Este municipio es parte de la evidencia de la transformación urbana en lo que fue parte del Lago de Texcoco. Diseño: (Jesús Tovar Sosa/Infobae)

“Vámonos con este tema que es de la música con clase, para toda mi gente de la Ciudad Neza”, decía aquél sonidero que animaba una fiesta en carpa entre calles cerradas. Lo dijo así, antes de dar comienzo al tema de la Cumbia de los Estados del Super Grupo Colombia que puso a bailar al barrio que hacía retumbar el piso al ritmo de las bocinas.

Nezahualcóyotl es uno de los municipios más representativos del Estado de México que, desde sus calles y avenidas, cuenta la historia de 62 años de crecimiento urbano a las orillas de una ciudad que se convirtió en el corazón de la República.

Han sido poco más de seis décadas de transformación panorámica del antiguo Lago de Texcoco a un municipio ordenado que se transformó en casa, hogar y cuna de familias enteras enraizadas en generaciones que cuentan cómo “antes todo esto eran lodazales”.

Según la información consultada por este medio, el decreto que dio origen al municipio fue publicado el 20 de abril de 1963, aunque su funcionamiento como ayuntamiento comenzó el 1 de enero de 1964, tras un proceso electoral que legitimó a su primer Cabildo

Hablar de Neza ha sido una tarea difícil para quienes, con el deseo de conocer la historia de este país, quieren ir más allá de los datos y las fechas, pues para aquellos que encuentran diversidad en la historia, este municipio es uno de los tantos lugares que son ejemplo de resistencia social.

Sin embargo, se podría decir que todo surgió en la década de 1940, cuando el Lago de Texcoco empezaba a secarse, convirtiéndose en un terreno árido que, con la llegada de las lluvias, mostraba el reclamo del agua que convertía el paisaje en una especie de pantano.

Este municipio empezó a ver la luz durante los primeros asentamientos en lo que fue parte del Lago de Texcoco. Foto: (Héctor García/Neza en el Tiempo)

En este contexto, comenzaron a asentarse los primeros habitantes, provenientes de diversos estados del país como Oaxaca, Puebla, Guerrero, Michoacán y Jalisco, así como de zonas de la Ciudad de México, entre ellas, Tepito y La Candelaria de los Patos. Posiblemente, hasta este punto, se podría decir que la Ciudad Neza fue un refugio para familias migrantes que, en aquella época, llegaban cargando el sueño de forjar su propio patrimonio cerca de la tan aclamada capital

La llegada de los primeros pobladores trajo consigo la venta de terrenos, inicialmente de manera irregular, a precios que oscilaban entre tres y cinco pesos por metro cuadrado en 1945. Sin embargo, en 1949, el entonces presidente Miguel Alemán transfirió los terrenos al Estado de México para regular su uso y planificar el trazado urbano. Este proceso incrementó el valor de los lotes que alcanzaron los 200 pesos por metro cuadrado, lo que modificó el perfil de los compradores hacia personas con mayor poder adquisitivo.

La población en la zona alcanzó un aproximado de 100 mil habitantes por ahí de 1963. Ante este asentamiento periférico, la falta de servicios básicos como agua potable y hospitales provocó altos índices de enfermedades respiratorias y gastrointestinales, así como una elevada mortalidad infantil. Además, los conflictos con fraccionadores que revendían terrenos llevaron a los habitantes a organizarse en movimientos como el Movimiento de Restauración de Colonos, que marcó el inicio de una comunidad solidaria y resiliente.

El 20 de abril de 1963, el entonces gobernador del Estado de México, Gustavo Baz Prada, firmó el decreto número 93 de la XLI Legislatura, que fue publicado en la Gaceta Oficial del Gobierno del Estado de México, que reconoció oficialmente a Nezahualcóyotl como el municipio número 120 del estado bajo el nombre de uno de los grandes de la poesía y la política prehispánica.

Nezahualcóyotl significa “Coyote en Ayuno” lo que ha sido marcado por el símbolo del coyote rojo que se alza al centro del municipio y que claramente refiere a su nombre como un símbolo de conexión histórica con un pasado golpeado por heridas incicatrizables que aún es difícil entender en la historia de este país.

En 1970, la población alcanzó los 600 mil habitantes, y para 2020, según datos del INEGI, el municipio albergaba a un millón 77 mil 208 personas, de las cuales 517 mil 59 son hombres y 549 mil 376 son mujeres. Este crecimiento lo convirtió en una de las zonas más densamente pobladas del país y del mundo, aunque la verdad poblacional va más allá de las cifras, pues son más de un millón de historias de hombres y mujeres que diariamente se desplazan dentro y fuera del municipio.

Los servicios al principio eran escasos o nulos para algunas familias en la Ciudad Neza. Foto: (Héctor García/Neza en el Tiempo)

Ya sea en las combis o en el Mexibús que llega a Pantitlán, los habitantes de la Neza son más que números; son madres, padres, abuelos, hijas y amigos que trabajan y forjan, desde el municipio que los vio nacer, su historia dentro de lo cotidiano.

A lo largo de los años, se fortalecieron en este municipio los servicios básicos y se legalizaron las propiedades de tierra, especialmente durante la década de 1980. En el año 2000, comenzaron a construirse las primeras plazas comerciales, lo que marcó un nuevo capítulo en el desarrollo económico y social del municipio.

Actualmente, Nezahualcóyotl cuenta con una superficie de 63 mil 44 kilómetros cuadrados, dividida en 101 colonias y 5 mil 165 manzanas. Su Cabildo está integrado por un presidente municipal, que actualmente es Adolfo Cerqueda Rebollo, seguido de 12 regidores y dos síndicos. Además se han establecido directores de área que ofrecen diversos servicios a la población. Entre las instituciones destacadas se encuentran el Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) municipal y el Organismo de Agua Potable, Alcantarillado y Saneamiento (ODAPAS).

En términos políticos y democráticos, el municipio está dividido en tres distritos electorales federales (20, 29 y 31) y tres locales (XXIV, XXV y XLI). Según el padrón electoral de 2021, cuenta con 838 mil 791 votantes, lo que representa el 8,49% del total del Estado de México.

El

La identidad cultural de Ciudad Nezahualcóyotl se ha forjado a través de su historia y la diversidad de sus habitantes. El municipio cuenta con una amplia oferta educativa, que incluye cinco universidades y un promedio escolar de 8,6 años, igual al promedio estatal. Sin embargo, el habitante promedio aún no concluye la secundaria.

En el ámbito cultural, destaca la presencia de 11 bibliotecas públicas, casas de cultura municipales y el Instituto Municipal de las Bellas Artes, además de espacios como el Auditorio Municipal y el Centro Cultural Jaime Torres Bodet, que alberga una biblioteca, una librería del Fondo de Cultura Económica y salas de exposición.

A pesar de los avances logrados, Nezahualcóyotl enfrenta desafíos significativos, como la falta de espacios verdes y los problemas de delincuencia. Sin embargo, su historia demuestra cómo la organización y el esfuerzo colectivo de sus habitantes han permitido superar adversidades y construir una comunidad sólida.

Hoy, Ciudad Nezahualcóyotl es un ejemplo de resiliencia y transformación, un municipio que, en poco más de seis décadas, ha pasado de ser un terreno inhóspito a convertirse en una de las zonas urbanas más importantes del país.