Una nueva reunión cumbre se llevó adelante en la gobernación bonaerense entre Axel Kicillof, Sergio Massa y Máximo Kirchner para avanzar en un acuerdo electoral. Al igual que ayer, el encuentro se lleva a cabo en un estricto hermetismo y entre ellos tres.
A poco más de 24 horas de que se venza el plazo para presentar las alianzas, los tres dirigentes trabajaron en conjunto para arribar a un acuerdo de unidad, con el objetivo central de inscribir un solo frente electoral y empezar a trabajar en listas conjuntas en las ocho secciones electorales.
Durante las últimas horas hubo avances respecto a los partidos que conformarán el frente electoral, los apoderados y el formato para definir las candidaturas en los municipios que gobierna el peronismo y en los que gestiona la oposición.
“El diálogo avanza, pero no hay nada cerrado“, indicaron en La Plata tras la reunión, que concluyó cerca de las 22. Y agregaron: “Hay un buen pronóstico, pero aún nada definido“. Todo está en suspenso.
Los principales dirigentes del peronismo bonaerense intentan afinar y puntear las reglas del juego para poder cerrar el acuerdo. Se hace en un contexto de tensión y desconfianza. Tal es así, que en el Movimiento Derecho al Futuro (MDF) sigue flotando la posibilidad de presentar una alianza paralela como resguardo ante un posible quiebre.
Más allá de las suspicacias, todas las voces coinciden en remacar que se está avanzando en el entendimiento entre las partes. “Paso a paso”, sostienen en los tres sectores más trascendentes dentro del esquema peronista.
Por estas horas, según pudo saber Infobae, se trabajaba en la redacción de un reglamento interno para la constitución del frente electoral que se presentará el miércoles.
Más allá de con qué nombre de bautizará el frente, lo que está en debate es cómo discutir las candidaturas y que sea en un todo. “Tiene que ser un acuerdo integral”, explicó un influyente dirigente del massismo que está inmiscuido en las negociaciones cruzadas que hay por estas horas.
Las reuniones se repiten. En la tarde de este martes, hasta el despacho de la Secretaria General del Gobierno, Agustina Vila, llegaron representantes de los distintos espacios que van a conformar el frente. Aunque aún no está resuelto, todo da a indicar que podrían ser los apoderados de esa alianza.
Hubo referentes del PJ bonaerense, de la fuerza de Kicillof y del Frente Renovador de Sergio Massa. Facundo Tignanelli (PJ bonaerense), Eduardo Cernul (Frente Renovador), la propia Vila (MDF), fueron algunos de los presentes.
Según reconstruyó este medio, en ese encuentro se hizo un repaso de qué partidos conformarán la alianza a presentarse el 9 de julio, qué le falta “ajustar” a cada sector, etc. Además del Partido Justicialista y el Frente Renovador, también lo integrarán Nuevo Encuentro, Kolina, el Frente Grande, Unidad Popular, entre otros. Adicionalmente, habrá agrupaciones distritales.
El primer acuerdo sellado es que habrá “apoderados cruzados”, en un esquema de tres patas que conforman el espacio kirchnerista, el MDF y el massismo. Desde ahí se encolumnarán los partidos que vayan a integrar el frente. Por estas horas no está resuelto si serán tres por cada sector o seis.
La condición de que sean apoderados cruzados quiere decir que cada resolución que vaya a sacar la junta electoral del frente deberá estar acordada por los tres sectores. Es una condición sin ecua non.
El tema ya había sobrevolado en el congreso del PJ bonaerense que se llevó adelante ese sábado en Merlo. Allí, antes del acto formal se expusieron distintos puntos de vista. En lo que respecta a los apoderados del partido —que no es el frente a conformarse— se acordó que sea un esquema similar al que se va a aplicar para la alianza electoral.
Se determinó que sean la intendenta de Moreno, Mariel Fernández, y su par de Lomas de Zamora, Federico Otermín, por un lado, y la vicegobernadora, Verónica Magario y el ministro de Infraestructura, Gabriel Katopodis, por el otro. Así, quedaba explícita la participación del Movimiento Derecho al Futuro (MDF) de Kicillof dentro de la órbita del PJ. Sin embargo, también se reconoció la potestad del presidente del partido, Máximo Kirchner. La instancia de “apoderados cruzados” fue una propuesta del sector kirchnerista que terminó imponiéndose.
Para el funcionamiento del frente, se aplicará una lógica similar tanto en la representación como en la toma de decisiones que se lleve adelante a partir de este miércoles y hasta el proceso del cierre de listas del próximo 19 de julio.
A la par, el peronismo empezará a desandar la campaña electoral. Este martes el mandatario provincial abrió la puerta a lo que será la discusión electoral. Lo hizo durante la inauguración de la Escuela Secundaria N° 41 en Derqui, Pilar. “Acá estamos, en estos días, de cara a discusiones electorales. No vine a hacer campaña, sino a decir que en una democracia, el que decide es el pueblo. Lo que tenemos que decidir es si queremos una Provincia con más salud pública, con más escuela pública, con más trabajo, con más producción, con más inclusión social o, por el contrario, queremos que todo se caiga, se pierda y todo se abandone”.
En tanto, un tema que inquieta en algunas terminales del peronismo es la decisión de la Junta Electoral sobre cómo serán las boletas a utilizarse en las elecciones del próximo 7 de septiembre: tendrán color e incluirán las fotos de hasta dos candidatos.
Es que es un hecho que La Libertad Avanza (LLA) competirá con boleta violeta, lo cual —según algunas voces del kirchnerismo— hará cuesta arriba la competencia electoral para el oficialismo bonaerense.