LA PLATA.- El gobernador Axel Kicillof está cerca de tener número suficiente para suspender las Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) en la provincia de Buenos Aires. Pero va a esperar para avanzar. Quiere que lo resuelva la Legislatura, con el acompañamiento de la oposición, para evitar un desafío directo de su parte a sus socios de La Cámpora.

En la provincia, las elecciones primarias aún están vigentes. Para eliminarlas debe modificarse la ley 14.086. El quórum para cambiar la norma en la Legislatura ya está asegurado, a pesar de las diferencias internas en los socios de Unión por la Patria. Se alcanza con los votos de la oposición.

Al gobernador, que apuesta a suspender las PASO y celebrar las elecciones provinciales antes que las nacionales, se le abren dos disyuntivas. Por un lado, Kicillof puede hacerle un guiño a la Legislatura para avanzar con los votos opositores y sin acuerdo en el kirchnerismo. El riesgo de esa jugada es romper con La Cámpora. La otra posibilidad es mantener las primarias y acordar con sus socios de Unión por la Patria, que en su mayoría responden a Cristina Kirchner, a riesgo de desgastar su capital político en una primaria.

El papel de la Legislatura

Los bloques de PRO, La Libertad Avanza, Unión, Renovación y Fe ya se expresaron a favor de la suspensión de las PASO. El PRO, que preside Cristian Ritondo, pidió la suspensión de las primarias en la provincia de Buenos Aires y fue apoyado por una convención provincial del partido que se manifestó el lunes a favor. El espacio cuenta con 13 diputados provinciales. La Libertad Avanza aporta otros 13 legisladores para suspender las primarias. Mientras que Unión, Renovación y Fe tiene 9. Más unos 10 legisladores del Frente Renovador. Son 45 votos sobre 92 de la Cámara de Diputados.

Cristian Ritondo en la sesión especial en diputados

Los bloques provinciales de la Coalición Cívica (con tres legisladores) y de la Izquierda (dos) aún no se pronunciaron, pero podrían gravitar a favor de Kicillof en este esquema para desempatar a favor de la suspensión de las PASO, al menos en la Cámara de Diputados.

De modo que el gobernador ya tiene allí quórum y mayoría para avanzar para que la provincia suspenda por ley las primarias en este territorio.

Pero la cuenta no es lineal para Kicillof: el bloque de Unión por la Patria, que es primera minoría tanto en la Cámara de Diputados como el Senado Bonaerense, hay posturas contrapuestas.

El Frente Renovador – se dijo- apoya con un proyecto de Rubén Eslaiman la suspensión, pero esta facción tiene menos de un tercio de los 37 diputados y menos poder aún en el Senado provincial.

De modo que Kicillof ya no enfrenta un escollo legal, sino uno político para avanzar en el plan de suspender las PASO bonaerense: enfrentar o no a La Cámpora, que se opone a eliminar las elecciones primarias es la última decisión.

El gobierno aspiraba a tener el apoyo radical también para la eliminación de las PASO, pero los seguidores de Maximiliano Abad, que votó en contra en el Senado de la Nación, están encaminados a tomar la misma posición.

En el Senado la controversia es más ajustada: sin apoyo radical Kicillof cuenta con 17 votos opositores del PRO y la Libertad Avanza y La Libertad Avanza I, pero hay menos aliados entre los 21 senadores de Unión por la Patria. Allí es más fuerte el peso de Cristina Kirchner en el bloque que preside Teresa García.

Cristina Kirchner y la legisladora Teresa García

El gobernador apuesta a suspender las PASO en provincia de Buenos Aires y luego fijar comicios desdoblados y anticipados a Nación. Ese es el mejor escenario al que aspira para afianzar su proyecto: “El futuro es con Axel”.

Pero sólo desdoblará las elecciones en la provincia de Buenos Aires si antes se suspenden las PASO.

El Gobernador prefiere adelantar las elecciones provinciales a las nacionales, según admitieron funcionarios con acceso al despacho de Kicillof.

¿Por qué? Porque en caso que la Libertad Avanza se imponga en otras provincias antes de noviembre el efecto arrastre de la boleta violeta podría determinar una simpatía de sectores indecisos o de centro, según se analiza en la Casa de Gobierno. Las encuestas preanuncian una elección en el interior del país similar a 2023, donde el mapa nacional se tiñó de libertario.

Votar en provincia tras una ola violeta nacional podría fortalecer a sus adversarios, evalúa el equipo de asesores políticos del gobernador.

Kicillof tiene la lapicera para fijar por decreto la fecha de elecciones de la provincia de Buenos Aires, de acuerdo al poder que emana de la Constitución bonaerense.

Pero antes necesita que la Legislatura elimine las PASO.

La legislación

La ley 14.086, estableció en su artículo primero las PASO en provincia. En su artículo dos – la ley conocida como ley Balestrini- fijó que el Poder Ejecutivo convocará primarias en un plazo no menor de 120 días y no mayor de 150 días de los comicios generales.

Kicillof necesita suspender las PASO en provincia antes de desdoblar, o quedaría una vez más sujetos a los vaivenes de la elección nacional. Para que la agenda de la provincia de Buenos Aires tenga peso propio, es imprescindible suspender por este año las PASO, según los análisis que se hacen en la Casa de Gobierno.

Dentro de los bloques de Unión por la Patria, el massismo cuenta con diez diputados (Guerrera -presidente de la Cámara baja-, Rubén Eslaiman, Luciana Padulo, Juan Malpeli, Ricardo Lissalde, Fernanda Bevilacqua, Ayelén Rasquetti, Nicolás Russo, Germán Di Césare y Carlos Puglelli) y una senadora bonaerense —Sofía Vanelli—.

Pero dentro del bloque se topará con la oposición del sector mayoritario de los aliados a Máximo Kirchner, que dirigen el bloque a cargo de Facundo Tignanelli, hombre de La Cámpora con peso propio en La Matanza, donde compite con el intendente Fernando Espinoza, aliado de Kicillof, a quien le conviene la suspensión de las PASO.

El gobernador necesita que los legisladores de Massa voten la suspensión de las PASO. El Frente Renovador se guarda una carta: intentará definir el día de la elección desdoblada el mismo día en que apruebe la suspensión de las PASO. Es decir: no dará un cheque en blanco a Kicillof.

Atento a estos movimientos Kicillof suspendió por el momento el acto político de Mar del Plata, donde tenía pensado retomar la iniciativa política. “Vamos a hacer el acto, pero más adelante”, dijo una asesora de máxima confianza del gobernador.

Ahora la apuesta está en la Legislatura: allí el 5 de marzo inaugurará las sesiones extraordinarias. Luego quedará abierto el debate sobre la suspensión de las PASO en este territorio.