millones.

En la Argentina, el dólar anota una suba de 130 pesos o un 12,6%, a $1.162, una tasa apenas debajo de la inflación de 13,3% acumulado en los primeros cinco meses del año.

Brasil atraviesa un escenario de inflación estable en el rango de 5%- 5,5% interanual, por encima de la meta oficial de 4,5%

En este marco, “el real brasileño se apreció 4% en la primera parte larga de junio, y perforó los 5,5 reales por dólar por primera vez desde septiembre del año pasado, cuando los temores respecto de la cuestión fiscal y una política más expansiva por parte del gobierno de Lula habían dejado a esta moneda en 6,2 reales por dólar a fin del año pasado (-11,5% desde entonces)”, puntualizó un informe de la gerencia de Estudios Económicos del Banco Provincia.

El estudio precisó que “la apreciación cambiaria de Brasil le da algo de oxígeno a la competitividad cambiaria de la Argentina. Luego de que la relación nominal -es decir, sin contar la inflación que es mayor en nuestro país que en la principal economía del Mercosur- entre el peso y el Real cerrara el año pasado un 20% por debajo del promedio de 2024, lo que implicaba un fuerte encarecimiento relativo de nuestra producción, en la actualidad se acercó a los niveles de mediados del año pasado (-3,5% por debajo) dejando al escenario bilateral un poco más sostenible”.

Fuente: Banco Provincia.

En el plano doméstico, el economista Felipe Núñez, director del BICE (Banco de Inversión y Comercio Exterior) comentó en la red social “X” que “el dólar flota entre bandas, puede subir o bajar pero el equipo económico no va a devaluar y no ha accionado nunca por intereses electorales. Con una macro sana, es decir, superávit fiscal, cantidad de dinero fija y BCRA recapitalizado es lógico pensar que el Tipo de Cambio Real se aprecie”.

En este aspecto, el Índice de Tipo de Cambio Real entre Argentina y Brasil medido por el BCRA mejoró en 10 puntos en lo que va de 2025, desde los 72 puntos a los 82 puntos, sobre una base de equilibrio teórico de 100 unidades. Se trata del nivel más alto desde agosto del año pasado.

El ajuste al alza de las tasas en Brasil, una medida que puede desacelerar el crecimiento económico, se produce en un contexto relativamente positivo para la actividad en el país vecino y principal socio comercial de la Argentina. La actividad económica de Brasil creció más de lo esperado en abril, lo que refuerza las señales de resistencia a pesar de los elevados costos de endeudamiento tras la decisión clave sobre las tasas de interés que el Banco Central tomó esta semana.

La tasa Selic refuerza su sesgo contractivo y contribuye también a la apreciación del real brasileño

El índice IBC-Br, indicador adelantado del Producto Interno Bruto (PIB) del país, subió un 0,2% desestacionalizado en abril respecto al mes anterior. Esta lectura superó el crecimiento del 0,1% previsto en una encuesta de Reuters entre economistas. El sector servicios, que impulsa la mayor economía de América Latina, contribuyó de forma decisiva, con un aumento del 0,4% en su lectura IBC-Br.

El componente de ingresos fiscales avanzó un 0,6% intermensual. Sin embargo, los indicadores agrícola e industrial registraron descensos del 0,9% y el 1,1%, respectivamente. En términos interanuales, el índice IBC-Br creció un 4,0%, lo que subraya el impulso de la economía.