La relajación reduce la actividad consciente y permite que las ideas emerjan desde el subconsciente, favoreciendo la innovación. (Imagen Ilustrativa Infobae)

Los relatos de Leonard Cohen, Bob Dylan, Wolfgang Amadeus Mozart e Isaac Newton muestran que la creatividad suele manifestarse en momentos de relajación o desconexión. En una reunión en París durante los años ochenta, Cohen y Dylan hablaron sobre la naturaleza impredecible del proceso creativo. Cohen confesó que necesitó cinco años para escribir “Hallelujah”, aunque inicialmente restó importancia al tiempo dedicado. Cuando elogió una canción reciente de Dylan y le preguntó cuánto tiempo había tardado en componerla, Dylan respondió: “15 minutos”. Esta diferencia subraya que la creatividad puede surgir después de años de esfuerzo o como un chispazo instantáneo de inspiración.

La revista Psychology Today sostiene que la creatividad espontánea suele asociarse a estados de relajación como la meditación o el momento previo al sueño. En estos estados, las ideas emergen involuntariamente, pues la mente consciente pierde protagonismo y los límites del ego se diluyen, permitiendo el acceso a niveles más profundos del pensamiento.

La meditación y los estados previos al sueño facilitan la aparición de ideas creativas, según Psychology Today. (Freepik)

El contraste vivido por Cohen y Dylan se repite en otros artistas. Mozart relató que escuchaba sus composiciones completas en la mente y solo debía transcribirlas. Declaró: “Las ideas musicales fluyen mejor y más abundantemente cuando estoy solo viajando en carruaje o caminando después de una buena comida, o durante la noche cuando no puedo dormir. De dónde y cómo vienen, no lo sé, ni puedo obligarlas”. De manera similar, Piotr Ilich Tchaikovsky describió que la inspiración puede surgir de manera “repentina e inesperada”, y que las ideas crecen “con extraordinaria fuerza y rapidez, brotan a través de la tierra, dan ramas y hojas, y finalmente florecen”.

Fuera del ámbito artístico, la ciencia también ofrece ejemplos de creatividad en estados de relajación. Isaac Newton explicó que la idea de la gravitación nació mientras observaba caer una manzana, absorto en una actitud contemplativa. James Watt solucionó el problema de la pérdida de calor en las máquinas de vapor durante un paseo por un parque, afirmando: “No había caminado más allá de la casa de golf cuando todo estaba arreglado en mi mente”. Estos episodios, recogidos por Psychology Today, demuestran que la creatividad a menudo se manifiesta cuando existe aparente distanciamiento de la tarea principal.

Una caminata en la naturaleza sin el celular ni auriculares puede favorecer la creatividad. (Freepik)

La tradición de atribuir la inspiración a fuerzas externas viene de la antigüedad. En la Grecia clásica, las musas eran consideradas diosas que habitaban en el Monte Olimpo; los artistas las invocaban con la esperanza de recibir inspiración. Había nueve musas, cada una vinculada a diferentes campos, desde la música hasta la poesía y la historia. En la actualidad, el concepto de musa ha adquirido un sentido más introspectivo, situando la fuente de la creatividad dentro del propio individuo.

Generalmente, se asocia la facilidad y espontaneidad al genio creativo. Aunque obras como “Hallelujah” requirieron años de trabajo, es probable que el núcleo de la pieza —la melodía, los acordes, una frase inicial— haya surgido de manera súbita antes de desarrollar y perfeccionar el conjunto. Paul Simon ha dedicado años a sus canciones, aunque reconoce que las ideas esenciales suelen aparecer de forma repentina.

La relación entre relajación y creatividad se fortalece durante los estados hipnagógicos, ese límite entre la vigilia y el sueño. Psychology Today destaca que en esos momentos han surgido numerosos inventos y descubrimientos. René Descartes concibió la geometría coordinada mientras se encontraba semi dormido, observando una mosca en su habitación. Niels Bohr soñó con la estructura del átomo al visualizar los electrones orbitando el núcleo como planetas alrededor del sol, lo que posteriormente le permitió desarrollar su modelo atómico.

La publicación señala que la relajación disminuye la actividad de la mente consciente y los pensamientos asociativos, permitiendo que las ideas surjan desde el subconsciente o incluso desde un inconsciente colectivo. La mente se vuelve más receptiva y permeable a la inspiración, como si la relajación abriera puertas a nuevas conexiones y asociaciones.

Esta observación implica que una estrategia efectiva para fomentar la creatividad consiste en buscar la relajación y la espera paciente, en lugar de forzar el proceso. Forzar la generación de ideas suele resultar infructuoso, mientras que el cultivo de un estado relajado puede favorecer su aparición. La meditación se presenta como una herramienta eficaz para alcanzar ese estado. En 1968, Los Beatles viajaron a India para un retiro de meditación y regresaron con cerca de treinta canciones nuevas en pocas semanas, muchas de ellas incluidas en el White Album.

La creatividad espontánea puede parecer accidental, pero la relajación y la meditación incrementan la probabilidad de que surjan estos destellos creativos, según el análisis presentado por Psychology Today.