Tanto la administración de Donald Trump como el Fondo Monetario Internacional (FMI) piden a Milei mayor gobernabilidad, lo que implicará mejorar la relación con los gobernadores (Foto: Reuters)

El Gobierno llega a las elecciones del domingo con algunas metas firmes, otras inciertas y con fuertes exigencias del gobierno de EEUU para el período posterior al 27 de octubre, sin importar el resultado del comicio.

Tanto la administración de Donald Trump como el Fondo Monetario Internacional (FMI) piden a Milei mayor gobernabilidad, lo que implicará mejorar la relación con los gobernadores, como ya reconoció el ministro de Economía, Luis Caputo.

Fue un error de mi lado no haberme involucrado más en lo político, tomaba una posición bastante cómoda que como tenía el soporte del Presidente, los que se dedicaban a la política iban y se peleaban con los gobernadores y después cuando venían a pedirme plata a mi o al secretario de Hacienda nos tenían que cortar un brazo”, afirmó Caputo previo a su último viaje a Washington.

Desde el próximo lunes, y a los fines de conseguir los consensos necesarios en el Congreso para las bautizadas “reformas de segundo orden”, la “canilla” del dinero para las provincias se tendrá que volver a abrir. Lo que puede llegar a impulsar la actividad, pero también puede dificultar la meta fiscal, destacan los informes de las consultoras privadas.

Meta consolidada

Es indiscutible, a pesar de que la inflación desaceleró -lo que vuelve más difícil que las partidas presupuestarias se licuen- y que la recaudación cayó por la eliminaciónes de impuestos y baja de retenciones y aranceles, el Gobierno mantiene las cuentas públicas ordenadas en línea con lo que acordó con el FMI.

Con el último dato fiscal, el ministro se acercó cada vez más a la meta pactada con el FMI

Con el último dato fiscal, el ministro se acercó cada vez más a la meta pactada con el FMI. Durante el 2025, se tomó el compromiso de alcanzar un superávit fiscal primario de 1,6% del PBI. “El frente fiscal para este Gobierno es inquebrantable. Más allá de que es un valor elevado el que hay que conseguir, en los primeros nueve meses ya acumula un superávit primario de 1,3% del PBI“, sostuvo la economista de LCG, Florencia Iragui.

Impulso para la actividad

Independientemente de cuál sea el resultado en las urnas, incluso si La Libertad Avanza (LLA) logra el mejor resultado, los analistas consideran que el oficialismo estará obligado a tener que negociar con los “bloques dialoguistas” para que las leyes se aprueben.

Y luego de más de un año y medio de “motosierra”, la moneda de intercambio con los mandatorios subnacionales podría ir desde más Aportes del Tesoro Nacional (ATN) hasta obra pública para sus provincias.

Sea cual sea el pedido de los mandatarios subnacionales, se espera que el Gobierno abra la canilla de las transferencias de recursos y eso podría llegar a impulsar la actividad. Sin embargo, el Gobierno ya tuvo una luz verde en la última semana cuando el Estimador Mensual de Actividad Económica de agosto mostró un aumento intermensual de 0,3%, lo que despejó transitoriamente los fantasma de la recesión técnica (dos trimestre consecutivos a la baja).

El Estimador Mensual de Actividad Económica de agosto mostró un aumento intermensual de 0,3%, lo que despejó transitoriamente los fantasma de la recesión técnica

“Si al Gobierno le va bien no creo que haya grandes cambios en la política fiscal. Si le va mal, va tener que ceder recursos a los aliados. Sobre todo de obra pública que hoy está paralizada”, comentó el economista de Audemus, Gonzalo Guiraldes.

Aunque se encuentra lejos de su máximo nivel: en lo que va del año, la construcción tuvo todos los meses variaciones intermensuales positivas, en el 2024 fue negativo, con caídas de hasta el 26,4% intermensual en marzo.

Activos externos lejos del objetivo

A pesar de que el ministro de Economía, Luis Caputo, asegura que no va a haber ningún tipo de modificación en el régimen cambiario después de las elecciones, el mercado sigue dudando. Sobre todo luego de las intervenciones del Tesoro de Estados Unidos y las ventas del Banco Central de República Argentina a mediados de la última semana.

El martes, luego que el dólar mayorista llegará el techo de la banda ($ 1.490,5), la entidad que conduce Santiago Bausili se salió a vender USD 45,5 millones y las reservas internacionales cayeron a USD 40.539 millones. Mientras que en las dos ruedas siguientes estuvo la mano de Bessent comprando pesos para evitar que vuelva a pasar.

Pero sobre todo lo que complica la continuidad del régimen de flotación entre bandas actual ($937,39$1.492,55), es lo lejos que está Caputo de poder cumplir con la meta de acumulación de reservas que pactó con el FMI. A diciembre de 2025, tiene que tener netas por -USD 2.600 millones y hoy el mercado calcula que esté entre USD 8.000 millones y USD 7.000 millones por debajo.

Más aún, porque con la baja transitoriade de las retenciones a cero ingresaron por anticipado poco más de USD 7.000 millones del agro que comúnmente se liquidan en los últimos meses del año.

“La meta hoy es imposible de cumplir (de no considerar el swap con el Tesoro de Estados Unidos) si no se cambia el esquema cambiario y monetario”, aseguró Guiraldes. El economista, prevé que luego de las elecciones habrá una renegociación con el FMI de los dos préstamos y se definirán nuevas metas de acumulación de reservas.